Al despertar y antes de abrir los ojos, rogó a cualquier dios que lo estuviera escuchando que su pareja estuviera ahí a su lado, que no fuera solo un lindo sueño, cuando pudo enfocar lo vio ahí, aún abrazado a su pecho, sentía sus piernas entrelazadas y el aroma a jazmín ya inundaba el cuarto.
Acarició esas lindas mejillas, con sus dedos tocaba cada peca que las adornaban era tan lindo, era su conejito, ese ser que cambio su mundo; cuando pudo separar sus ojos, notó que tenía un mensaje en su celular, asi que, tratando de no despertarlo, lo tomó vio que eran de su viejo, asi que de inmediato lo llamó.
—Ven de inmediato – rodó sus ojos, ya lo estaba fastidiando todo.
—No estoy listo, acabo de levantarme – no queria ir por lo tanto retrasaría ese encuentro lo más que pudiera – Izuku sigue durmiendo y no quiero dejarlo ...
—Si tu no vienes, estaré ahí en menos de diez minutos – se levantó de inmediato y fue al baño.
—No te atrevas – le dijo con toda la rabia que estaba sintiendo – estaré ahí en el hotel.
Colgó sin esperar una respuesta, se arregló lo más rapido que pudo, antes de salir dejó una nota informando lo que pasaba despues salió; llevaba meses sin sentir ese fastidio de estar con su padre y escuchar sus estupideces de alfa resentido.
Y ahí a lo lejos lo vio, sentado junto con el resto de su familia, estaban Inko san, All Might, Aizawa y David, se apuró en entrar con un movimiento de cabeza saludo a todos.
—Buenos dias hermanito – saludo Fuyumi, él se sentó junto a la familia Midoriya – te ves menos agotado con un delicioso aroma rondándote.
—Es gracias a mi amado conejito – dijo honestamente, mientras comía un panecillo – gracias por venir a la celebración.
—Has crecido tanto mi niño – su madre estiró su mano, acarició su rostro – estoy muy orgullosa de ti y lo que has logrado hasta ahora.
—Gracias madre – se dejó acariciar, esas manos eran muy agradables – pero todo ha sido gracias a los buenos maestros que me han guiado.
—Volverás conmigo a Japón ahora mismo – ahí estaba él jodiendo el buen momento.
—No – respondió mientras lo miraba fijamente – me iré con Izuku y como la empresa es mía, empezaré a generar cambios, lo quieras o no, ¿Puedo hacerlo verdad hermana?
—Asi es – ella sonrió, le entregó las carpetas – además hablé con Izuku chan hace un par de meses, él ha estado haciéndose cargo de la parte jurídica de la empresa.
—Bien – se percató que todo estaba en orden lo cual agradecía que ellos cuidaran de sus bienes – necesito los documentos que me certifican como alfa capaz de vivir independientemente.
—Lo tiene Inko san – ella respondió, esas palabras lo hicieron sonreír más – asi que ya puedes dar tu apellido a quien desees o perderlo, eso depende de ti.
—Me reúso a que eso pase – Enji se veía muy enojado, eso a él y sus hermanos les gustaba generar.
—Tranquilo viejo – levantó los hombros, restándole importancia – seguiré siendo un Todoroki, pero se lo daré a Eri, Izuku y a mis futuros cachorros.
El silencio se hizo presente, Natsuo le entregó la cajita que esperaba entregar desde hacía bastante tiempo, la tomó, dejó un beso en ella.
—All Might, Inko san – se levantó e inclino a noventa grados – pido formalmente el permiso de ustedes de poderme casar con Midoriya Izuku, juro cuidarlo eternamente y seguirlo buscando hasta despues de nuestras muertes.

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El primer amor
RomanceTodoroki Shouto es un estudiante alfa privilegiado, mejor familia, mejores notas, pero es un rebelde sin causa que odia tener contacto con las personas y simplemente odia ir al colegio. ¿Que pasara cuando pierda varias materias y el rector decida po...