MI REITA (Reita y tu)

Parte 14

-señor, baje el cuchillo o estaré obligado a tomar otras medidas de defensa- advirtió Akira. ¿que pasara si no salgo?¿le hará daño o solo lo utiliza como amenaza?
-a mi no me digas lo que tengo que hacer, pedazo de mierda- ambos se acercaba más y más. A la mierda todo, ibas a salir fuese como fuese, por Ensima de la cortinas, trataste de buscar la cerradura, al encontrarla Saeko te tomo del brazo y te arrastró hacia ella.
Saeko :- ¿pero que haces?- te sostenía muy fuerte - mi hermano esta allá fuera tratando de encubrirte. NO VAS A SALIR- ambas hablábamos a base de susurros.
Tu:-no voy a dejar que Reita quede herido por mi culpa- te soltaste de su agarre y te dirigiste nuevamente a la ventana.
Continuaban amenazandose uno al otro mutuamente, en un santiamén, Akira desvío el cuchillo hacia un costado, dándole una patada en los testículos a mi padre,él, adolorido,tomó con más fuerza aquella arma en sus manos y lo incrustó en el abdomen del joven. Este calló de rodillas sobre el césped oscuro por la noche, tosiendo su propia sangre, mirando a tu padre, el cual sonreía triunfador por su acto de maldad hacia el rubio.
-listo señora, ya voy FELIZ. Buenas noches- les había informado a todas. Abriste la ventana de un golpe y te dirigiste al lado de tu pareja, tirada en el césped, sufriendo de dolor, él mismo trató de sacarse el cuchillo de su abdomen. Su familia salió corriendo hacia él, su madre lloraba desconsoladamente, Saeko, a diferencia de los demás, sacó su casa celular y llamó a una ambulancia.
Ese hombre, no vino a buscarte, si no a tratar de asesinar a tu novio al cual tanto odiaba repulsiva mente.
A unos tres minutos de lo sucedido, los camiones del hospital más cercano, vino a retirarlo.tambien llegaron algunos autos de la policía de la localidad.
-señora, por favor aléjese un minuto del muchacho- le dijo uno de los encargados de levantar el cuerpo y colocarlo en la camilla, próximamente al vehículo. Lo levantaron con mucho cuidado del suelo, Reita había soltado un quejido de dolor al levantarlo.
Solo los familiares podían ir con él en el vehículo, y vos fuiste en un coche de policía. Te llevaban a la comisaría, allí pudiste denunciar a tu propio padre.
Antes de irte hacia el hospital, viste entrar a 30 tipos a la comisaría.te miraban fijamente, trataste de hacerte la que no había visto nada, te incomodaba de cierta manera, cuando llegó unos de los policías le pudiste preguntar.
Tu:-¿quienes son esos sujetos?-señalaste con tu cabeza a las personas, el policía dirigió su mirada a las personas a las cuales apuntabas.
Policía:- son los Yakusa- te digo en un corto y rápido susurro. Tus ojos se abrieron como platos, no lo podías creer, eran 12 de la madrugada y no había nadie en la calle, uno de esos tipos te podían raptar tranquilamente y nadie se daría cuenta de lo sucedido.