my heart isn't mine

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Todo lo que rompió, todo lo que arruinó, todo lo que se llevo a su paso por el único motivo por el que parecía hacer todo esto: su familia.

Él no era más que un drogadicto haciendo metanfetaminas porque coincidió con su ex-profesor de química Walter White, porque ese hombre vio en él una especie de opción, una que podría ser fácil de convencer y podría tenerlo en la palma de su mano, algo que no se fuera con facilidad de su lado y no tenga consideración alguna por su vida, solo por los momentos que la unen. Jesse Pinkman era eso, una casualidad y la vía fácil, el error había sido por no ver que en algún momento todo se iba a escapar de las manos de Walter.

Quizás el punto de quiebre fue la muerte de la única chica que estaba aliviando el dolor y la frustración de no ser correspondido, de la confusión que estaba presente cuando estaba con Mr. White, esa misma que tenía dándolo vueltas y fumando hierba en su nuevo departamento por horas, estaba en una negación, inmerso en un pozo de tristeza y lágrimas. Hasta en un momento dado surgió el enojo, porque no entendía que había sucedido exactamente con ellos, ¿que era exactamente lo que había cambiado para querer recibir tanta atención de ese viejo?.

Quizás un enamoramiento normal hubiera sido suficiente en su vida llena de excesos, Jane era alguien ideal, pero un sentimiento extraño se instalaba en su pecho cada vez que sintió que estaba engañando a Walter estando a su lado, algo absurdo por supuesto, así que se encargó de inyectarse heroína para olvidar los problemas con sus sentimientos y aceptar por completo a su nueva novia, quizás era un error, desde el principio sintiéndose como una mierda por arrastrar indirectamente a una chica tan bonita en rehabilitación a las drogas nuevamente, solo porque su trasero estaba deprimido tratando de superar a Walter, todo era un desastre.

Cuando Walter le hablo en su último intento por convencerlo de no hacer la locura que estaba por hacer con Jane, estaba tentado a impedir que ella cerrase la puerta y abrazar fuertemente a su profesor de química, nunca había sentido tanta preocupación cargada en sus palabras y aún que las drogas lo tenían anonadado, había sentido esa necesidad de disculparse con Walter y llorar suplicando por qué le perdonase, pero claramente eso no había sucedido, y su novia quería convencerlo de que escaparan de Alburquerque con todo el dinero que logro obtener de las mentafetaminas, pero él realmente no quería irse, lo que deseaba realmente era seguir con en contacto con Walter, pero la necesidad de olvidarse de él y sus sentimientos era más fuerte, y a parte, el negocio de las mentafetaminas lo estaba agotando mental y físicamente, pero secretamente admitía haber disfrutado esos días que estuvieron encerrados en la RV haciendo mucho más de esa mierda para ese Gustavo Fring, y demonios, el quería mostrarse tan molesto por no ir a Santa Fe con su novia, pero realmente en su interior deseaba saber de Walter y por momentos extrañaba su presencia, la manera en la que lo trataba como un idiota por no saber nada de química y observarlo hablar tan efusivo y entusiasmado sobre química, aún si estaban haciendo mentafetaminas ilegalmente con sus conocimientos.

Sus sentimientos seguían intactos cómo las primeras veces y ante esto, estaba enojado consigo mismo por olvidar a su novia cuando estaba con él, perder la noción del tiempo y quedarse viendo como un tonto totalmente embobado a Walter dormir después de echar a perder todo con sus mierdas y fundir el motor de la RV, dejándolo encendido con las llaves puestas. Jesús, si que era un maldito idiota y ni siquiera iba a negarlo, pero cuando había llegado la noche, fue interesante oír a Walter explayarse con respecto a sus sentimientos, bueno, hasta algún punto, porque el viejo confesaba que no merecía seguir con vida y que lo había arruinado con su familia, quizás no era el mejor momento pero le hubiera gustado indagar más en lo más problemas con su esposa, porque se sentía asquerosamente interesado en eso, pero en su lugar decidió enojarse por las palabras de Walter, ese viejo no podía expresar que quería morirse en frente de él sin recibir un sermón, así que como él también quería tener la última palabra en todo, decidió que hora de callarse e ir a dormir antes de que más cosas hubieran salido de su boca.

Hasta que llegó esa noche, la noche en que murió Jane, ahogada en su propio vomito. La primera cosa que hizo fue llorar durante varios minutos sobre su cadáver, la manera en que su piel se había palidecido y sus ojos se encontraban tan abiertos, vacios y sin vida, lo habían petrificado en su lugar, tanto que le impedía detener todas sus lágrimas y el arrepentimiento que llenaba su pecho, tenía tanto miedo y estaba tan inestable en ese momento que recurrió a la única persona que podría ayudarlo, quien podría llegar a su rescate, Walter White. Su voz se quebró y ni siquiera podía modular con normalidad por lo que se le habia dificultado entenderlo, pero en esos momentos, no podía aguantar pensar el hecho de que Jane ya no seguía con vida, mucho menos el decirlo en voz alta, cuando recibió palabras de apoyo de su profesor, fue como si algo dentro de él, le hubiera hecho creer que todo estaría bien y que las cosas que decía Walter en ese momento, se harían realidad, cuando le dijo que se calme y espere por la llegada de alguien que iba a encargarse del asunto para que nada vaya a inculparlo por la muerte de Jane, por primera vez escucho a Walter con tanta atención que hizo exactamente lo que le dijo, y trato de no enloquecer al lado de la puerta de su departamento, esperando por quién viniera a encargarse del asunto.

No fue nada grato la visita de un extraño para revisar el cadáver de Jane, era incómodo, pero estaba tan perdido en si mismo como para tratar de molestar a ese hombre viejo y mayor que husmeaba por su habitación, ocultando la evidencia de que todo había sido su culpa. No fue capaz de moverse de su lugar, viéndose como un lunático, deseando tantas veces que esto no hubiera pasado, que las cosas hubieran sucedido de otra forma, que si tal vez no hubiera intentado olvidar y seguir adelante cuando él realmente no estaba bien, tal vez nada de esto habría pasado, tal vez Jane no hubiera decaído tanto como él.

Dos drogadictos viviendo juntos, nada bueno puede salir de eso.

Su ensoñación se interrumpió cuando se dió cuenta de que el hombre desconocido estaba hablando con él, sintió las cachetadas tratando de hacerlo reaccionar y sus palabras tan frías y sin tacto para recalcarle que debía decir exactamente a la policía y la ambulancia que estaban en camino, tuvo que repetirlo, tuvo que tragarse el disgusto y sus lágrimas, para decir que haría exactamente eso, que tenía que hacerlo.

Ahora eran solo Walter y él de nuevo.

Y ahora otra vez estaba perdiendose a si mismo.

(...)

juro que no estaba planeando publicar otro cap pero aqui me tienen :p, espero les guste porque creo que recurriré a esta historia para expresarme a través de estos dos malditos y no sé jsksjs gracias por leer <3

broke whatever you want 'jesse x walter | breaking badDonde viven las historias. Descúbrelo ahora