MARATÓN 2/5Turquía, Agosto del 1522
PALACIO TOPKAPI
Todo el palacio estaba listo, los sirvientes están a la espera de que las puertas sean abiertas por su Sultán y empezar con la celebración, las mujeres junto a los hijos del monarca estaban aguardando ansiosas al lado de la madre y hermana de este, bueno todas excepto Mahidevran que a pesar de haber perdido a sus hijos ya no se mostraba triste sino que se le veía resentida y sin olvidar las miradas de odio que le lanzaba a la pelirroja, pues ahora Hürrem era la que iba al lado de la sultana Hatice, ya que el hijo de la rusa paso a ser el heredero al trono.
Hürrem hatun había ascendido a primera consorte gracias a su "magnífico" plan, su hijo ahora era tomado como el primogénito y heredero de su sultán, o bueno, del hombre que tenia engatusado porque ella no sentía amor por aquel que la robo de su amado Leo, oh dulce pintor que anda buscando a su amada para volver a retomar una historia de amor que nunca tendrá un final feliz.
Al extremo de la sala todo era muy obvio, la primavera había entrado en desesperación porque ya no tenia a sus príncipes los cuales le daban poder, al no tener el amor del sultán y ser dejada de lado ya no podía refugiarse en ese poder que le daba Mustafa al estar vivo. Todos sus planes fueron frustrados y ahora las que estaban por encima de ella eran Hürrem y Gülfem, esperaba un milagro y los hijos de estas murieran o simplemente ellas lo hagan.
Pero nada es como uno quiere... ¿o si?
Sin embargo, a las afueras del palacio entraba un hombre junto a su consejo, el gran sultán por el que casi todas las mujeres del harem peleaban estaba entrando al majestuoso palacio donde todo era riqueza pero con el alto precio de dar su cuerpo por un hombre que solo las tomaba por cumplir con lo que ellos creían que era una importante ley. Ellos veían a las mujeres como juguetes sexuales y que el único beneficio que les dan son los hijos, pero eso no era cierto, pues aún no llegaba la mujer que les haría ver cuan poderoso y magnífico es el género femenino.Suleiman pisaba el pavimento de la verdadera casa real, no de aquella pesadilla que aún lo atormentaba y lo hacía temblar con tan solo recordar los rostros de sus pequeños leones sin expresión alguna.
—¡Atención, Sultán Suleiman Khan a llegado!- la voz de un agha retumbó por los pasillos haciendo que aquellos que estaban ahí hicieran reverencia ante el hombre que aparentaba poder y firmeza ante aquellos que habían sido comprados para servirle exclusivamente a él y su familia.
Siervos, personas que tenían un valor, el valor de unas cuantas monedas de oro si es que se veían en buen estado para servirles a los de sangre real, o al menos a los que ascendían tan rápido como aquellas esclavas que se volvían favoritas del monarca.
La esclavitud era disfrazada por una hermosa ilusión de un bello palacio que pretendía brindar protección ante el nido de víboras que te enfrentabas, pero tranquilos que toda plaga se elimina o tal vez llegaba alguien más venenoso...
MUELLE DE TURQUÍALos mercaderes quedaron sorprendidos cuando de los navíos, que habían embarcado en el puerto, bajaron los soldados egipcios con una preciosa silla gestatoria de oro. Los pueblerinos se miraban entre ellos con algo de temor, pues habían dejado de bailar para ponerse a pensar unos segundos. Aquel que parecía un trono de oro no sería apropiado para mostrar pleitesía a su sultán, sino que querían demostrar poder y riqueza.
—No creo que se vengan a rendirse, ellos parecen que nos van a atacar.- los murmullos entre los otomanos no se hicieron de esperar, estaban empezando a dudar de la palabra del griego y de que los egipcios nunca se habían rendido.
De pronto un grupo de soldados bajaban rodeando a una mujer con dos pequeños, ellos vestían ropa de la realeza y justo en ese momento se dieron cuenta que había otra silla gestatoria más pequeña. La mujer parecía irreal con tanta belleza que desprendía y los niños eran precioso pero no sabían quienes eran.
Cleopatra subió en aquel precioso trono de oro seguida de sus hijos que estaban emocionados por subir por primera vez en su pequeño trono que su madre había mandado hacer para ellos, los niños tenían un aspecto digno de príncipes egipcios y no pudieron reconocer aquellos sehzades que perdieron.
—¡Atención, ábranle paso a la reina Cleopatra de Egipto y a los príncipes!- Sumbul agha estaba irreconocible, las vestimentas que ahora portaba más el maquillaje que tenía, no dejaba ningún rasgo de lo que fue antes.La multitud que se había formado fue disipada por los soldados que prácticamente abrían paso para que su soberana pudiera pasar y para protección de ella junto a los pequeños.
Ikeni estaba feliz de que pronto verían al sucio pasha para poder ponerlo nuevamente en su lugar con su reina de respaldo. El soldado había aguantado tanto que un día no se pudo resistir y le terminó contando todo a su señora, donde ella misma salió hecha furia y le declaró internamente la guerra al pasha pues nadie se podía meter con su gente, jamás iba a permitir que alguien inferior a ellos fuera a tratarlo como lo que no eran, unos esclavos.
La reina llegó para acabar con todo aquel que se cruce en su camino, esta vez no había un dragón que acabara con el imperio pues llegó la parca para acabar con el.
——————————————————————
HOLA AQUÍ LES DEJO EL CAPÍTULO DE HOY, PERDÓN QUE NO LO PUBLIQUÉ ANTES PERO ME QUEDÉ DORMIDA Y TUVE CLASES ASÍ QUE RECIÉN REVIVO.
¿Les gustó?
No se olviden de votar, comentar, tomar agua y comer bien.LOS AMOOOOOOO💗✨
ESTÁS LEYENDO
CLEOPATRA
Fanfiction- ¡Soy la favorita del sultán Suleiman! - Y yo soy la reina de Egipto, ¡Yo tengo sangre real! Pobre Hurrem; no sabe que muy pronto volverá a ser una esclava, porque Cleopatra es la reina del Mundo y te aniquilará si le estorbas.