Pareja: Monshang // Scum Villain's Self Saving System//
AU: Moderno
Advertencias: Contenido sexual explícito 🔞, fetiches, juguetes sexuales.
Shang Qinghua seguía sin poder seguir el hilo de conversación. El muy desgraciado acaba de decirle que su...
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Shang QingHua esperó pacientemente en la parada de autobús de la universidad, a la espera que su 'despampanante marido' viniera a por él, pero al ver nuevamente la hora desde el celular calculó que estaba más que retrasado.
[BOSS SEXY (ESPOSO)❄💀]
MOBEEEEEEI
¿DOOOOOOONDE ESTAAAS?
😭😭😭😭
Este era como el décimo mensaje que enviaba. Usualmente a petición de QingHua el resto de los días se iba a casa en tren o tomaba el autobús, a excepción de los viernes donde Mobei se retiraba antes del trabajo e iba a buscarlo; hoy era viernes y no había rastro de Mobei. Resopló, se levantó con la intensión de tomar un taxi por la hora cuando un auto de color negro se paró frente a él.
«¡No, no otra vez!», gritó internamente Shang QingHua rebuscando el gas pimienta dentro de la mochila, ya que conocía su nulo estado físico; correr no era una opción de supervivencia. Entonces un hombro ya de avanzada edad, pero que guardaba un buen atractivo se bajó del auto. Era el abuelo de Mobei Jun.
― Es bueno haberte encontrado ―dijo el hombre con tono amable, pero con semblante hosco.
― Eh...no esperaba verlo abuelo Jun ―saludó con una leve inclinación de cabeza.
― Lo sé, mi nieto me pidió encarecidamente que viniera por ti, sube.
No hubo tiempo para replicas, ha si que simplemente subió al auto. Durante todo el camino se vivió en un silencio tenso, que no llegaba a ser incomodo, pero tampoco le permitía a Shang QingHua estar tranquilo. Se había entretenido viendo el celular que no notó el lugar, hasta que el sonido de un portón abriéndose sonó enfrente. Estaban frente una gigantesca, pero moderna mansión rodeada por un muro pintado de blanco con tejas azules, alejando a los mirones.
«¿Qué acaso no aprendes nunca?». QingHua estaba pensando en abrir la puerta y tirarse del auto cuando la mano cálida del anciano, se poso sobre su muslo; dio un suave apretón y se alejó.
― Tranquilo, Mobei ordenó que trajera hasta aquí ―explicó, saludando con un asentimiento a los guardias vestidos de negro en la entrada―, estarás a salvo.
― ¿A salvo de qué?
― ...mi hijo, Linguang-jun.
― Oh, el lunático.
―...
―...perdón.
― No te disculpes.
El abuelo lo llevó personalmente hasta una habitación en el segundo piso, abrió las puertas de madera añejada y le dejó entrar, curiosamente QingHua sabía que esta era la antigua habitación de Mobei.
― ¿Qué ha pasado? ―preguntó Shang QingHua.
El abuelo lo miró aún con la mano agarrando firmemente la manija de la puerta.
