Desde Que Te Conocí

Día 9: Habitación Del Bebé

———Señor Stark——— hablaron a sus espaldas, el nombrado se giró para encontrarse con una mujer pelirroja.

———Nat——— susurró y corrió a los brazos de la pelirroja y rompió en llanto. Para nadie era un secreto que la espía y el genio se llevarán de maravilla puesto que Nat era la que estaba encubierta en la base de Hydra.

———Está noche te sacaremos de aquí——— susurró en el oído al castaño. Stark abrazó más el cuerpo de la mujer.

Después de la visita de Nat Strange se hizo presente para realizar el ultrasonido correspondiente.

———Todo está en orden——— habló tratando de romper el hielo, pero el genio solo asintió ———Sé que estas molesto conmigo por varias cosas y créeme que lo siento——— se disculpó.

———Estuviste de acuerdo con que SHIELD me trajera a su base en contra de mi voluntad y todo para ocultar mi embarazo——— dijo con evidente molestia. Strange trago grueso sabía que la había cagado.

———Si nos hubieras dicho el nombre del padre nada de esto hubiera pasado——— se defendió.

———Ya te dije que no se quien es el padre——— argumento.

———Y por esa misma razón no nos arriesgaremos a que Hydra se entere de tu embarazo——— Tony frunció el ceño sabía que SHIELD tenía un plan entre manos para nadie era un secreto que durante la misión se estuvo acostando con el líder de aquella organización ———Si se llega a enterar de tu embarazo vendrá por ti...——— pausó suspirando con pesadez ———Y no quiero imaginar lo que te hará si se entera que ese no es su hijo——— dijo con un deje de tristeza y fue en ese momento que Tony entendió todo, no era que Strange estaba en su contra sino que trataba de protegerlo a él y a su hijo del psicópata de Hydra.

———Tranquilo——— dijo mientras tomaba las manos de su amigo ———Yo no corro ningún peligro, Hydra sabe que es imposible que tenga un hijo suyo——— confesó para calmar al azabache.

———No correré ese riesgo——— Tony solo sonrió de lado.

Después de la revisión como siempre Fury llegó y preguntó por los resultados buscando una clase de muestra, pero Strange se negaba en dársela puesto que no quería perjudicar el embarazo del castaño, de por si los embarazos en donceles eran complicados, como siempre ambos hombre se pelearon y Fury se marcho molesto dejando a Strange con el millonario, este se acercó a abrazarlo.

———Donde quiera que vayas no dudes en acudir a mi para tu labor de parto——— susurró. El corazón de Tony latió con fuerza, Strange lo había descubierto.

———¿Cómo?———

———Estas de un buen humor después de la visita de Romanoff——— confesó ———No soy un idiota... solo...———suspiro———solo cuídate y búscame cuando puedas——— pidió para después darle un casto beso en la frente y marcharse.

El día pasó con una lentitud que mataba al genio, la espera se le hacía eterna su corazón, cuerpo y cerebro no paraba de pensar en la idea de estar junto a Steve de nuevo de recibir su calor, sus caricias y sus besos, extrañaba todo de él. De un momento a otro las alarmas comenzaron a sonar por toda la agencia, Tony miró confundido la habitación que ahora estaba de un color rojo a los segundos entró Romanoff con una cara sería.

———SHIELD ha sido atacada hay que evacuar de inmediato——— informó tomando la mano del genio y guiandolo lejos de la celda al helipuerto.

Al momento de subir al jet Tony sintió una inmensa paz, por fin después de dos meses encerrado sería libre y lo mejor de todo es que ahora estaría al lado de su amado.

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Aunque a Steve le hubiera encantado participar en la misión de rescate prefirió no hacerlo para no levantar sospechas de lo importante que Tony era para él, así SHIELD no solo se enfocaría en Hydra, con Romanoff infiltrada en la agencia podía darse el lujo de tener al genio y SHIELD pensaría que está resguardado en algún lugar desolado, gruño al recordar como esos idiotas se atrevieron a ocultar a Tony de aquella manera.

Respiro profundo para calmarse pues ahora estaba en una misión sumamente importante que era ordenar la habitación del bebé, cómo no sabía si sería niño o niña solo se enfoco en comprar cosas en tonos negros, grises y blancos ya con Tony se darían el lujo de ponerle el color correspondiente, sonrió de felicidad mientras acomodaba un pequeño conejo blanco con un listón rojo en la cuna, miró por última vez la habitación y se sintió feliz se imagino que a Tony le hubiera gustado participar, pero aún hacían falta detalles y esos los terminarían juntos como familia...