& UN LOBO CON MUY BUENA PUNTERIA. &

& 20, No Temas &

Madre Luna- Tu embarazo tiene un fin; un propósito, ahora que estás embarazado tu tendrás puros Alphas y en el segundo embarazo después de éste, serán omegas y estos serán parejas.

Rivalle- Tendré embarazo Alpha y luego omega y así sucesivamente, pero estos mutuamente serán parejas.

M/L- Si, estos hijos míos irán a distintos puntos del mundo y poblarán la tierra haciendo perseverar la especie.

Ri- ¿Eso quiere decir que mis hijos me abandonaran para siempre y jamás los volveré a ver?

M/L- Yo soy madre y jamás podría hacerte algo así.

Ri- ¿Entonces?

M/L- Ellos vivirán en distintos lugares, pero gracias a las runas lunares que les obsequiaré cuando formen familia, podrán teletransportarse para verte seguido, será como si nunca se hubieran ido, ellos jamás te abandonaran serán muy pegados a ti, pero ellos no vivirán contigo; así debe ser, pues ellos son los elegidos para repoblar la tierra con mi linaje.

Ri- Comprendo.

M/L- No debes temer Rivalle yo siempre estaré a tu lado y siempre, eternamente contaras con mi bendición y protección.

Ri- ¿Enserio madre luna?

M/L- Por supuesto, eres mi hijo desde que te casaste con Eren y ahora también lo eres por decisión propia y por cuidar a tus hijos, no te debes afligirte que cada uno de ellos y tendrá un guardián protector que tomara la forma de un animal y será cuidado y protegido por este, incluso tu tendrás uno, por ser muy preciado para mi te concederé a mi más fiel guardián; su nombre es Gabriel y es un animal muy singular, tiene cuerpo de león, alas de ángel, garras de águila, cola cabeza de serpiente y sus colmillos serán fuertes y poderos como los de un tigre dientes de sable.

Él te será fiel y siempre te cuidará y protegerá.

Ri- ¿Gabriel?

De repente apareció dicho guardián arrodillándose ante Rivalle, quien al verlo se quedó realmente sorprendido por la majestuosidad del animal.

X- A sus órdenes amo Rivalle.

Ri- Vaya que magnifico ejemplar, ahora ya me siento más seguro, gracias madre luna.

M/L- De nada hijo mío.

Mientras Rivalle regresaba a su cueva; la luna le susurro a Eren lo que había pasado y este se sintió mal porque su esposo no quería tener más hijos, pero al mismo tiempo comprendía su sentir.

Por ello se reprendió a sí mismo y se fue al bosque; al árbol de la sabiduría; el cual era mágico y solo aparecía ante Eren o la doncella luna.

Este le dio a Eren un fruto amargo que evitaría ser fértil y así no preñar a su esposo durante varios años o al menos hasta que el mismo Levi deseara hijos.

-Hay por qué no aprendo, siempre de una u otra forma logro meter la pata.

Espero que Rivalle me disculpe por este descuido.

Lo único malo de este fruto que Eren comió; era que también mermaba su calentura, ahora tendría menos ganas de aparearse y eso sin duda lo notaria Levi, o tal vez por un milagro no lo notase, pero será una suerte que no lo hiciera.

Eren no dudo más y se lo comió, como consecuencia; en su cuerpo se produjo un gran dolor, que lo quemaba por dentro y esto paso alrededor de 2 horas, el pobre castaño sufrió y mucho, pero no importaba, el solo quería que su esposo ya no se sintiera mal por culpa de él.

Al finalizar esas 2 horas, su cuerpo se sentía demasiado extraño; se sentía pesado, pero aun con eso en desventaja logro moverse y llegar de nuevo a su cueva, en donde solo le dio un beso y un abrazo a su esposo y luego se metió en la cama; en donde de inmediato cayo rendido por el cansancio, entrando en un sueño profundo.

El no sintió cuando Levi se acurruco con él, lamentablemente el joven se dio cuenta de que la piel de su esposo se sentía demasiado fría y pensó que Eren se había enfermado, así que solo se abrazó aún más al cuerpo de su castaño, para poder compartir el calor corporal, el azabache no se dio cuenta en qué momento se quedó dormido y cuando despertó ya su peludo lobo no estaba ahí.

Eren se despertó temprano y se fue a cazar, se dio cuenta de que Levi se había dormido abrazado a él, solo le dio un beso en la frente al azabache y luego partió.

El vio despierto a los ayudantes que la luna le había regalado a su esposo.

Eren- Cuando despierte mi esposo díganle que me fui a cazar y que no me espere, no sé a qué horas voy a regresar.

Sin embargo; Gabriel le dijo a Eren que, si gustaba él podría ir de caza en su lugar, pero eren rechazo la oferta.

Er- No, gracias, pero tu deber es quedarte a lado de mi esposo y mis hijos para protegerlos.

El guardián ya no dijo nada, al final de cuentas no comprendía las acciones o emociones de los seres de la tierra.