In My Heart

Normalidad

- Buenos días Dra Park. - Jungkook entró en el despacho de Rosé con varios expedientes.

- Deje de decirme así, me pone nerviosa. Tengo todavía mucho que aprender de usted Dr. - dijo Rosé ruborizándose levemente.

- Vamos Rosé, eres parte del equipo. Por favor, tutéame.

- De acuerdo, Kookie. - sonrió - ¿Qué me traes?

- Bueno... Tenemos algunos casos interesantes. Uno en conjunción con el área infantil. Jisoo ya está al tanto, tendremos un comité mañana. Te dejo aquí el expediente para que le eches un vistazo. - dijo colocando la carpeta en la mesa. - Por cierto... alguien me ha dejado esto para ti - colocó un sobre sobre la mesa y le guiñó un ojo antes de desaparecer por la puerta.

Rosé rápidamente tomó el sobre y sonrió cuando leyó su contenido. Distinguió la caligrafía de Lisa trazando su nombre.

Rosé se levantó de su asiento y salió en dirección al jardín.

- ¿Buscas a alguien Rosie? - la voz de Lisa la sorprendió e inmediatamente giró en su dirección.

Estaba preciosa, sus enormes ojos la miraban con un brillo especial. Rosé no pudo evitar derramar una pequeña lágrima. Hacía unas semanas había pensado que la perdería y ahora, ella estaba de pie junto a ella, sonriente y vestida con esos vaqueros ajustados, esa camiseta y su chaqueta de cuero, preciosa y sexy.

- Hey... no llores amor - le dijo abrazándola. Rosé sintió su corazón llenarse de paz cuando la escuchó llamarla "amor". - Tranquila, todo está bien.

- Lo sé... es sólo que... - murmuró sobre su cuello. - tuve tanto miedo de perderte. Estoy tan feliz de que estés aquí conmigo.

- Y estaré junto a ti siempre. - sonrió apartándose levemente de ella para dejar un casto beso en los labios de la cirujana. - Te he traído el almuerzo. - levantó una de sus manos mostrando una bolsa de papel.

Ambas se sentaron en el césped. Lisa le pasó el táper de comida y abrió el suyo. Rosé la miró curiosa.

- ¿No te han dicho que debes comer sano? - dijo mirando la hamburguesa que Lisa iba a llevarse a la boca.

- La Dra Park es un poco cascarrabias ¿sabes?. - dijo haciendo a Rosé girar los ojos. - No entiende todavía que pasé mucho tiempo comiendo demasiado sano. Pero estoy segura de que tú no se lo dirás, ¿verdad Rosie? - rio burlonamente.

- Lili...

- Está bien, está bien. Sólo por hoy, por favor. Tenía antojo de esta cosa hace siglos - dijo haciendo reír a Rosé.

- ¡Hey, par de tórtolas! - Jisoo se acercaba de la mano de Jennie.

- Cuñadita - Lisa saludó levantando las cejas de forma sugerente y ganándose un codazo de Rosé. - ¡Auch! Hey, todavía estoy convaleciente. - Rosé la miró divertida y besó su pequeño puchero. - Mucho mejor. - sonrió la castaña.

- No cambias Manobal - dijo burlona Jisoo.

- ¿A qué debemos el honor? - preguntó la castaña una vez que se sentaron a su lado.

- Bueno, Jisoo y yo tenemos una noticia que darles - comentó la morena.

- ¿Qué es? - preguntó la rubia.

- Vamos... vamos a hacer un viaje a París. Bueno... vamos a mudarnos a París durante un tiempo.

- ¿Qué? - dijo Lisa. - ¿Tu hermana ha vuelto a la vida y tú quieres abandonarla? - sonrió burlona.

- Oh, cállate. No es como si te dejara en malas manos...

- En eso tienes razón - dijo mirando a la rubia tiernamente.