mentiras blancas

Capitulo 17

—Kim...¿Que haces aquí?— Dije en voz baja

Él no me respondió, solo me miraba a los ojos

Me ponía muy ansioso, tenía ganas de pegarle, pero irónicamente mi cuerpo no respondía a lo que mi mente pedía

Lo odiaba tanto. Quería verlo llorar, pero algo dentro de mí me lo impedía.

No tengo idea del porqué. Solo sé que necesito salir de aquí lo antes posible. No puedo seguir viéndolo a la cara

"Vamos piernas. Hagan su trabajo y muevanse"— Pensé

Kim:Toma— Dijo entregándome un ramo de flores color rosa

(Las rosas rosadas o rosa simbolizan la bondad, la simpatía, la gratitud y la belleza de una persona. Obsequiar una rosa rosada a una persona apreciada es un gesto de cariño, generosidad, respeto, ternura y admiración. Las rosas rosadas indican gratitud y la ausencia de malos sentimientos e intenciones.)

—¿Por qué me entregas eso? Macao no querrá recibirlas después de cómo lo dejaste— Dije confundido 

Kim:No vine a verlo a él, sino a ti— Respondió

Me quedé completamente atónito ¿Por qué carajos quería verme? ¿En serio tiene los cojones de hablar como si nada hubiera pasado? Literalmente ha dejado a mi novio mal herido y luego se aparece aquí en el hospital sin remordimientos algunos

—Tú y yo no tenemos nada de que hablar— Respondí rechazando las flores

—Solo recibelas— Me las puso en las manos a la fuerza y sin darme cuenta yo ya las estaba sosteniendo

—Acostumbrate. De ahora en adelante voy a pretenderte— Dijo para luego meter sus manos en sus bolsillos

—¿Que carajos....?

No puedo creer esto. Mi mente está en blanco. El descaro que puede llegar a tener Kim me sorprende demasiado

—Voy a quitarte de las manos de Macao y volverás a ser mío. Nos perteneceremos como aquella vez— Seguía hablando

Yo no respondía. Aunque quisiera, mis palabras no salían y había perdido el sentido de la voz

—Espero que sepas que somos almas gemelas y por eso aún no me has reprochado ni pegado, aún después de lo que le hice a Macao

Era cierto.... Me imaginaba maltratandolo y haciéndolo llorar, pero cuando lo tenía al frente, yo... Yo no podía reaccionar correctamente

—Sé que amas a Macao y tal vez es el amor de tu vida,pero quiero que sepas  que una parte de nosotros siempre le pertenecerá al otro

"Cállate Kim. Solo cállate y vete"— Pensaba lo que mi boca no quería pronunciar

— Por eso estas igual de nervioso que la primera vez y muy en el fondo, sabes que lo que te digo es cierto 

—Esta vez prometo no lastimarte— Se acercó a mí y mis piernas se volvieron gelatina

Él metió algo en mi bolsillo, aunque no pude ver que era exactamente. Se dió la vuelta y sin más, salió del lugar

Yo quedé ahí parado solo. Sorprendido y sin idea.

"La comida de Macao"— Pasó como rayo por mi mente

—Dios mío. No puedo creer que lo haya olvidado— pensé

Salí corriendo hacia la cafetería y tiré el ramo de flores en el primer basurero que encontré 

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Entré a la habitación abriendo la puerta lentamente para no levantar a Macao, pero ya Vegas y Pete estaban dentro