My Strange Addiction (Billie Eilish & Tú) G!P

24: ¿Ally obsesionada?

POV BILLIE EILISH:

—¡Lex! — Grité desde el segundo piso. — ¡Alexandra!— Grité nuevamente sin obtener respuesta alguna.

—¿Estabas llamándome?— Dijo ella a la mitad de los escalones. — Sí, necesito que veas esto. — Tomé su mano y la metí conmigo al baño.

—Alex... No pude, lo siento. — Dije y las lágrimas descendieron por mis mejillas. Ella me miró tratando de entender mis palabras. —No estoy embarazada, Alex. — Lloré aún más y Lex me abrazó.

—Amor, está bien. Volveremos a intentarlo, ¿De acuerdo?— La miré con los ojos hinchados. —Perdóname por decepcionarte....

—¿Qué? No estoy decepcionada. Todo está bien, bonita, no importa que no hayas quedado embarazada, intentaremos hasta lograrlo, ¿Bien?— Asentí con la cabeza, ella me cargó y salimos del baño.

Sollocé y me abracé más a ella cuando escuché las voces de las chicas al fondo del patio. Decepcionaría a todas.

—¿Qué sucedió, Billie? — Preguntó Ally. — Amm, Billie no está embarazada.— Respondió Alex y estalle en llanto una vez más. Las chicas se acercaron y me abrazaron.

—¿Por qué se deprimen? ¡Háganlo de nuevo, vayan! — Habló Dinah, luego me empujó al interior de la casa junto a Alex. — ¡Háganme tía, joder! — Todos reímos y asentí con la cabeza levemente. _______ y yo nos miramos, tomé su mano y corrimos escaleras arriba.

—Entonces... Intentemos de nuevo, mi amor. — Rápidamente me deshice de toda mi ropa y me lancé sobre mi novia y caímos sobre la cama en una posición bastante favorable, ella estaba debajo de mi desnudo cuerpo mientras yo me frotaba sobre su polla, ya dura.

???

POV _______ STYLES:

Desperté y Billie estaba durmiendo sobre mi pecho. Acaricié suavemente sus mejillas rosadas y después besé sus labios repetidas veces.

—Bills.— Susurré. — Despierta, nena. — Besé su frente y me levanté de la cama dispuesta a dejarla dormir un poco más. Me puse mis bóxers y mi top.

Bajé las escaleras y pude visualizar a las chicas cenando en la terraza. Sonreí y comencé a caminar hacía ellas.

—¡Hola! ¿Cómo te fue?— Preguntó Lauren cuando estuve lo suficientemente cerca de ellas. Normani y Ally recorrieron mi cuerpo con la mirada.

— ¡Dios mío! Acabó conmigo. — Respondí y reí un poco. — Ve por Billie mientras yo les sirvo la cena. — Dijo mamá y asentí. Con tranquilidad caminé escaleras arriba, sentí pasos detrás de mí y me giré para encontrarme con Ally.

—Oh, Hola. — Sonreí sin separar mis labios. —Ven, solo serán unos minutos. — Asentí y la seguí hasta una de las habitaciones de huéspedes.

—Alex, quiero que me hagas tuya, házlo. — Susurró Ally una vez que estuvimos encerradas en la habitación. — Mierda, no. Ally, eres como mi hermana menor y te he dicho que amo a Bills. — Dije, muy segura de mis palabras. — Vamos, sé que también deseas follarme... — Comenzó a besar ni cuello y la aparté rápidamente.

— ¡Por Dios, Ally! Te he dicho que no. — Gruñí y salí de la habitación furiosa. Traté de calmarme y entré a la habitación donde mi linda novia se encontraba durmiendo.

— Hola, mi amor. — Saludó ella. — Hola, bonita. — Me tiré a su lado y la besé.

—Bebé, necesito contarte algo. — Billie me miró espectante.

—Ally me confesó su amor. — Hice una pausa y suspiré. — La noche de la fiesta, dijo que me amaba y nos besamos, pero no pasó nada más. Le dije que te amo a ti y no podía hacerlo. — Un par de lágrimas cayeron por mis mejillas, ahora, rosadas.

—Lex, aprecio que estés siendo sincera. ¿Qué más pasó? — Tallé mis ojos y volví a hablar. — Ella me siguió hasta acá y me llevó a una habitación, me acorraló y quería follar conmigo, ¿Puedes creerlo? No conocía esa parte de Ally, la gran Ally Brooke, la tan religiosa chica. — Suspiré nuevamente.

— Perdóname, mi amor. Te juro que no hice nada con ella. — Me senté en la cama y Billie solamente me besó. — ¿Eso es un "Si"? — Pregunté.

—Claro, y está bien lo del besó, hasta yo te hubiera besado. Es que eres muy guapa y tienes cuerpo de diosa, mira esos abdominales. — Tocó mi abdomen con sus fríos dedos y ahí supe por donde iba el asunto.

—¿Alguien más quiere follar?— Pregunté con una sonrisa pícara. — Mhm, como no tienes idea. — Me puse sobre ella y sin dejar caer todo mi peso, besé su cuello dejando algunas marcas.

—¿Quieres follar ahora?— Dije entre besos. Billie llevó su mano a mi bulto y lo masajeó por encima de la tela. Continúe dejando un camino de besos desde su cuello hasta llegar al dobladillo de sus bragas.

—Mierda, son solo unos besos y ya me tienes jodidamente dura. ¿Puedes creer esos efectos que tienes sobre mí? — Susurré con una pequeña sonrisa.  —Ahora voy a follarte hasta que tus piernas duelan. — Billie me miró con sus pupilas completamente dilatadas.

—Follame, ahora. — Quité sus bragas y las lancé a algún lado de la habitación. Dí una lamida a su intimidad y ella arqueó la espalda. Mi polla dolía de tanta excitación. Tomé su clítoris entre mis labios y lo succione, continúe lamiendo su intimidad.

—¡Voy a correrme! — Dijo en un gemido. Dí una fuerte chupada y Billie con un grito anunció su llegada. — Joder, eres demasiado buena en esto. — Dijo y me besó, probándose así misma. Quité su brassier y masajee sus pechos unos minutos.

—¿Estás lista?— Pregunté separando sus piernas un poco más. — Vamos, Lex, solo entra en mí. — Susurró y obedecí. Quité mis bóxers y tomé mi miembro, lo lubrique un poco con sus jugos. Lo introduje en su vagina y ambas soltamos un gemido.

—¡Oh, mierda! ¡Más... Fuerte! — Gritó y aceleré mis movimientos, yendo más profundo. Saqué la gran parte de mi miembro y lo volví a introducir bruscamente. — ¡Ah, justo así! — Imite la acción un par de veces más.

— Eres muy deliciosa, Bills. — Gemí y tomé sus muslos, penetrandola más fuerte y profundo.

— Estoy cerca, Billie. — Advertí. Sentí mi polla vibrar y los chorros de mi semen llenaron su cavidad vaginal mezclándose con sus jugos.

Minutos después, Billie y yo nos vestimos y bajamos a cenar. Las chicas nos miraron con una sonrisa burlona en su rostro y yo reí también.

— Ustedes si que quieren tener hijos. Eh. — Habló Dinah. — Billie, nena, deberías de hacer menos ruido. — Dijo Normani.

—¡Ja! Estas celosa porque a ti no te dan. — Respondió Billie y reímos.

—Vamos a cenar. — La tomé de la cintura y caminamos hasta nuestras sillas. Ally estaba mirándome fijamente desde que aparecimos en el patio.

¿Estará obsesionada conmigo?

— Te amo. — Le dije a Billie y besé su mejilla. — También te amo, Lex. — Ambas nos miramos sonriendo y juntamos nuestros labios.

Continuará...