Before You Leave [FANFIC STEDDIE]

Hawkins 1984, VIII

Steve Harrington

Después de que ambos despertaron, Eddie poco a poco volvió a su actitud distante, sin embargo, le invito a quedarse a cenar.

Sentados en la sala, cada uno con un plato y un pedazo de pizza el silencio era cada vez más doloroso. No quería ser el quien lo rompiera pero Eddie parecía no tener planes de hacerlo así que decidió arriesgarse.

— Ummm... La pizza es rica.

— Ajá

— ¿Dónde la compras?

— En la única pizzería cercana.

— Oh... ¿venden algo más?

— ¿En una pizzería?

El tono algo molesto de Eddie le intimidaba pero no quería darse por vencido.

— La pizza con piña sabe bien

— ¿Qué?

Bingo. Por primera vez Eddie había dejado de mirar su pizza y tiraba su cuerpo hacia él.

— ¿Qué? — dijo Steve conteniendo una sonrisa y encogiéndose de hombros

— Estás hablando de una aberración culinaria en todos los niveles

— Dramatizas

— Tu, Steve Harrington, eres cada vez más desagradable

Apesar de sus palabras, una leve sonrisa ya se dibujaba en sus labios

— Oye, no me juzgues por mis gustos. Son algo peculiares pero... Son los mejores

Mientras hablaba miraba fijamente los labios del contrario. Vaya que sus gustos eran peculiares.

— Pregúntale a cualquiera, es horrible

— Quizás no me interese lo que la gente piense sobre lo que me gusta

El tono de Steve era algo pausado, sin dejar de mirar a Eddie. Éste pareció notarlo y se agachó, repentinamente nervioso. A Steve le pareció adorable.

— Bueno, eso no parece en la escuela — respondió Eddie finalmente mientras se ponía de pie sin mirar al castaño

Steve resopló algo frustrado.

— Eddie — dijo de nuevo en voz baja , al ser ignorado aclaró su garganta y repitió aquel nombre en voz más alta — Eddie

— ¿Eh? — dijo el chico apenas mirándolo

— Mírame. Por favor.

Eddie puso los ojos en blanco y levantó la vista.

— ¿Qué?

— Perdón. Soy un imbécil. Un imbécil preocupado por lo que gente aún más imbécil pueda decir. Y yo .. en serio lo siento. Por dejarte ahí.

Eddie cruzó sus brazos algo pensativo. Pasaron segundos que a Steve se le hicieron eternos hasta que una pequeña sonrisa empezó a aparecer en los labios del menor.
Ahí estaba. Haría lo que fuera porque esa sonrisa no desapareciera.

— Bueno, me ganaste en la parte de "soy un imbécil".

— Eres insoportable

Ambos chicos comenzaron a reír y Steve, sin pensarlo se levantó y se acercó a Eddie.