¡hey, gigante! › jikook.

Capítulo 36

─JiMin. No. ¡JiMin!

─Sshh, solo estoy abrazándote.

─Uhm. Pollito mentiroso.

Estábamos en la habitación de JungKook. No aguantaba mi risa a su carita sonrojada, tímido a mis toques bajo las cobijas. Él dormía con un simple camisón, dejando todo lo demás expuesto y yo, solamente con unos bóxer. Vamos, quería un poquito, mucho acción.

JungKook movía a varios lados su rostro, negándose a mis besos en esas mejillas rellenitas y sus labios rojizos, anteriormente los había mordido a mi antojo.

─Quiero hacerlo, bebé.

─SeungWoo duerme en la otra habitación, Mochi. Nos puede escuchar.

Eso es lo que quiero.

─Seremos silenciosos. Al menos que... Controles esa boquita que tienes.

JungKook gruñó, golpeando mi pecho y refunfuñar mientras me abrazaba. Sentía esas manitos tocar casi mi desnudez, se que él quería... Solo tenía que convencerlo más.

─Vamos, amor.

─Nop.

─¿También me negarás unos besos?

─Uh, eso acepto.

Bingo.

JungKook unió nuestras bocas, besando tan lento, como caricias en los labios del otro, tan tranquilo... Tan dulce. Pero yo quería más. Escuché un jadeo de su parte cuando lo dejé debajo mío, abrí esas bonitas piernas blancas, acomodándome en ellas. JungKook se movió, gruñendo, tratando de apartarme: no lo hice. Mordí su boca, jugando con su lengua y enlace nuestras manos, fingiendo embestidas aún con los bóxer puestos. JungKook gimió en mi boca, apartándose y baje mis besos a su cuello, mordiendo, lamiendo cada contorno. Mis dedos acariciaron el borde de esos bóxer que él llevaba puesto, bajándolo.

─JiMin... Bien, me rindo. Me rindo.

Solté una pequeña risa, envolviendo su pene en mi mano. Subiendo con fuerza, apretando la punta y manchando mis dedos con esas gotitas de semen. JungKook mordía sus labios con fuerza, negándose a gemir.

─No, no... Minnie... Me harás... Me harás gritar.

─Tendrás que aguantar, bebé. Si no quieres que tu amiguito nos escuché, ¿mh?

JungKook gruñó, queriendo golpearme y sostuve su brazo con mi diestra, acerque mi boca aquellos tatuajes, dejando besitos alrededor y lamiendo su pintada piel. Mientras mi zurda aún masturba ese miembro rojizo, palpitante y quise envolverlo con mi boca.

─Oh, Hyung... Más fuerte. Más.

Lo sentí removerse, respirando entrecortado y dándome más acceso al abrir más sus piernas. Poco a poco, esa piel empezó a brillar por el sudor y la respiración de mi Omega no hacía más que aumentar, mi Alfa queriendo tomarlo, estaba perdiendo mi cordura en controlarme. Solté su miembro, escuchando un insulto de su parte, guíe mis manchados dedos a esa entrada rojita y necesitada, metiendo tres dedos de golpe. JungKook abrió sus labios, cerrando con fuerza sus ojos y note como sus piernas empezaron a temblar. Lo sentía tan estrecho, muy apretado.

─M-Minnie...

─Omega...─. Mi lado animal había salido, olfateando el cuello de JungKook y lamiendo su mentón. Debía controlarme, maldición─. JungKook, bebé... Necesito, necesito un-...

Él suspiró, mordiendo mi mejilla y sacó un condón de aquella mesita de noche. Lo abrió con cuidado, deje que me lo pusiera, bajando mis bóxer y masturbo un poco antes de guiar la punta a su entrada, saqué mis dedos manchados de su lubricante natural. Agarré el falo, adentrándome poco a poco... Sintiendo su estrechez, sin duda, disfrutaría muchísimo esa noche.

─... Quiero que seas fuerte, Alfa... ─. Los ojitos de mi pequeño estaban verdes, tan brillantes y hermosos. Abrazándome y у olfateando mi cuello, lamiendo mi expuesta piel. No me contuve a follarlo con fuerza, mis embestidas sin ritmo y un poco bruscas. Escuchando esos gritos, esos gemidos y sus suspiros. JungKook chilló─. Más, Alfa... Más.

─Como órdenes... Omega.

Mis manos bajaron a esas nalgas, apretando con fuerza y solo podía ver como mi pene se perdía en ese rojizo ano, JungKook me recibía tan bien. Necesitaba tanto su cuerpo, follarlo, marcarlo... Besarlo. Todo el tiempo sin él, me había contenido tanto. Mi Alfa esperando su regreso, ahora, teniéndolo en la cama, desnudo, escuchando esos gemidos, Jungkook era la personita que me prometí a mi mismo cuidar. A pesar de mi torpeza en ser romántico, lo intentaría por él.

─... Ah, ¡Hyung, Hyung!

JungKook se había corrido, sin embargo yo aún no estaba cerca, escuchando aquel obsceno golpeteo de nuestra piel. Bese su boca, atrayendo su cuerpo al mío, al momento de sentarme y JungKook me miró con ojitos llorosos al sentirme tan profundo.

─Vamos, bebé. Ayuda a tu Alfa.

Lo sentí moverse, agarrándose de mis hombros y empezar a dar saltitos. Esa boquita gimiendo mi nombre, el interior de sus muslos estaban rojos. Levantando su cadera y dejándose caer de forma brusca, esa carita sonrojada formando una mueca y besando su cuello, él me dio más acceso.

─Hazme tuyo, Alfa. Márcame. Márcame, por favor.

Estaba realmente excitado, con esas palabras lo hice sentarse con mi pene dentro, abrazándolo con posesión, corriendome en el preservativo y... mis encías picaron, sacando mis colmillos mordiendo su cuello. JungKook jadeo, abrazándome y esas uñas raspando mi piel.

Era mío. Completamente mío.

** Posdata: Según el autor original de la historia, SeungWoo horas antes había salido a comprar, por lo tanto el plan de nuestro dulce JiMinie fracasó JAJAJJD