Capítulo 22

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La mayoría de las veces, las pesadillas son causadas por medios como las películas y los libros, algunas personas son capaces de repetir lo que se vio o se escuchó incluso en los sueños.

Otros más desafortunados viven en sus sueños, las pesadillas de su vida diaria.

En mi caso, la mayor parte de mi vida había tenido pesadillas causadas por diferentes factores, sin embargo, los sueños no siempre son lo que uno cree.

Al despertar esa mañana, el dolor de cabeza era insufrible, sentía que mi estomago se revolvía y el Sol que entraba por la ventana era intolerable.

Apreté los ojos para intentar pensar con más claridad, pero es que todo era muy confuso.

Me miré y tenía una playera de Nirvana que me llegaba hasta los muslos, el cuarto olía de una forma muy peculiar, conocía ese aroma, era de...

¡Un ronquido cerca de mi oreja!

Salté como una psicópata fuera de la cama sin hacer ruido alguno y me tranquilicé un poco al ver que solo era Max.

Esperen...

¡Yo y Max en una cama!

Y Max tenía el torso desnudo.

Comencé a hiperventilar y a dar vueltas en la habitación.

¿Por qué mierda no recordaba nada?

Mis manos se estrujaban en mi regazo y, un fuerte dolor de cabeza me atacó en ese momento, fue tan intenso que incluso tuve que sentarme en la cama para no caer.

Max se removió un poco para después girarse, hizo una especie de ronroneo y buscó mi mano, cuando la encontró sentí otro fuerte mareo y fue como si me lanzaran un cubetazo de realidad.

>>> In my Mind:

Victoria y yo literalmente nos estábamos devorando... entonces Max abrió la puerta y nos vio y juró odiarnos por el resto de nuestras vidas.

¡No, no, no!

Así no fue...

No estaría en la cama de Max si eso hubiera pasado...

Bien, entonces...

Cuando Victoria y yo nos besábamos vimos una luz brillante y nos separamos al instante, la luz provenía del exterior pues Max había abierto la puerta del garaje, luego él subió a la camioneta y nos miró a ambas, diciendo:

Es hora de ir a casa chicas.

Max comenzó el trayecto mientras yo me adelantaba hacia su asiento y lo tomaba del hombro, sentí como Victoria se deslizaba por el asiento y pegaba su frente a la ventanilla, del lado contrario a nosotros dos.

¿Me podrías hacer un favor? le pregunté de una forma muy extraña porque las palabras apenas y me lograban salir.

¿Sucede algo? — su tono de voz era preocupado.

Solo llévame contigo...

¡No!

No le dije eso.

Nunca me atrevería a decirle algo así a Max frente a Victoria...

Entonces, lo que salió de mi boca fue:

No me lleves a mi casa por favor, no está mi papá y eso significa que en la casa esta...

A different kind of blue✅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora