Elliot abre los ojos, encontrándose completamente a oscuras, parpadea varias veces para intentar acostumbrarse a la oscuridad, con dificultad, logra reconocer el camino de tierra y las casa cercanas a la taberna infierno. Se reincorpora y se deja caer en la pared, soltando un gruñido en el proceso.
- ¡Milagro! – Dice una voz conocida.
Elliot gira la cabeza en la dirección de donde ha sonado la voz. Logra distinguir una silueta entre las sombras, la silueta se acerca a él a paso lento, Elliot se pone en alerta, se lleva una mano a la cintura, buscando a ciegas una de sus dagas, para cuando la luz alumbra la silueta, Elliot ya tenía la daga desenvainada, y estaba adoptando una posición de defensa. La silueta se agacha a la altura de Elliot, haciendo que la luz le ilumine el rostro, Elliot suspira y se deja caer al suelo otra vez, Aiden lo mira con curiosidad, intentando leer la expresión de él, al final se acaba rindiendo y se sienta en el suelo, quedando en frente de Elliot.
- Pensé que tendría que ir encargándote un ataúd – Dice con una sonrisa burlona.
- Muy gracioso, Aiden – Elliot se estira, haciendo crujir los huesos.
La puerta de la taberna se abrió con un crujido, la luz procedente de la taberna ilumina momentánea mente los rostros de los chicos, Elliot cierra los ojos ante el repentino fogonazo de luz. Arya cierra la puerta a sus espaldas, quedando otra vez inundados en la oscuridad de la noche de Bausen.
- ¡Ya estamos todos! – Exclama Aiden con alegría.
Arya se acerca a Elliot, agachándose para quedar frente a frente, la sonrisa de Aiden se borra por un momento, al ver como Arya le aparta con delicadeza algunos mechones de pelo a Elliot de la frente. Arya observa el desastroso aspecto de Elliot, la frente perlada por el sudor, el pelo platinado revuelto, las pupilas dilatadas, y unas grandes ojeras moradas debajo de los ojos.
Aiden bufa, sujeta a Elliot por el brazo, y lo levanta de un tirón, este gruñe y se deja caer en Aiden.
- ¿Al menos sabes que tenemos que hacer? – Pregunta Aiden aun sosteniendo a Elliot por el brazo.
- Colarnos en una fiesta – Responde rodeando los hombros de Aiden con su brazo, y dejándose caer en él.
Elliot logra enfocar la vista, gira la cara para poder ver a Aiden, este le devuelve la mirada, acompañada de una sonrisa burlona, antes de señalar con la cabeza a Arya. Elliot la mira, ella le sonría tímidamente. Él no puede evitar mirarla de arriba abajo, lleva puesto el vestido añil, el largo pelo castaño le cae sobre la espalda. Ella aparta la mirada, se queda mirando un punto fijo en el camino de tierra, donde algunas siluetas se caminan hacia ellos, Arya frunce el ceño y retrocede algunos pasos, las siluetas se van acercando, hasta que la escasa luz es capaz de iluminarlas. Dos nobles caminan con orgullo, luciendo sus elegantes trajes de colores vivos, detrás de estos nobles, camina un chico de aspecto más joven que los otros dos, a diferencia de los otros dos, este chico viste ropa menos elegante, son prendas típicas de la clase baja.
- Sack – susurra Arya
Elliot se separa de Aiden, camina con pasos seguros, como si el efecto del alcohol nunca hubiera pasado por su cuerpo, se coloca delante de Arya y Aiden. Los nobles se paran a unos escasos metros de Elliot, aun mostrando sus sonrisas arrogantes y sus posturas de superioridad.
- Territorio Malfa – Dice Elliot imitando la sonrisa de los nobles.
- Nosotros somos Malfas –
- Sois Malfas para lo que os interesa –
- Apártate – gruñe uno de los nobles
- Oblígame –
Uno de los nobles se acerca a Elliot, con aires de grandeza. El otro noble desabrocha su chaqueta, y de ella saca una pistola, apunta con ella a Elliot, aprovechando que su amigo lo está entreteniendo. El noble dispara, Elliot se gira hacia él, percatándose de su error y maldiciendo internamente, agarra al noble más cercano a él, y lo utiliza como escudo, la bala impacta en el noble matándolo en el acto.
Sack se acerca a Aiden y a Arya, manteniendo una distancia de seguridad con Aiden.
- Slade está en camino – pronuncia con voz cansada
- Arya, busca a Slade, yo me quedo con Elliot – dice Aiden con seguridad, se quita la chaqueta, dejando expuesta su marca de Salimad.
Las líneas negras que decoran sus brazos, parecen moverse cuando para el tiempo, justo antes de que una bala impacte sobre el brazo de Elliot. Arya echa a correr junto con Sack en busca de Slade.
- Esto no es normal Aiden, los nobles no suelen pasearse por estas calles.- Aiden activa el tiempo- sus delicados zapatos son demasiado importantes como para pisar el suelo de los de nuestra clase. – Sonríe ante su comentario.
- ¿Crees que han descubierto el plan? –
- No lo sé, pero algo malo va a ocurrir -
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El último reino
FantasyDurante 200 años el mundo cambió con la llegada de Anthek al trono. Los humanos desparecierón, formando dos razas los Salimad y los Malfas. Dos razas sometidas ante el poder, miles de Salimad perseguidos hasta la muerte, miles de Malfas muertos baj...