Capítulo 23

5.4K 487 12
                                    

─¿Puedo preparar algo delicioso para ti?

JungKook se sonroja cuando nuestras miradas se encuentran, sonríe... Y yo sonrió por él. Me acercó con el corazón latiendo a mil por hora, acomodó esa carita de ángel entre mis manos. Sus bonitos labios almohadados me invitan a que los haga míos... Sus mejillas cobran más rubor cuando nuestros rostros están a centímetros.

... Me hace actuar como un tonto. Estar en casa con mi Omega es todo lo que una vez pude haber pedido desde niño...

Él insistió en ponerse mi ropa, después de bañarse en casa, lo veía a cada segundo como se acurruca entre mi aroma hace que mi Alfa aullar de felicidad. No me importaba nada más que JungKook.

─Claro que puedes, amor...─. Nuestras bocas se unieron, el toque tan suave, tan delicado, tan dulce... tan hermoso. JungKook me abrazó y mis manos cayeron con lentitud hasta su cintura, reforzando la zona y seguir besando esa tentadora boquita─... Te amo.

Estoy seguro que mi antiguo yo estaría sorprendido, bastante sorprendido por aquellas sagradas palabras que salen de mi boca en este momento. Lo repetiría tantas como un susurro en su oído, cada mañana si es que el futuro me permite apreciar sus ojitos al despertar.

─Te amo, Minnie...

JungKook vuelve a besarme y no me opongo, mi boca hace de la suya un color más rojizo por las mordidas, profundizó nuestros movimientos, nuestros toques... Siento como una de sus manos sostiene la mía, guiándome a su trasero. Inevitablemente, una pequeña risa de mi parte atrae su carita enojada.

Tan lindo.

─¡Minnie!

No hagas ese pucherito que te hago el amor aquí mismo.

─¿Vas hacer un berrinche, bebé?

JungKook se enoja más, ¿ya he dicho que su carita es como tener a un conejito irritado? Si le digo, seguramente se molestará más.

─Me iré a ver televisión...─. JungKook gruñe cuando lo abrazo inmediatamente por detrás, dejándolo sin escapatoria y lo siento temblar bajo mi tacto, al momento que mi boca marca ese blanquecino cuello con mis besos. Lo escucho suspirar─. No voy a caer.

─Mh... ¿No?

Una sonrisa de pronto no tarda en aparecer en mi rostro cuando esos ojitos ven como mis manos se escabullen bajo aquel camisón, su piel se estremece a mis manos... Sé que él hace ejercicio y siento mi miembro punzar cuando las puntas de mis dedos tocan su abdomen.

Jungkook es jodidamente comestible y cualquier mínima acción de su parte, ya me tendría con una erección.

─... Hy-hyung...─. Su respiración se torna agitada, las mejillas ahora mismo están rojas cuando mis manos llegan a sus pezones, los acarició con lentitud, apretando y estirando esas tetillas. Veo como muerde sus labios al retener los gemidos que quiero escuchar─... A-ah... Ah... Hyung...

JungKook se apoya en mi pecho, no me mira y lo sé... Está avergonzado. Mechones de cabellos cubren su tímido rostro, y sólo aumentó la estimulación en sus inflamados pezones. La cantidad de feromonas que su cuerpo suelta me hace saber que esta ansioso, excitado... Esperando que lo tome en ese mismo instante.

─... Hy-hyung...

─¿Mh?─. Mi aliento queda en su cuello, él se remueve y noté su intención, ese apetecible traserito está buscando mi erección... Buscando que lo folle ahora mismo.

¿Sería buen momento decir que necesito bañarme para después... tal vez hacerlo?

JungKook me matará, lo sé. Provocarlo no estaba en mis planes... Un tanto sí.

─Amor...

Él no me permite continuar, apenas su carita se gira a verme, nuestras bocas ya estaban juntas y buscando más contacto de lo que ya teníamos. Su cuerpo es alzado por mis brazos, sus manos sujetaban mis cabellos y mande mi autocontrol nuevamente a la mierda...

¿Quién dice que no se puede hacer el amor en la ducha?









¡hey, gigante! › jikook.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora