Kirishima Eijirou
Él silencio en la habitación, era ancestral, solo podía oír los pulsos de mi corazón, cerrando los ojos lo hacía más fuerte.
Mi cabeza era difusa, podía sentir que mi alma abandonaba mi cuerpo para ir a otros lugares, asomandome por la ventana de mi departamento y ver el cielo gris amenazando con llover, y mi corazón cada vez era más pesado y mi pecho. Mis manos tiemblan, sudan y dudan de sí tomar el teléfono.
Pero no podía posponerlo más, mi corazón estaba en juego.
Hideki
-Hola Ei...
-Hola mochi- era el apodo de cariño que le puse.
-¿Qué sucede? Sabes que en Alemania ya pasan de las 12 am- me regaño sutilmente.
-Lo lamento, olvide la diferencia horaria, te llamaré mañana,- iba a colgar, pero el me detuvo.
-Ei, habla... ¿Te sigue preocupando?
-Además de eso...creo que realmente necesito hacerlo...
-De acuerdo... Tal vez te vea en 2 semanas allá, tengo una misión, lamento no poder ir antes- se disculpó.
-Tranquilo, te espero, descansa dulces sueños- y colgué para que durmiera.
☄️⭐
Cuando, terminamos de hablar. Apreté el teléfono, casi podría decir que lo rompía con mi don, pero no podía, algo me lo impedía. Entonces el calor recorrer mi mejilla se hizo presente, llegando a caer en mi muñeca en forma de gota. Mi corazón comenzó a llorar.
Pero a diferencia de antes, ahora no sentía nada, mi corazón estaba apagado, no había nada, vacío. Me sentía como un pequeño muñeco vacío.
Decidí salir a dar un paseo, quería despejar mi mente de todos y de él, de mi y mi alrededor, solo sentir la brisa de la calle sobre mi. El ruido de los autos eran muy buen distractor, ahora ya no pensaba en nada que no fuera el sonido.
Mi caminar se detuvo frente a un pequeño kiosco que era abordado por muchas personas, parecía ser un lugar turístico o algo así, me hubiera encantado tomarme una foto en ese lugar, pero una voz tan conocida para mí se oyó atrás de mi
-¿Pelos de- Kirishima?- era imposible fingir demencia cuando él era lo único que pensaba tu cabeza
-Bakugou... - mi cuerpo entro en una especie de pánico, mi cabeza y cuerpo palpitan, haciendo que crea que explotare en cualquier segundo.
Mi cuerpo empieza a moverse en dirección opuesta, queriendo huir del peligro, pero al igual que un depredador a su presa, está te persigue.
-¡Espera!... ¡Kirishima! - lo oí correr tras de mi.
-¡Lo siento Bakugou, será en otra ocasión! - la meta de cruzar el paso peatonal se fijo en mi mente, a paso rápido para tratar de perder a aquel chico.
-¡Espera, necesito hablar contigo!- volvió a insistir
-¡No puedo ahora! - casi corría tratando de escapar.
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Yace Aquí Un Sentimiento [ᴋɪʀɪʙᴀᴋᴜ]
أدب الهواةDicen que cuando el corazón se ha daño innumerables veces, el cerebro y el mismo corazón, tienden a bloquear memorias y sentimientos para evitar un daño aún mayor. Kirishima no era así Pero se vio obligado a tomar medidas, para no dañar, su orgullo...