Broken Mind Fractured Soul - Sensiblytainted

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El fic no me pertenece. Es una TRADUCCIÓN de 'Broken Mind Fractured Soul' de Sensiblytainted.

* Link del autor: https://archiveofourown.org/users/Sensiblytainted/profile

* Link del fic original: https://archiveofourown.org/works/8873683

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Conflicto Interno

Después de la partida de ajedrez de Silas y Severus, Harry había pasado el resto de la mañana y el principio de la tarde con Sirius. Hablaron sobre todo de quidditch y de lo que se había perdido. Luego, tras un almuerzo tardío, Sirius se convirtió en Canuto y pasó las siguientes horas con Chico. Sin otras personas alrededor, Canuto había podido convencer a Chico de que caminara por la sala de estar.

Chico no tocaba las cosas, por miedo a ser castigado por ello, y no salía de la habitación, por miedo a encontrarse con otras personas, pero Sirius estaba decidido a conseguir que Chico saliera de la habitación y explorara la casa antes de que empezaran las clases. El mayor paso hacia el progreso que Chico había dado en las semanas transcurridas desde que Severus y Remus habían abandonado la casa era que ahora Chico hablaba con Canuto. A menudo decía cosas como "No. No podemos hacer eso. Nos meteremos en problemas". Sin embargo, hablaba y eso era muy bueno.

Era un trabajo duro, estar con Chico, y Sirius agradeció la invitación de Gabriel a batirse en duelo cuando llegara el momento. Peleaban mucho. Sirius solía perder más veces de las que ganaba. Todavía estaba oxidado por todos esos años en Azkaban, pero cada día mejoraba. Gabriel no era misericordioso y Sirius tenía que esforzarse por cada victoria.

Por eso Gabriel sintió un reconfortante cansancio por el trabajo duro, sus músculos agradablemente adoloridos, así que con una última reverencia se agachó de nuevo y permitió que el Anfitrión saliera a la superficie. Harry regresó y encontró a Sirius atado y amordazado en un rincón. Sintió la molestia y la determinación de su padrino y se apresuró a ir a su lado.

—¿Estás bien? —preguntó, desatándolo con cuidado ya que no conocía el hechizo para liberarlo.

—Simplemente de maravilla —refunfuñó Sirius—. Gabriel podría haberme desatado antes de irse.

Harry se sonrojó. —Lo siento.

—No es culpa tuya. —Sirius sacudió la cabeza y consiguió sacudirse el resto de las cuerdas—. Vamos. Me muero de hambre.

Harry sonrió y siguió a su padrino fuera de la habitación.

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Silas seguía dormido cuando Harry se fue a la cama. Gabriel estaba cansado, pero no iba a dejar su puesto cuando Silas estaba inconsciente. Alguien tenía que estar despierto en todo momento por si pasaba algo. De acuerdo, estaban en casa y nada podía atacarles allí realmente, pero no estaba de más estar preparados. Gabriel se sentó y planeó sus hechizos para el próximo duelo que tenía con Sirius. Era medianoche cuando sintió una perturbación y se escabulló hacia afuera.

Fue un golpeteo en la ventana lo que había llamado su atención y se dirigió hacia él. Se preguntó si sería una carta de Remus o de Severus, pero tuvo cuidado por si no lo era. Una extraña lechuza entró volando y se posó en la silla. Gabriel la miró fijamente. El ave le devolvió la mirada, pero rápidamente se impacientó. Levantó una pata y la agitó, atrayendo la atención de Gabriel hacia la carta. Gabriel sonrió un poco; el pájaro era ciertamente bastante altivo para ser de Severus. Hizo unos cuantos hechizos y determinó que el pájaro y la carta estaban a salvo. Curioso, tomó la carta y el pájaro ululó con rabia antes de salir volando por la ventana.