Todo inicio con un beso.(Logan Henderson y ________)

Capitulo 19

-______, ______ -me alegré- no hables, no te esfuerces. Debes estar tranquila, descansar -le besé la frente.
-Fue ella... e-estoy s-segura -apenas oía lo que decía.
-Lo sabemos, pero no importa eso ahora. Primero debes mejorarte, descansa. Te amo.

_____ sonrió levemente y volvió a cerrar los ojos, al rato entró el doctor y le dije que había despertado.

-Eso es muy bueno, quiere decir que está fuera de peligro -sonrió- puede estar tranquilo señor Henderson-di un suspiro de alivio.

Llamé a los chicos, llegaron muy rápido a la clínica. Maite se acercó nerviosa.

- ¿Qué te dijeron? ¿Qué pasó?
-_____ está fuera de peligro -todos demostraron alivio- y despertó.
- ¿Despertó? -preguntó Mack.
-Sí, habló muy poco, pero ya reaccionó.
-Ven, teníamos que confiar y rezar -dijo Mackenzie contenta- ¿la puedo ir a ver? -asentí.

Mackenzie estuvo un largo rato con ______, no despertó en ningún momento, luego pasaron las chicas y Thomas y tampoco despertó. Cerca de las doce de la noche todos se fueron a casa, excepto yo. Entré a la habitación, y contemplé a ______ unos minutos, se veía tierna durmiendo, pero era horrible verla en una camilla. Me senté a su lado y le comencé a cantar, movió su mano.

-Amor, háblame.

No hizo nada, le acaricié su mejilla, besé su frente y fui a buscar un café. Cuando volví a la habitación me encontré con una sorpresa... ¡no estaba! Miré asustado para todos lados.

-Tranquilo, estoy aquí -salió del baño.
-Me asustaste, acuéstate... tienes que descansar, como se te ocurre levantarte -dije nervioso.
-Logan cálmate -decía apenas- estoy bien -volvió a la cama- ¿te acuestas a mi lado?
-Estás loca, después me matan por violarte, descansa.
-No me violarás, solo me abrazaras -hablaba sin fuerzas.
-Me tentaré -cuando dije eso rió sin ganas.

Me miró dulcemente, sonrió y cerró sus ojos. Sentí que alguien entró a la habitación, era Maite.

- ¿Qué haces aquí? -pregunté confundido.
-Vine a ver a mi mejor amiga ¿no puedo? -Rió- ¿despertó?
-Sí, fue al baño y volvió a cerrar sus ojos, está demasiado débil por lo de la sangre. ¡Pobre, me da pena! -dije, ya que sabía que me estaba oyendo.
-Logan, no estoy dormida aún -dijo con los ojos cerrados.
-_____ -Maite se acercó a ella- dime algo.
-Algo -trató de reír, pero no pudo- me siento agotada y no sé de qué, quiero dormir y dormir. Buenas noches -fue lo último que dijo.

Con Maite estuvimos toda la noche conversando, me contó cómo conoció a ______ y toda su amistad, yo le conté lo del beso y en fin hablamos muchas cosas.
Ya había pasado una semana desde que ______ había despertado, pero estaba muy débil, apenas se escuchaba lo que hablaba, pero cada día despertaba un poco más viva que los días anteriores.
Entré a la habitación y ______ estaba durmiendo, la saludé y le besé la frente. Cuando me iba a alejar sentí como sus manos tomaron mi rostro y lo acercó al de ella, me besó y luego sonrió.

-Hola mi vida -sonrió- ¿cómo estás?

De todo el tiempo que llevaba despierta jamás la había visto tan viva, animada, contenta.

-Hola, muy bien ¿y tú?
-Excelente, maravilloso, mejor no puedo estar. Sobre todo si despierto y veo a mi hermoso novio.
-Amor ¿qué tomaste? -reí.
-Nada, desperté con fuerzas, no me siento débil ni con ganas de dormir ¡soy yo! -justo cuando dijo lo último entró el médico.
-Señorita ¿qué está haciendo?
-Doctor, me siento bien, maravillosamente bien. ¡Estoy viva!
-Así veo -sonrió el médico- aceptó muy bien la sangre de los donantes, se ha recuperado muy rápido señorita ______, bien le vengo a informar que mañana ya puede volver a su casa, le daré un receta y todo bien.

Estuve todo el día con ______, reímos, cantamos, llegaron los chicos y luego todos nos fuimos a casa, el último día ______ se quedó sola en la clínica ya que quería que yo descansara. Llegué a casa, me di una ducha y me acosté, me dormí enseguida.
A la mañana siguiente me desperté contento, tomé desayuno y me fui directo a la clínica, ______ ya estaba lista, la miré y me besó. Tomé su mano, subimos al auto y nos dirigimos a casa.

-Hola -dijo cuando entró a casa.
- ¡Hija mía! -dijeron Richard e Isabel al mismo tiempo- que bueno tenerte en casa.
-Me fueron a ver súper poco a la clínica, pero no importa lo entiendo... el trabajo es el culpable ¿cierto? -ellos asintieron y ella sonrió.
-Me voy amor, hablamos más tarde. Nos juntaremos con Mackenzie después de almuerzo tenemos que conversar sobre algo -la besé.
-Está bien, te amo.