mentiras blancas

Capitulo 6

P.O.V: Chay

Abrí mis ojos lentamente tratando de acomodarme a la luz

Veía una silueta borrosa justo frente a mí, la misma se iba aclarando poco a poco

Tenía un leve dolor de cabeza, junto a un tenue mareo

—¿Estás despierto?— Preguntó Macao

Al escuchar su voz rápidamente me levanté y me senté en la cama apoyado en el espaldar

Todos los recuerdos de "ese momento" llegaron a mi mente. Las emociones vinieron a mí como si lo estuviera volviendo a vivir aquel no tan maravilloso suceso

Un nudo se formó en mi garganta y ni siquiera podía formular bien las palabras

Estaba asustado por todo lo que había pasado, pero mi preocupación por los sentimientos de macao era más grande

"¿Que habrá pensando?" "¿Cómo se habrá sentido al ver mi reacción?" "¿Acaso la culpa lo está comiendo por dentro?" Fueron pocas de las preguntas que llenaron mi cabeza en esa milésima de segundo

Lo más probable él me odie por detenerlo a mitad de "acción", seguro a de pensar cosas horribles sobre mí

Macao es una de las personas más lindas que he conocido y no me perdonaría si lo  lastimo algún día de cualquier manera posible

—Yo...— Intenté hablar.

Movía mi cabeza de un lugar a otro en busca de las palabras adecuadas.

Mis manos no podían quedarse quietas debido a la ansiedad, y estoy más que seguro que Macao notó esto

Con una de sus manos tomó las mías dejándolas inmóviles y con la otra agarró mi barbilla haciendo que nuestras miradas se encontraran

—Ey, tranquilo. Todo está bien. No estoy enojado contigo ni nada por el estilo, de hecho, estoy preocupando y me gustaría disculparme. Debí tomar en cuenta que iba demasiado rápido, lo más probable solo querías un beso y yo me apresuré — Dijo Macao sin soltar mi mentón

—No digas eso. Tú haz sido perfecto, pero yo no he sabido valorarte— Respondí avergonzado para luego bajar mi mirada

—Rey... No te preocupes, desde ahora prometo cuidarte mejor, tratar de entender las cosas que quieres y sobre todo no besarte con una guitarra en la mano— Hizo una pequeña broma para alivianar el ambiente y yo no pude evitar reír un poco, aunque esto no hizo que mi preocupación se fuera del todo

—¿Puedes considerarme como un pretendiente?— Preguntó

Yo me quedé completamente anonadado, pensé que después de hoy simplemente renunciaría a algo conmigo, pero no lo hizo.

Macao nunca se rendía sobre lo que quería. Era algo que me parecía muy interesante y sinceramente un poco atractivo

—No necesito que seamos pareja ahora mismo, pero por favor no te cierres a mí, porque estoy dispuesto a conquistarte.— Siguió hablando

No puedo creerlo. Sus palabras eran iguales de dulces que siempre, no parecía estar enojado en lo absoluto

—Voy a unir todos los pedazos de tu corazón, para que esa sola pieza me pertenezca a mí ¿Me permites hacer eso?— Preguntó con sus ojos aguados, pero no de tristeza, sino de amor y ternura.

La mirada de Macao era tan expresiva que era capaz de leer todos sus sentimientos. Podía ver cómo claramente no mentía y realmente me quería. Él me deseaba a mí y estaba dispuesto a esperarme