In My Heart

Epílogo: Superheroína

5 años después...

- ¡Sophie! ¡Para!

Una mujer corría a toda velocidad detrás de una niña que reía a carcajadas.

- ¿Es que quieres matarme de un susto? - preguntó la mujer divertida mientras sostenía suavemente de los brazos a la niña. La pequeña la miró preocupada y acercó su cabeza apoyándola en el pecho de la mujer como si intentara escuchar algo.

- No - negó con su cabeza - Todo está bien. - sonrió apartándose de la mayor que le sonrió - Mamá dice que tu salud es buena y que tienes el...

- Corazón de una superheroína - sonrió la mayor mientras la pequeña asentía y daba palmadas con sus pequeñas manos.

- Hablando de mamá... - dijo la mujer señalando con la cabeza hacia un punto detrás de la pequeña.

Una mujer rubia caminaba con una sonrisa en dirección a ellas.

- Mamá - gritó la pequeña soltándose del agarre de la mayor que solo pudo negar con la cabeza y reír tiernamente.

La pequeña alcanzó a la rubia que atrapó su salto con gracia hacia sus brazos. Llenó la cara de la niña de besos mientras le hacía cosquillas con una de sus manos. Diablos... eran una copia exacta y la tortura de la mujer que ahora se erguía orgullosa mientras las admiraba.

- Mamá, vamos, mira, mira lo que aprendí - dijo la pequeña arrastrándola hacia el tobogán. La rubia miró a aquella mujer con una sonrisa a modo de disculpa, recibiendo por parte de la otra una señal de asentimiento. Sabía que esa pequeña moría en los brazos de esa mujer, y ese era el momento de darles un pequeño espacio.

Sacó de su mochila una cámara de fotos y se dedicó a fotografiar ese momento con una genuina sonrisa en su rostro. Qué podía hacer, las amaba profundamente.

- Son hermosas esas dos.

- ¡Dios mío! ¿Os habéis propuesto matarme hoy? - dijo sujetándose el pecho y girándose hacia donde provenía la voz.

- Drama Queen - dijo la mujer.

- Que lo digas tú Kim... - rio ganándose un golpe en sus costillas. - ¿Qué haces aquí? ¿Pensé que estarías en París?

- Cualquiera diría que estás feliz de ver a tu hermana, Manobal - sonrió

- Oh, vamos Jennie... no lo decía en ese sentido.

- Volví antes. Pronto es el cumpleaños de mi sobrina favorita.

- En realidad, Sophie es tu única sobrina. - dijo rodando los ojos y ganándose otro golpe en las costillas.

Ambas volvieron a mirar a las dos rubias mientras jugaban. El viento empezaba a ser algo frío y golpeaba levemente el rostro de las dos hermanas. Jennie lanzó un pequeño suspiro ganándose el interés de la más alta.

- ¿Estás bien? - preguntó.

- Hoy...

- Lo sé... hoy hace cinco años. - pasó un brazo alrededor de los hombros de la más baja y la atrajo hacia ella con suavidad. - Le estaré eternamente agradecida. Ella no sólo me dio vida, me regaló una preciosa familia.

- Ojalá ella hubiera podido conocer a Sophie.

- Estoy segura que desde allá arriba se ve todo genial - sonrió.

- Adoraba el nombre de Sophie.

- Y no dudamos en ponérselo.

- Gracias... - dijo Jennie mirando a su hermana.