Disaster | Minsung

Capítulo 9

La mañana de noche buena había llegado, el clima helado tan característico haciendose presente desde las primeras horas del día. Las calles estaban adornadas con las típicas luces rojas y verdes, algunos listones colgando de las tiendas y el enorme árbol de navidad acomodado perfectamente en el patio del centro comercial.
Veía niños junto a sus padres jugar en las máquinas y un grupo de personas cantando los típicos villancicos.

El ambiente que lo rodeaba era realmente acogedor, sintiéndose un poco más contento por la linda festividad que se celebraba el día de hoy.

Para Jisung, Navidad siempre había sido una ocasión especial. Le gustaba la calidez que sentía al estar reunido en familia y luego quedarse horas conversando en la mesa después de cenar. No obstante, cuándo se mudó solo hace tres años aproximadamente, la emoción que sentía por aquel día había disminuido considerablemente.
El primer año viajó a casa y se quedó hasta el año nuevo, durante el segundo año le causó pereza tener que comprar un boleto de tren así que optó por quedarse con Felix, que tampoco había podido viajar a casa de sus padres, y ahora este año era distinto, para su sorpresa no estaría solo, iba a pasarla con su...Minho.

Bien, ¿Cómo se supone que debía llamarlo? No eran novios, ellos recién habían decidido darse la oportunidad de conocerse.
La palabra pareja sonaba demasiado formal y eso lo ponía algo incómodo.
Minho sería su saliente ¿verdad?

Muchas dudas y pocas respuestas.

Jisung sentía que todo esto era una nueva experiencia, había olvidado la última vez que frecuento a una persona en un ámbito romántico.
Su último recuerdo fueron los pocos meses que compartió con Chaewon, luego de eso solo había aceptado citas pero como ya se sabía, ninguna de ellas había terminado bien. Jisung terminaba cansado de cada una de esas personas por lo que ni siquiera les daba la oportunidad de la segunda cita. Era lo mejor, se decía a si mismo, sería sincero con sus intenciones y así nadie se hacía ilusiones.
Al menos en eso había quedado hasta que cierto pelinaranja ingresó a su vida poniendo toda su rutina de cabeza.

Jisung no estaba acostumbrado a ser demostrativo o alguien que buscaba constantemente cariño, sin embargo, durante esos días en los que estuvieron saliendo parecía que hubiera vuelto a adquirir su personalidad de la adolescencia.

Luego de quedarse en casa de Minho por dos días enteros en dónde conversaron, cocinaron juntos y pasaron el rato, inevitablemente tuvo que regresar a su casa y con eso, la semana final de clases se hizo presente haciendo que no pudieran salir tan seguido como antes. Aun así, se sorprendió cuando Minho llegó durante una noche a su departamento llevándole comida debido a que Jisung no había cocinado en todo el día por hacer un trabajo final de periodismo.
Esa misma madrugada Jisung sintió que cayó un poco más enamorado de Minho cuando vio que se había quedado dormido abrazandolo por la cintura mientras él se mantenía aún escribiendo en el computador. Fue por ese motivo que dejó el aparato de lado, despertó al chico y lo llevó a la habitación para que pudieran descansar tranquilos.

¿Ahora entienden? Jisung no era esa clase de persona, no tenía esa clase de iniciativa, pero por algún motivo con Minho se sentía todo tan natural.

Además, ese había sido el inicio.
Ya que entre los trabajos de la universidad de ambos y el trabajo de Minho su tiempo para verse se había reducido considerablemente, a ellos se les había hecho una rutina el quedarse a dormir en el departamento del otro.

Tuvo miedo, Jisung tuvo tanto miedo cuando cayó en cuenta de como algunas de las pertenencias de Minho ahora estaban en su casa y que muchas de sus pijamas ahora estaban guardadas en uno de los cajones que el mayor había separado específicamente para él.

Se supone que habían decidido ir lento a petición del menor quién le explicó que todo esto de salir con alguien se sentía nuevo y Minho lo entendió, aclarandole que respetaría su tiempo y estaría dispuesto a escuchar si no se sentía cómodo con alguna de sus acciones.
Pero ahora en la actualidad se encontraban en esta clase de convivencia extraña.