La puerta de la verdad | Jake

Diecisiete | Cárcel De Maycol

Capítulo Diecisiete.

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Mc

Me encogi de hombros.

—Por favor Mc, tu sabes donde esta. Dímelo.— ordenó

—No tienes a la persona correcta Alan, yo no sé dónde está Hannah, pero lo sabre. Y te prometo que cuando lo sepa serás el primero en saberlo—sonreí

—Bien Mc—bufo—El interrogatorio a...

—Espera— lo interrumpí, el me miró con una ceja alzada

De verdad quería ayudarlo, el trabajo de Alan dependía de este interrogatorio, pero no sabía que decirle para que no perjudicar a las personas que me importaban.

—¿Que Mc?

—Es solo que, quiero ayudarte Alan, en serio, pero no sé cómo. ¿Como te ayudo?—lo mire a los ojos

—Dime donde está Hannah.

—Pfff—bufé tirándome hacia atrás en la silla—No lo sé Alan, no lo sé. Si lo sabría creeme que lo diría, pero no lo sé.

Derrepente Matías entró a la habitación.

—Lo siento Alan, pero Mc será trasladada a la cárcel de Maycol, donde estará por tiempo indefinido—informó

—¡¿Que?! ¿Con que pruebas? No pueden tenerme encerrada sin pruebas— exclame levantándome de golpe

—No tengo por qué decirlo

—Tengo derecho a saberlo Matías, tu los derechos del ciudadano te los pasas por el culo—lo apunte con el dedo

—Mc Cameron, quedas bajo arresto por evasión a la autoridad, mentir a la autoridad y el secuestro de Hannah Donfort y Richy Rogers.

—No tienes pruebas de que yo los secuestre, esto es injusto Matías.

—Agente Matías para ti.

Matías no dejó que dijera nada más, me desesposo de la mesa y me llevó hasta una camioneta policial.

Alan intentó decirle algo, pero el simplemente no lo escucho. Una vez dentro de la camioneta, se subieron unos ajentes del FBI conmigo y emprendimos camino a la cárcel de Maycol.

Los agentes del FBI ni me miraban, el silencio en la camioneta me atormentaba, no quería ir a la cárcel. Según lo que vimos, Phill la paso muy mal en la cárcel, y yo no quería pasar por lo mismo, lo único que me reconforta es que nadie de los que me importan estan en mi lugar.

Luego de un largo viaje la camioneta freno, no estaba segura de si estábamos en la cárcel, ya que la parte de atrás de la camioneta no tenía ventanas.

Las puertas de atrás se abrieron y pude ver a Matías, los agentes me bajaron. Mire a todos lados, pero no estábamos en la cárcel de Maycol.

—Esta no es la cárcel de Maycol— hable

—Exacto Mc, buena observación— aclaró Matías

—¿Donde estamos? —cuestione mirando a todos lados

—Este es el centro del FBI, aquí te haremos un interrogatorio más "Profundo" —enfatizó la palabra "profundo"

No dije nada más, dos agentes me agarraron de los brazos y me empezaron a llevar dentro del centro. La sonrisa en el rostro de Matias me daba miedo, era una sonrisa juguetona, pero en estas circunstancias daba miedo.

Llegamos dentro, Matías habló algo en la recepción y nos subimos al ascensor. Matías preciono el botón -2, y el ascensor empezó a bajar, sentí esa sensación rara en la panza. Matías iba enfrente y los agentes iban detrás mío. Y en un abrir y cerrar de ojos ya estábamos abajo.

Los agentes me agarraron de los brazos y empezamos a caminar, era una especie de cárcel, pero estaba muy bien cuidada, era muy tecnológica, habían muchas celdas, algunas tenían barrotes blancos, mientras que otras un vidrio. Habían algunas personas dentro de estas, al vernos empezaron a golpear las paredes. Me di cuenta que algunos tenían signos de toruta, las uñas arrancadas, golpes o marcas de látigos.

Eso me hizo tragar en seco.

—Metanla aquí—Matías abrió la puerta de una habitación un poco alejada y me metieron ahí

Adentro había una silla en medio de la sala, una silla de madera, me sentaron y me ataron a ella. Me ataron las manos y los pies.

—Bien Mc, ahora tengo ciertas preguntas para ti—hablo sentándose frente a mi

—De mi boca no saldrá nada, así que pierdes tu tiempo.

—Tranquila, siempre todos terminan hablando.

—¿Que?

—Has escuchado eso que dice.. —hablo sacando una herramienta extraña—El dolor doblega a las personas.

Frunci el ceño.

—Bien Mc. ¿Donde están Hannah Donfort y Richy Rogers?

—No lo sé—hable firme

—Nuestros métodos de tortura están muy avanzados hoy en día, para ti tenemos uno especial, serás la primera en estrenarlo.

De una mesita agarro una especie de caja, parecía esas cajas que dan toques de electricidad.

—Este es nuestro bebé más reciente—se acercó a mí y coloco algo en mis manos, y en mi cara coloco una especies de pegatinas con cables— Esta maquiniha de aqui te dará pequeños toques de electricidad, cada vez irán aumentando su poder. Solo parare si me dices donde están Hannah Donfort y Richy Rogers.

—Pudrete—escupi

—¿Donde están Hannah Donfort y Richy Rogers?—pregunto nuevamente

—No lo sé

—Quizás necesitas un pequeño incentivo—canturreo—Empezaremos con el nivel uno, tampoco soy tan malo.

Dicho esto giro la maquina, y sentí una pequeña corriente de electricidad recorrer todo mi cuerpo. No fue doloroso más bien, me dio cosquillas.

—Nuevamente Mc, ¿Donde están Hannah Donfort y Richy Rogers?

—Esto es ilegal. —solté

—Oh, si lo se. Pero no pasa nada tranquila—sonrió—Nivel dos

Esta vez, la corriente de electricidad, fue más fuerte, pero aún soportable.

—Querida Mc, no saldrás de aquí si no nos dices donde están.

—No se donde están.

—Cambiaremos de pregunta. ¿Como se llama el Hacker?

Trague saliva, y no respondí. Aparte la mirada.

—Huh, interesante. Probemos el nivel tres.

Giro la máquina, y está vez sentí el dolor, el dolor me hizo estirarme un poco, pero aún soportable. Aún no me doblegare.

—Solo necesito un nombre Mc, y parare por un rato—solté una risa irónica—Bien, nivel cuatro

°

Holi holi~

¿Como están? Espero que bien.

Espero que les esté gustando la historia hasta ahora. Por a mi si jiji.

Cuídense gente. Besoos.

—P.