Unidos Por una Ley

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Hola a todos mis lectores lamento mi falta de actualizaciones, la vida universitaria se acaba todo mi tiempo, tengo borradores de algunas historias y serán publicados en estos días.

Quiero continuar con las historias eso es claro, pero no cuento con mucho tiempo ahora, aun así intentare escribir en algunos ratos libres o cuando no tenga mucha tarea.

Agradezco su comprensión 

Draco, Fred y Viktor corrían por los pasillos de San Mungo, corrieron hasta llegar al consultorio de la medimaga que llevaba el control de Hermione, al entrar a la habitación vieron a Hermione sentada en la camilla mientras la medimaga ponía algunas pociones y vendaba su brazo, Sirius estaba muy serio mientras tomaba la otra mano de la castaña, Kingsley y Harry también estaban en la habitación, el azabache al ver a los tres hombres llegar les hizo una seña que daba a entender que les explicaría después lo ocurrido.

_ ya revise y realizamos todos los hechizos de detección, no hay ningún rastro de magia oscura en usted, el sangrado se debió a la cercanía con aquel objeto, pero gracias a Merlín no llego a tocarlo de ser así... bueno la situación seria otra.

_ ¿exactamente qué quiere decir con eso? – pregunto con precaución Kingsley.

_ El si lo hubiera tocado el objeto hubiera hecho una reacción como si dagas rasgaran su cuerpo, eso hubiera provocado la pérdida del bebe e incluso la muerte de ella. – la medimaga respondió con pesar.

Aquella declaración tenso a todos en el lugar, había sido un claro atentado contra Hermione y su bebe, para fortuna de ellos, a nadie en el ministerio le había llamado la atención que Kingsley, Harry y Sirius se reunieran en la oficina de la castaña, las reuniones de ellos eran bastante comunes, al ser magos con bastante poder en el ministerio y que sus trabajos estuviera relacionados, claramente también ayudo que Natasha la secretaria de la castaña fuera lo bastante discreta para llamar a los magos.

_ ahora debo revisar el estado del bebe, señora Granger debe recostase.

Hermione hizo aquello de manera automática, aun intentando asimilar que estuvo a punto de perder a su bebe, se levantó la blusa dejando al descubierto su vientre de cinco meses, la medimaga reviso todo y pudo dejar salir una sonrisa de alivio

_ él bebe está bien, tiene una posición de protección, quizá inconscientemente sintió el peligro de Hermione y adopto aquella posición, pero él está bien, deberá seguir tomando las pociones vitamínicas pero todo está en orden.

Aquello tranquilizo a los presentes, una vez que la castaña estuvo más tranquila, más que nada por la poción tranquilizadora dada por la medimaga, le agradecieron a la mujer y Viktor tomo a la castaña en brazos ya que se había quedado dormida, y tomando la red Flu del consultorio llegaron a la mansión, dejaron a Hermione en su habitación dejando a Tommy encargado de la mujer, los hombres fueron a una de las oficinas que tenían.

_ Ahora si nos pueden decir ¡¿Qué fue lo que paso?! – pregunto un exaltado Draco.

_ Según lo que nos dijo Natasha, llego un paquete para Hermione, no es raro que nos lleguen paquetes, muchas veces son regalos como agradecimiento – empezó hablando Harry – ella dijo que vería el paquete después pues tenía mucho trabajo, a la hora de la comida ella iba de salida y debió sentir la magia del objeto y lo soltó, su secretaria nos buscó con urgencia.

_cuando llegamos Hermione estaba hincada en el suelo sosteniendo su vientre, vi que el brazo en el que tenía esa cicatriz comenzaba a sangrar, la tome en brazos y la lleve a San Mungo – Sirius no había cambiado su expresión de seriedad desde lo que dijo la medimaga.

_ ¿revisaron el objeto, debe tener una firma magica o algo? – cuestiono Viktor intentado guardar la calma.

Lo hice en el momento, pero no encontré nada, aun así tendré que revisar con más hechizos, habrá más seguridad en su oficina - respondió Kingsley.

Todos hablaron un poco más antes de que Kingsley y Harry se fueran de la casa, no sin antes dejar en claro que nada de lo que había pasado debía saberse, una vez que ambos hombres se fueron, los demás salieron a poner protecciones extras en la casa, no estaban seguros de a que o a quien se enfrentaban, pero estaban dispuestos a pelear por Hermione y su bebe. Al terminar de poner las protecciones, entraron nuevamente a la casa, y subieron a las habitaciones, Hermione seguía dormida con ambas manos en su vientre, se quedaron admirando aquella escena, con cuidado los cuatro se acomodaron como pudieron en la cama y se quedaron dormidos unos segundos después.

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Harry le había enviado una nota a Luna avisándole que Hermione estaba muy agotada por lo que no podría asistir al almuerzo con las demás chicas, todas comprendieron aquello, pues ellas en ocasiones también se sentían muy cansada y sin ganas de hacer absolutamente nada.

Harry por su parte se dirigió junto con Kingsley a una habitación especial para revisar objetos con magia oscura, ambos analizaron el brazalete y lo único que encontraron fue la misma firma de magia del involucrado en los hechizos lanzados a las chicas hacía tiempo, en un intento de separar algunos matrimonios.

_ ¿Qué haremos ahora? – pregunto Harry.

_ intentar rastrear a quien hizo esto, por ahora, pondremos algunos aurores a cuidar discretamente la oficina de Hermione, también todos los paquetes que reciba deberán pasar por una extenuante revisión – Kingsley se dejó caer en una silla.

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Pasadas un par de horas Hermione despertó debido al hambre que sentía, estaba por moverse pero se sintió aprisionada por algunos brazos a su alrededor, abrazándola por la espalda estaba Sirius, frente a ella estaba Draco, Viktor y Fred estaban acomodados de manera que sus manos tocaban su vientre pero ellos estaban recostados a cada lado de las piernas de la chica, la castaña sonrió, pero su hambre era más por lo que se movió un poco despertando a los hombre.

_ Mione ¿estás bien? – pregunto un preocupado Fred.

_ ¿Cómo te sientes? – cuestiono Viktor.

_ ¿te sientes mal? – pregunto preocupado Draco.

_ ¿debeos regresar a San Mungo? – pregunto un asustado Sirius.

_ Chicos... chicos... ¡Chicos! – El grito de la castaña provoco que los custro guardaran silencio – estoy bien, solo tengo hambre.

Ante lo dicho por la castaña los cuatro se tranquilizaron visiblemente, - ¿te sientes bien para bajar? – pregunto aun preocupado Sirius.

_ estoy bien, quiero bajar – la castaña acaricio suavemente el rostro de Sirius quien beso con cariño su mano.

Draco la ayudo a ponerse de pie y luego de pedirle a Tommy la comida, bajaron al comedor, y se sentaron a disfrutar sus alimentos, nadie mencionaba lo ocurrido por ahora pero podían notar que cada tanto Hermione tocaba las vendas que cubrían su brazo.