-Buenos días-murmuran y abro los ojos suspirando con pesadez.
Me muevo un poco y me doy cuenta de que sigo abrazada a Magnus con la cabeza en su pecho.
Levanto la cara para mirarlo y lo encuentro mirándome con una sonrisa que hace que se marquen sus hoyuelos.
Le sonrío también.
-Buenos días-murmuro y pasa su mano por mi cabello peinandolo.
Debo parecer un desastre.
-Pareces un espantapájaros -comenta y empiezo a reír
-Pues teniendo en cuenta que tuvimos una noche movida y no me peiné antes de dormir-le digo- no me sorprende parecer uno
-Un espantapájaros de ojos bonitos-sigue y hago un puchero.
-Eso es lindo-murmuro y borra su sonrisa haciendo que suspire-no Magnus, no vuelvas a ponerte serio
Me mira con los labios apretados y me levanto subiendome en su regazo haciendo que me mire con una ceja enarcada.
Bufo cuando noto que se lame los labios al ver mi estado. Sigo en camisa de tirantes y ropa
interior.Llevo las manos a su rostro y me inclino antes de empezar a dejar besos en sus mejillas, boca, mandíbula y cuello
Lo escucho reír y me levanto.
-Tu risa es preciosa Magnus, y puedes decir lo que quieras, no te cohibas conmigo -le digo y me toma del rostro haciendo que me incline y pega nuestros labios en un beso húmedo y dulce.
-Te amo-murmura separándose un poco y sonrío
-Lo sé -asiento y voltea los ojos.
-Bien-se pone serio y río
Dejo otro casto beso en su boca
-Tambien te amo Magnus-le digo y su sonrisa vuelve a aparecer.
Todos dicen que Magnus nunca sonríe, pero lo que más he visto en él son sonrisas.
Magnus conmigo es diferente a como se muestra con los demás, y eso me hace sentir bien, porque significa que confía en mí lo suficiente para mostrar su verdadero yo.
-¿Desayunamos?-pregunta sacándome de mis pensamientos y asiento
-Yo cocinaré- frunce el ceño-yo no tengo sirvientes, Mi Rey.
-Me gusta como suena eso-dice-Mi Rey -sonríe y yo también lo hago.
-¿Ah sí?-pregunto sonriendo y dejo un casto beso en su boca.
Asiente acariciando mi cadera y suspiro.
-Tenemos que desayunar-murmuro cuando mueve mis caderas de atrás hacia delante de
manera suave y siento su dureza.-Y lo haremos-murmura jadeando- pero más tarde.
Asiento.
~
-¿En serio sabes cocinar?-indaga Magnus entrando a la cocina y sonriendo por el olor de los panqueques.
-¿Acaso hay algo que no pueda hacer?-pregunto enarcando una ceja y voltea los ojos pero sonríe.
-No sé -duda- ¿Disparar?
Río y enarca una ceja.
>>¿Sabes disparar?-pregunta asombrado y asiento.
-Mi padre dice que nunca está de más aprender, ya que no sabemos cuándo lo vamos a necesitar-contesto y asiente
-Es un buen lema-observa y me encojo de hombros.