Te Necesito (#1) BORRADOR

15. Casa De Campo

Narra Rose

18 de Agosto, 2017.

La casa de campo de los Maxwell es hermosa, se nota lo bien cuidada que está. Tiene un jardín enorme, piscina y muchas habitaciones.

Observo todo con mucha atención.

-Es hermosa -escucho a mamá.

-Lo es. Me encantó el jardín -digo.

-Si gustan después les doy un recorrido por allí, tengo plantadas muchas flores. Arthur sme ayuda bastante -Freya parece muy emocionada.

-Nos encantaría -mamá responde.

Las tres nos vamos directo a la cocina, habían pasado algunos minutos desde que habíamos llegado. Lamentablemente mi hermano, y Austin no pudieron venir. A Ethan le tocó viajar por negocios, y Austin tenía algunos trámites que hacer; aunque algo me dice que vendrá en unos días.

Nos quedamos cinco días, por lo que intentaré disfrutar lo que más pueda.

-¡Mamá! ¡Mamá! -Veo de donde viene el llamado, y es de la puerta que lleva al jardín. Asher salta emocionado mientras me llama- ¡Hay una tina muy grande! -Abre sus brazos.

Me acerco hasta él, y acaricio su cabello.

-No es una tina, mi amor. Es una piscina.

-No sabía. -Se lleva las manos a la boca totalmente asombrado- ¿Me puedo meter?

-Hoy no, Asher. Lo harás mañana cuando llegue tu padre.

Abre los ojos.

-¿Llega mañana?

Mi bebé lo había extrañado demasiado.

-Sí, cariño. ¿Irás con tus abuelos o vendrás conmigo?

-Con los abuelos.

-Está bien, pero te comportas. -Le hago una seña a papá para que lo vigile, últimamente está algo travieso.

Camino de regreso a la cocina donde está mi madre con Freya conversando muy a gusto.

-Rose, no te había dicho lo feliz que estoy por la noticia. -Freya se acerca a abrazarme- Es hermoso que se den una oportunidad.

Mis mejillas arden de la vergüenza.

-Muchas gracias, Freya.

-Estoy segura que lo de ustedes funcionará, y les deseo todo lo mejor -sus ojos están vidriosos.

-Aún estoy flotando -río-. Gracias por apoyarnos -les sonrío a ambas.

A los minutos nos estamos moviendo en la cocina preparando el almuerzo. Es bueno volver a tener compañía.

Asher se pasa toda la tarde jugando en el jardín con el perro de mamá, y Ansel; que por cierto es una chico muy inteligente.

Es un pequeño hombrecito.

★★★★

Termino de secar mi cabello, y camino hasta la cama pasara acostarme. Había sido un día muy ajetreado, el viaje me dejó cansada.

Reviso mi teléfono buscando algún mensaje, me encuentro uno de Amos.

Amos: Ya queda menos, Tesoro.

Yo: Solo horas...

¿Debería decirle algún apodo cariñoso?

Amos llegaría mañana, su vuelo se había retrasado por mal tiempo, así qué llegaría muy temprano. Había cumplido con lo que dijo y todos los días me llamaba, no sé porqué este hombre me hacía sentir tantas cosas, pero no me acobardaria. Bastante lo he hecho.