Perfectamente normal

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"Ah, Camila, no sé si es buena idea." La señora Jauregui suspiro cruzando las piernas.

"Hoy estoy libre, Lauren puede quedarse conmigo"

"Le garantizo que Lauren estará bien." Camila dijo, su voz irradiando convicción. "Estará todo el tiempo conmigo."

"Sí ella comienza a gritar, tú-"

"Sé como calmarla, y ni siquiera pienso que vaya a gritar. Será sólo un paseo. Laur tiene que salir más veces de casa, por eso ella está tan estresada"

La chica de ojos verdes, que estaba ajena a todo, tiró de la mano de Camila murmurando algo que tenía sentido sólo para ella.

"Espera, Lo. Estoy hablando con tu madre." Camila murmuró a la mayor ofreciéndole una sonrisa gentil.

"Habla rápido, Camz." Lauren jugaba con sus manos ansiosamente, en sus ojitos había un brillo perceptible causado por la animación.

"¿Ve? Esta tan emocionada..." Camila volvió su atención a la mujer mayor, asintiendo con la cabeza hacia Lauren.

"Está bien." Clara dijo todavía medio de mala gana. "Lauren, ven aquí"

La ojiverde fue retirada de su mundo por las manos de Camila tirando de ella suavemente por la cintura, "Tu madre te está llamando, Lo."

"N-no, Lauren quiere ir con Cam-Camila..." La chica de pelo corto trataba de deshacerse de la mano de su madre que estaba en su muñeca.

"Iras, bebé." La señora Jauregui dijo riendo levemente. Lauren resopló cerrando los ojos al recibir un beso en su frente. "Te comportas, ¿sí?"

"Lauren ya es grande mamá" Dijo.

La facilidad con la que dicto las palabras hizo que una enorme sonrisa adornara los labios de Camila.

"Lo sé, pero tengo que asegurarme que no le darás trabajo a Camila."

"¿Podemos irnos?" Camila preguntó ya un poco impaciente. Clara suspiro antes de soltar la mano de su hija.

***

Lauren miró a su alrededor con una pequeña sonrisa en sus labios, parecía querer grabar cada pedacito de lo que estaba viendo. Una brisa ligera hacia que sus cabellos bailara y le daba motivos para reír.

El tiempo estaba un tanto frío y por eso su nariz y mejillas estaban rojas, sus ojos eran casi azules y el brillo permanecía. Sus pequeñas manos cubiertas por unos guantes de lana color azul bebé, un gorro con orejitas de panda cubría su cabeza y una pequeña parte de sus orejas.

"¿Keana ya llego, C-Camz?" Lauren preguntó en voz baja jugando con los dedos de Camila después de sentarse en un banco.

"Todavía no, creo." Camila dijo medio distraída por estar arreglando el gorro de Lauren.

"¿Tienes frío, nena?"

"Lauren está bien con Camila." Dijo balanceando sus piernas, una clara señal de ansiedad.

La chica de ojos marrones sonrío depositando un breve beso en la sien de Lauren. Camila entrecerró los ojos para mirar a su alrededor, sonriendo cuando percibió a Keana aproximarse hacia ellas devolviendo la sonrisa.

"Hey" Camila murmuró levantándose para besar la mejilla de la chica sin soltar la mano de Lauren.

"Hey, ¿Quién es tu amiga?" Keana asintió con la cabeza en dirección a la ojiverde, que no había percibido su presencia y siguió jugando con los dedos de Camila.

"Uh, esa es Lauren." Camila suspiró comenzando a ponerse nerviosa por la enorme posibilidad de que Keana tratara a la chica mayor como si fuera anormal.

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