Capítulo 16

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Morgan miró por última vez el andén, dando un visto rápido al tren escarlata mientras seguía a su tío Peter al punto de aparición. Hannah, a su lado, tenía los hombros caídos y arrastraba su baúl con pena en el rostro; la tristeza que su hermana exudaba era tan profunda que le estrujaba el corazón con solo verla. Quería sujetarla de la mano y darle un apretón reconfortante, pero no quería molestarla. Estaba seguro que si estiraba su mano y Hannah lo miraba, le daría la misma expresión que tuvo en su encuentro en la entrada del castillo: Enojo.

Suspiró resignado, no podía hacer más que comprender su enojo y tristeza. Por su culpa los obligaron a retirarse del castillo a solo días del fin de clases, sin la oportunidad de despedirse adecuadamente de sus amigos o de darles una excusa convincente. No verían ni contactarían a nadie durante el verano, y eso debía resultar tan sofocante a Hannah como ya lo era para Morgan. Con algo de suerte recibirían visitas por la red flú (si es que su nueva casa contaba con una chimenea), y si así fuera, un selecto grupo de personas asistiría a ellos. Morgan de verdad esperaba que la indignación de Draco o Pansy por no comunicarse se les pasara pronto a su regreso a clases, sus amigos lo vieron empacar todo en su baúl por la noche y Morgan logró engañarlos bajo la excusa de que deberán viajar pronto por el asunto de su enfermedad. Blaise estaba tan feliz que fuera así que le dio un gran abrazo, diciendo que se comunicarían con él todos los días esperando avances. Morgan puso todo su esfuerzo en no echarse a llorar frente a todos. Ni si quiera estaba seguro si iba a sobrevivir durante el verano, pero no dejó que ellos lo notaran, tan solo sonrió y, para hacerlos reír, le pidió a Blaise que le diera Cryss un beso de su parte y le contara el motivo de su partida.

—Niños, apresúrense — Instó su tío, deteniéndose en una esquina apartada del andén.

Las bolsas oscuras debajo de los ojos cafés de tío Peter y el aire cansado que se quedó en su rostro, daban la apariencia de haber envejecido. ¿Cómo era posible eso con solo unos días de diferencia?, se preguntó Morgan consternado.

Tomó la mano extendida de su tío y Hannah la otra. Sintió un tirón desagradable en el estómago, sus pies parecieron desprenderse del suelo y se aferró a la mano de su tío cuando aterrizaron de nuevo. Morgan abrió los ojos de inmediato y evaluó la zona con cautela.

Estaban en un bosque, no podía determinar cuál, pero era casi tan denso como el bosque prohibido, mucho menos tenebroso que el otro si podía decirlo. Había pinos altos que se elevaban sobre ellos y su olor se esparcía en el aire sin problema. Morgan se cuestionó si el aplastante silencio se debía a las mismas protecciones colocadas en el área o era solo su paranoia que se apropiaba una vez más de él. Al mirar al frente encontró una casa de ladrillos; Enredaderas con brotes floreados trepaban por las paredes, incluso había musgo en las rocas cercanas. La casa contaba con dos pisos, sin balcones o jardines grandes, un pequeño sendero guiaba a los dos escalones de entrada y una lámpara de gas apagada colgaba encima de la puerta. Morgan ya extrañaba su casa pequeña en medio de un jardín enorme con solo verla.

Tío Peter sacó su varita del bolsillo y levitó sus cosas hasta la casa. Morgan se cruzó de brazos caminando, intentando observar el interior de la casa desde las ventanas y el rastro de sus hermanos o su tía. No hizo falta, tía Celine abrió la puerta de madera y sonrió de oreja a oreja al verlos, a pesar de lucir igual de cansada que su tío Peter, su calurosa bienvenido fue lo más reconfortante que Morgan tenía hasta ahora. Hannah gimió al verla y corrió a abrazarla con fuerza, su tía soltó una pequeña risa mientras la peinaba con sus manos. Morgan se acercó a ella nervioso y cuando su hermana se apartó, tía Celine lo arrastró a un fuerte abrazo que anudó mucho más fuerte su pecho.

—Mis niños... — Murmuró ella sobre su hombro. Se apartó de Morgan y sostuvo su rostro con ambas manos, mirándolo con detenimiento — ¿Seguiste tu tratamiento? ¿Cómo te sientes?

Voz Silenciosa || Harry James PotterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora