Tarde de discordia

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Lauren frunció los labios, sin saber cómo reaccionar a la situación.

"Quédate... calmada, ¿okay?" Camila condujo a su amiga hasta el sofá, empujándola suavemente para hacerla sentarse. "Voy a buscar un vaso de agua para ti."

Normani sólo asintió y escondió el rostro entre sus manos, encogiéndose en las almohadas. Lauren la miró por un rato y se acerco, tocando tímidamente las manos de la chica negra. Una vez que descubrió su rostro, Normani fue tomada por sorpresa por el beso cariñoso que Lauren dejo en su frente.

"¿Abrazo?"

Sin ni siquiera responder, Normani apretó los brazos alrededor de la mayor, arrancándole un pequeño suspiro. Lauren sonrió y dio algunas palmaditas torpes en su espalda.

"No puedes dejar que las lágrimas escondan los hermosa que eres." La chica pálida se apresuro a limpiar el rostro de la chica con la manga de su sudadera.

Normani permaneció callada, observando sus manos entre las de la mayor. La diferencia del color de las pieles era evidente.

"¿Por qué Normani- estabas llorando?" Lauren preguntó, su cabeza ligeramente inclinada a un lado.

Cuando la chica negra abrió la boca para responder, el sonido de los pasos de Camila la hizo callar. La latina le ofreció una pequeña sonrisa mientras le entregaba el vaso.
"¿Quieres contar lo que sucedió o-"

"Estaba en el supermercado... yo... yo quería comprar algunos dulces y chatarra para que comiéramos... yo ya estaba en la fila y había una mujer detrás de mí," hizo una pequeña pausa para poder limpiar una lágrima solitario en su rostro, "Ella comenzó a llamar al chico de la caja... diciendo que no tenía todo el día para estar cerca de este tipo de gente, lo dijo mirándome..." Normani tomó una respiración profunda antes de continuar, "El cajero le pregunto si yo la estaba incomodando. Ella dijo que no había manera de no incomodarse con un negro cerca de ella, siendo que en cualquier momento yo podría... robar sus cosas."

"Mi Dios..." Camila frunció el ceño, incrédula. "Siento mucho que tuvieras que pasar por eso, Mani... aún existen tantas personas ignorantes como esa mujer en el mundo... ella ni se imagina la persona maravillosa que eres."

Lauren, que hasta ese entonces estaba callada y quieta, restregó sus ojos y se acercó a la chica negra, levantando sus manos para limpiar las lágrimas en su rostro.

"Pero eres hermosa... algunas personas piensan que no eres bella por causa de tu piel. Pero si yo tuviera la piel de chocolate como la tuya, continuaría bonita también," Las otras chicas no consiguieron dejar de reír por el comentario de la mayor.

"En serio, Mani. Sé que es difícil, pero trata de ignorar ese tipo de cosas," Camila acaricio la espalda de la chica negra con los pulgares durante el abrazo.

"Tu cabello es una corona," Lauren observo. "Una corona que es para recordar siempre la belleza que... her... heredaste de las reinas de África." Sonrió con cierta timidez, dudando si debía o no juntarse al abrazo.

Normani tenía miedo de que su sonrisa pudiera rasgar su rostro en aquel momento. Controlando las lágrimas, tiro de la chica de piel pálida contra su cuerpo y apretó hasta que un bajo chirrido escapara de su boca.

"F-fuerza, Mani."

"Puedes soltar, ya está bien," Camila dijo, dando algunas palmadas débiles en el hombro de su amiga al percibir que el rostro de Lauren ya estaba quemando en rojo.

"Toda tuya," Hablo, levantando los brazos en señal de rendición. "Hablando de tuya, mándale un mensaje a Dinah y pídele que venga aquí."

"¿Mufasa?" Lauren irguió el rostro y lanzó una mirada divertida a Normani después de la señal positiva de Camila. "Amor de Normani..."

***

"Awww, tu dibujo está linda, Laur."

"Gracias," La de ojos verdes respondió concentrada y no noto que Normani estaba añadiendo algunos trazos en el papel, "No, Mani. No Mani... ¡¡¡NO!!!"

Las chicas explotaron en una sonora carcajada mientras Lauren permaneció con una mueca en el rostro, los brazos que antes estaban apoyados en el suelo, ahora estaban cruzados debajo de sus pechos.

"¡Camz!" Lauren llamó. "¡D-dibujo de Lauren! ¡Sácalas de aquí!"

"No puedo dejar a Lauren sola con ustedes ni un minutos porque ya arreglan una manera de molestarla," Una Camila indignada salió de la cocina con un plato en cada mano, "¿Qué te hicieron, amor?"

"Dibujo," Respondió simplemente mientras fulminaba con la mirada a las dos chicas que aún reían en la alfombra.

Camila observo la hoja de papel colorida en el suelo y tuvo que llevar una mano a la boca para reprimir una risa al ver un Camz de Lolo con la caligrafía perfecta de Normani en la parte superior de la hoja.

"No es divertido," Lauren murmuró. El puchero que antes estaba formado en sus labios fue desarmado por la secuencia de besos que Camila aplicó en su boca.

"¡Que melosas!" Dinah puso los ojos.

"¡CAMZ DE LOLO!" Lauren exclamó, seguido de una sonora carcajada escapando de su boca.

"Pero ella no estaba-" Dinah fue interrumpida por una risa de Lauren. "¡Camz de Lolo!" Canturreo, agitando la hoja de papel en su mano.

"¿Ah, te gusto?" Normani levanto una ceja y la mayor sólo asintió. Luego sus manos agarraron el rostro pálido y después de que Lauren luchara mucho, Normani consiguió dejar la marca de sus labios en una de las mejillas de la misma.

"¡Bleh!" Lauren mostró la lengua mientras trataba de limpiar la mancha roja. "Camzi."

"Ven acá," Dinah abrazo a la ojiverde por los hombros, "Lo siento, bolita."

Camila puso los ojos en blanco y tiró del rostro de Lauren para poder susurrar algunas palabras en su oído. La misma asintió y sonrió de lado, girándose hacia la polinesia.
"Vete con tu novia."

"¡Deja de enseñarle cosas incorrectas a Lauren, Cabello!"

"¡Camz de Lolo no es malo!" La ojiverde replico.

"¿Por qué no?" Dinah levanto una ceja, pero no espero que Lauren fuera tan rápida en responder.

"Porque no es malo si te h-hace feliz."

El silencio reino en la habitación después de las palabras de la mayor. "Chicas..." Dinah suspiro, por fin. "Ese dicho..."

"¿Qué?" Camila frunció el ceño.

"¡¡¡CAMZ DE LOLO!!!" Lauren exclamo con las manos extendidas a lo alto.

***

Lauren cuidadosamente doblo el papel, vacilante si el dibujo era o no lo suficientemente bueno. En pasos lentos y silenciosos fue hasta la sala, parando en medio del camino como una voz bastante familiar llego a sus oídos. Inconscientemente una sonrisa nació en la comisura de sus labios, que fue desvaneciéndose a medida que escuchaba la conversación.

"... no encontrará a nadie porque es autista y nunca va a poder hacer cosas de gente normal. Y asú sucesivamente," Lauren tuvo que parpadear algunas veces para conseguir creer que realmente estaba escuchando aquello.

Al darse cuenta, presiono las manos en sus oídos y cerró los ojos fuertemente en el intento fallido de organizar sus pensamientos. Ya con algunas lágrimas escurriendo por su rostro, se acercó mínimamente a las voces y observo callada a su madre entregar algunos billetes a Camila.

"¡Ahora vuelve a trabajar, Cabello!" Clara exclamo, provocando risas en la latina.

"¡El peor trabajo del mundo!" La joven respondió.

Lauren deslizo la espalda en la pared y aumento la presión en sus oídos, controlando los sollozos que querían escapar de su garganta.

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