𝒥𝑒𝑜𝓃 𝒥𝓊𝓃𝑔𝓀𝑜𝑜𝓀
En poco tiempo han pasado muchas cosas, y ninguna me parecía interesante. Después de un vuelo corto a Jeju para revisar los avances del hotel y verificar el problema de la tela de las sábanas, regresé a casa con la esperanza de descansar, pero no pude hacerlo.
En mi pecho tenía instalada la sensación de que me hacía falta algo, de que algún asunto no andaba bien conmigo y eso provocaba terribles dolores de cabeza. Sabía que no era ningún tipo de enfermedad física, más bien era como mental. Talvez por primera vez en muchos años debía tomarme vacaciones, que se yo, ir a una playa en Italia y divertirme, olvidarme de lo que soy por un momento y recordar en primer lugar porqué es que he llegado hasta aquí.
Inquieto, sin poder dormir incluso después de pasar más de veinticuatro horas despierto en mi habitación de hotel en Jeju, decidí que era tiempo de relajarme. Necesitaba compañía...
Tomé una ducha rápida y me vestí de manera casual, pensaba en ir a un bar privado que estaba a sólo dos bloques de distancia de mi condominio, era uno de esos lugares en donde solo gente adinerada pasaba a disfrutar y tener un poco de privacidad. Era famoso por tener espectaculos especiales en donde la decencia se perdía. Esta noche necesitaba un poco de eso. A unas cuantas semanas de haber terminado con Gyeong-hui llegue a la conclusión de que mi malestar se debía a la falta de sexo y eso tenía que ser enmendado de cualquier manera.
Para empezar, tenía la manía de traerla a mi mente de vez en cuando y aunque quería evitarlo no podía aveces dejar de pensar en ella y recordar todo lo que hicimos, una pequeña idea se formó en mi mente una noche de esas en donde recordaba la veces que estuvo entre mis brazos pidiendo más, pero sabía que era absurdo. Sin embargo decidí llamarlo como una "obsesión temporal" ella no me gustaba de ninguna manera, solo el sexo era demasiado bueno.
Me dirigí hacia el bar y mostré mi identificación haciendo que me dieran pase inmediatamente. Estas personas conocían aquí tu estatus social y dado que los costos de los espectáculos eran carisimos, solo personas con algunos millones de dólares en su cuenta podían pasar. Yo era cliente de oro si de eso se trataba. Me acerqué has una mesa pequeña redonda y me senté en el banco dispuesto, a los pocos segundos una mujer extravagante se acercó a mi. Vestía ropa interior transparente y toda su pierna derecha estaba cubierta por el tatuaje de un dragón. Era visiblemente sexy, así que esperé el ramalazo de excitacion, o al menos una pizca de deseo pero no hubo nada.
— ¿Qué te ofrezco, guapo? — ella curvo una sonrisa pequeña, mostrándome los hoyuelos que acompañaban sus mejillas — ¿Qué tipo de servicios quieres esta noche?
Detalle bien su cara y comprobé por segunda vez que era guapa, demasiado a decir verdad, pero no había completamente más allá de eso que me llamara la atención.
— Tráeme un Martini — le pedí con mi mirada sobre ella. Sacó una libreta diminuta de un lado de su tanga y escribió.
— Si te esperas hasta las once y consumes más de quinientos dolares, podrás tener un servicio privado con una de nuestras mejores chicas.
Levanté una ceja, algo curioso.
— Te noto muy tenso, talvez quieras liberarte — se mordió el labio y me miró de arriba a abajo — O si quieres puedes tener público.
Me removi en mi asiento algo más animado, aún sin decidir sobre lo que quería hacer pero al menos ya tenía claro que no había ningún tipo de problema conmigo. Ella me miró una vez más y después se fue, meneando su enorme trasero en una caminata sensual hecha completamente para seducir.
En otro tiempo talvez pude llegar a considerar la idea de tener público, pero no me llamaba la atención tener espectadores. Antes de que Namjoon se casara o conociera a Sol-i, él y yo hicimos una que otra cosa, de hecho él era más proclive a hacer esto, ya fuera tener público o un trío, por eso me sorprendió cuando de la nada decidió casarse. Ahora no tenía a mi fiel amigo. Y si hablamos del resto, ellos también han decidido pertenecer a alguien. Ridículo por completo.
ESTÁS LEYENDO
𝓛𝓸𝓿𝓮 𝓐𝓯𝓯𝓪𝓲𝓻 |𝒥𝑒𝑜𝓃 𝒥𝓊𝓃𝑔𝓀𝑜𝑜𝓀
FanficHui: Las decisiones amorosas suelen ser las más difíciles de tomar, porque hay tres amores en el ring de pelea, el que das, el que tienes que recibir y el amor propio. La frase "dejar ir también es amar" no se refiere a cuanto amas a la otra persona...