TRILOGÍA "Oscuridad" 🕯
LIBRO 1
(+18)
Maldigo el día que pensamos que sería buena idea hacer un ritual.
Un maldito ritual fue el que nos metió en todo este lió. Y al final yo y mi mejor amigo fuimos los más afectados.
Ya no hay tiempo de mirar atr...
- Osea, nos casamos. ¡¿Yo dije que si y tú también?! - asintió.
- Entonces, ¿qué pasó? ¿Porque perdí la memoria?
- Mi padre jamás estuvo de acuerdo con nuestra relación. Él quería que me casara con alguien que "valiera la pena". - auch.
>Rechace su oferta porque en realidad yo te amaba a ti. Él estaba molesto por lo de nuestra boda pero no hizo nada y nos casamos. Tu...tu te embarazaste y él lo perdió todo. Nos atacó y perdiste al bebé. - lagrimas brotaban por sus ojos. - Era una niña.
Mi corazón se encogió y empecé a llorar. Iba a ser madre. Y me lo arrebataron. Amón miro mi rostro y quito las lágrimas. Me atrajo hacia él y lloré sobre su pecho.
- No pude protegerlas, tú entraste en una depresión horrible y tuve que borrarte la memoria, también para protegerte, y tuve que llevarte lejos de mi. Fue la peor decisión que tomé en mi vida pero necesitabas sanar.
- Amón, yo...lo siento. No pude proteger a nuestra hija. Tu padre tenía razón, necesitas alguien que realmente valga la pena. - Tomo mi rostro y me hizo mirarlo.
- No vuelvas a repetir eso en tu vida, ¿me oíste? Eres la mujer que amo, solamente contigo puedo sentir amor. Y eso es emocionante y aterrador a la vez.
- No pertenezco aquí, no encajo en tu mundo. Si no pude proteger a mi hija, ¿que dice eso sobre mi? - me aleje de él levantándome.
- No necesitas "encajar"en mi mundo porque tú lo eres. Eres mi mundo, entiéndelo cabeza hueca. - me tomo un sus brazos y me acurruqué con el. Caímos en el piso, sentía sus caricias pero solo podía llorar. Era mucho que procesar.
- Perdón, debes pensar que exagero las cosas. - intenté separarme de él pero me sujeto más fuerte.
- Debes dejar de decir cosas tan bobas. Ni siquiera se como se te ocurren tantas a la vez.
- Gracias Amón.
- Te lo dije una vez, siempre estaré aquí cuando caigas. Y no me importa caer en el abismo si es por ti.
- Qué romántico té pusiste. - lo apunte. - ¿Quien eres y que le hiciste a Amón?
Se rio. - Solo se esconde, esta muy enamorado de ti, que le da pena salir.
- ¿Estás enamorado de mi?
- Cada parte de mi cuerpo y mi alma lo están.
- Entonces no soy la única loca que lo está.
—————
Salí de su habitación a escondidas, se nos había pasado la tarde hablando y no había comido nada. Llegue a la cocina y había fruta pero no quería comer algo sano hoy.
Abrí el refrigerador y para mi sorpresa había tonelada de comida, abrí el congelador y había helados de todos los sabores. Tome uno de sandía, mi favorito y también una cuchara.
Empece a comerlo muy a gusto cuando sentí unas manos frías tocar mi cintura y grite con helado en la boca.
- Soy yo, tranquila. - Amón apareció detrás de mí y se puso a mi lado mientras tomaba el helado y lo guardaba.
- ¿Porque hiciste eso? - me quito la cuchara de la boca y la puso en el lavabo, inmediatamente se lavo y se guardo en su lugar.
- Porque no puedes comer helado sin haber comido algo de comida real.
- Eso es comida real. - proteste con las manos en la cintura.
- No lo es, porque yo lo digo y punto. - lo arremede y le enseñe la lengua. Saco una olla grande y empezó a sacar pasta.
- ¿Vas a cocinar algo para mi?
- ¿No es muy obvio? - cocinó inmediatamente una pasta a la boloñesa y ya estaba babeando.
- ¿Como sabias que era mi favorita? - pregunté sirviéndome un poco en un plato.
- Porque estamos casados y me lo dijiste.
- Buen punto.
Termine de comer mi pasta rápidamente y tomé un poco de agua.
- Estoy aburrida.
- Son las 4 de la mañana. - deje el plato en el lavabo y se lavó como esperaba.
- Como quiera me aburro. - cruce mis brazos en mi pecho.
- Podemos repetir lo del bosque. - se acercó a mi peligrosamente. Nuestros labios estaban rozando, me tomo de la cintura y cuando iba a besarme, lo detuve.
- Creo que tienes razón, son las 4 de la mañana, solo podemos dormir. - me separe de él secamente. - Es venganza.
Empecé a caminar hacia el pasillo de las habitaciones.
- ¿Venganza de que? - preguntó siguiéndome.
- Venganza de la vez en mi casa cuando me dejaste a medio beso. ¿No recuerdas, cariño?
Me reí y entre a su habitación. Me tiré en la cama, no había razón para apagar las luces ya que su habitación era completamente negra.
Él se sentó en ella y no sentí que se recostara.
- ¿No vas a dormir? - pregunté somnolienta mientras lo atraía hacia mi. Me acurruqué en su pecho y él me abrazó por la cintura.
- Descansa, cosita.
- Descansa, esposo.
💌
Nota de la autora:
Se me acaba de ocurrir un final bien triste, trágico y que probablemente va a acabar con la poca estabilidad que tienen. Creo que lo usaré 😈
Esposo>>>>😻
Amón romántico>>>😻
Me dolió escribir esto, por la parte de su niña 💔
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Ya debe estar arriba el último capituló del maratón. Vayan a leer 💕
Nat 🦖
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