La Chica Que Vive En Mi Garaje (Jenlisa ) [Completada]

Part 24

Paso una hora jugando juegos en mi teléfono y mirando por el largo pasillo, deseando que aparezca Lisa. Durante la Segunda Hora de Espera, la batería de mi teléfono se agota y paso la mayor parte del tiempo entrando y saliendo del sueño con la cabeza apoyada en el hombro de mi padre. Es el comienzo de la Hora Tres de Espera cuando mi papá me despierta.

"Alguien viene."

Salto a mis pies y froto el sueño de mis ojos. Efectivamente, se acercan pasos y voces. Pero cuando la fuente de esos sonidos aparece al final del pasillo, son el Sr. y la Sra. Manoban. Solo el Sr. y la Sra. Manoban.

"¿Cómo te fue?"Papá pregunta.

"Pudimos contactar a nuestro abogado y al Departamento de Policía de Traverse City", explica el Sr. Manoban. "En espera de una comparecencia ante un juez, todos los cargos serán retirados."

"Eso es fantástico", dice papá, dejando escapar un gran suspiro de alivio.

"Pudimos ver a Lisa", dice la Sra. Manoban. - Para mostrarle la carta de Bambam. Para explicar que estábamos desconsolados y actuamos de manera irracional."Hace una pausa para limpiarse los ojos manchados de rímel. "Todavía tenemos mucho por trabajar, pero es un comienzo."

Me muerdo el labio. Todo esto es genial, pero nada de eso es lo que quiero escuchar en este momento. "Entonces, ¿la están liberando?"

El Sr. Manoban asiente con la cabeza. "Los oficiales están terminando algunos papeles y devolviéndole sus cosas."

Sonrío. Eso es lo que quería oír.

"Preguntó por usted", dice la Sra. Manoban.

"¿Lo hizo?"Yo pregunto.

"Tan pronto como le explicamos cómo recibimos la carta, ella tenía que saber si estaba bien y si estaba en problemas por dejarla quedarse en su casa."

El hecho de que ella estuviera preocupada por mí mientras todo esto sucedía con ella es increíble. Es de mal gusto y cliché, pero mi corazón realmente se salta un latido o dos o siete.

Papá se aclara la garganta. "Hablando de..."

Caminando por el pasillo hacia nosotros está Lisa. Lleva esa absurda sudadera de la Universidad Nacional de Seúl que nunca he estado tan feliz de ver y lleva su mochila en una mano y su abrigo en la otra. En el momento en que nuestros ojos se encuentran, ella sonríe. Me quito corriendo por el pasillo.

Lisa deja caer su abrigo y su mochila una fracción de segundo antes de que la rodee con los brazos, llevándola unos pasos atrás conmigo. Me río, lloro y la beso, y sabe a ChapStick en el tubo negro, y es cálida y segura y está aquí, y estoy delirantemente feliz.

Se echa hacia atrás y mira por el pasillo, pero ambos grupos de padres se han alejado amablemente, dándonos nuestro momento gay. Ella usa una mano para secarme las lágrimas y la otra para meterme el cabello detrás de las orejas, luego apoya ambas manos en la parte baja de la espalda, sosteniéndome cerca. Mira hacia abajo, sus ojos buscan los míos. "Fuiste a casa de mis padres por mí."

"Sí."

"Encontraste la carta de Bambam."

"Sí."

Juega con mi collar de piedra Petoskey. "Eres una chica estúpida, valiente y hermosa."

La única razón por la que dejo de sonreír es porque es difícil besar y sonreír al mismo tiempo.

"Hola, ustedes dos", llama el Sr. Manoban, y nos separamos. "Deberíamos ponernos en marcha. Todavía tenemos un largo camino a casa."

Lisa se pasa la mochila por un hombro, agarra su abrigo y me toma de la mano. Caminamos juntos hacia nuestros padres, todavía de pie en el vestíbulo. "Es un placer verlos de nuevo, Sr. y Sra. Kim", dice Lisa. "Lo siento por todo el asunto de 'vivir en tu garaje'."

"Perdonado", dice papá. "Sin embargo, hemos aumentado nuestra seguridad, por lo que a partir de ahora, es posible que desee probar la puerta principal. Y sé que la Trans Am es increíble, pero también lo es nuestra sala de estar."

Lisa se ríe y me aprieta la mano. "Lo tengo. Gracias."

"Gracias por ser tan buena con Jennie", dice mamá.

Ella sonríe. "En cualquier momento."

"Y gracias por su ayuda", le dice el Sr. Manoban a papá.

Se dan la mano, y mamá y la Sra. Manoban se dan la mano. A medida que cambian, mi estómago se retuerce. Los Manoban van a volver a Traverse City. Volveremos a casa. Solo he visto a Lisa por unos minutos, y ya la estoy perdiendo. Cuando salimos, los Manoban se suben a su SUV, y mamá y papá se suben a los suyos. Lisa suelta mi mano el tiempo suficiente para ponerse su abrigo, y luego me jala en sus brazos.

"No quiero que te vayas", le digo, ahogándome. - Otra vez no."

"Oye. Cada vez que hemos estado separados, he encontrado el camino de regreso. Realmente creo que esta vez va a ser peor? Voy a tener mi celular. Te llamaré y te enviaré un mensaje de texto hasta que estés tan harta de mí que presentes una orden de restricción."Hace una pausa. "Espera, ¿demasiado pronto para los chistes de la ley?"

Me río y presiono mi frente contra ella. Su nariz ya está fría, pero su aliento aún está caliente. "Es mejor que llames y envíes mensajes de texto constantemente."

"Lo haré. Y te visitaré. Lo resolveremos, ¿de acuerdo? Después de todo lo que hemos pasado, lo lograremos."

Un beso más sella la promesa.

"Te amo", le digo.

"Yo también te amo."

Sonrío. - Hasta luego."

"Hasta luego. Te veré pronto."