Hurren llegó a la aldea en busca de una nueva vida para su futuro, trabaja cómo niñera de Esther Mikaelson.
Esposa de un poderoso terrateniente,
Mikael Mikaelson, quien queda totalmente enamorado de la peliroja quien la enamoró y Hurren da a Luz a s...
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Todos estábamos ocupados en arreglarnos el hijo de Esther que no me había molestado y supongo que ninguno de mis hermanos fue en preguntar su nombre.
— ¡Ey! — Levanté mi vista para observar a quien Kol le había hablado — ¿Cómo te llamabas? — Vi al hijo de Esther ajustando su corbata.
— No lo molestes — ruedo mis ojos ante las reprimendas de Elijah antes de tiempo.
— Solo pregunté su nombre, no tiene nada de malo. — Se defendió mi mellizo.
— Ragnar — Soltó el joven.
¿Dónde había escuchado eso?
Mamá entró a la estancia con su precioso vestido tomando asiento en un pequeño sillón mientras unas chicas se acercaban a peinar su cabello — Porqué no me sorprende tú nombre. — Mamá tomó el pequeño espejo para verse.
— Rebekah, dime lo guapo que soy — Volteó a ver al espejo para ver a Kol quien me veía atravez del reflejo del espejo.
— Kol, no puedes hipnotizarme — Mire mis uñas y le hice mala cara a la chica cuando pintó donde no debía — Hazlo correctamente — Saqué mis colmillos.
— Rebekah — Regaño mi madre y solo sonreí con inocencia.
Finn y Elijah soltaron una risita hasta que se escuchó la puerta siendo azotada. — ¡Niklaus no traes mariachi! — Regañó mamá.
— Lo siento — Se disculpó y sentí su pesada mirada encima. — ¿Por qué no me lo dijiste?
— ¿De que hablas? — Me acomodo en mi lugar.
— Y ahí viene — Caturreo mi mellizo.
— La Dooppelganger... — Respondió de inmediato.
— Не тук. Niklaus. — Mamá le dio una mala mirada.
— ¿Lo sabías? — parecía incrédulo.
— Lo sabía. Pero es problema de tu hermana. — Klaus me miró inconforme y yo solo sonreí.
