Yo en DxD (Sin revisar)

2 - dulce despertar

-¿Hu..? ¿Que es esto... Una almohada?- Apretaria lo que creía era una almohada, sintiendo una blanda esfera en la palma de mi mano, acompañado de un pequeño gemido...

-hmm~

Desde que aparecí en este universo, pude notar como mi "perversión" era "anormal", por lo que llegue a la conclusión, no era el prota el pervertido, era esta misma realidad la estropeada que incluso lograba corromper hasta el mas puro de los ángeles.

-*¡Dios, gracias por este momento!*

Agradecería en mi cabeza, mientras mi mano continuaba apretando el bollo como buen panadero, preparándolo para sentir las brazas del horno.

-Fu~fu~ Parece que estas animado~

Akeno saldría de las sabanas mientras remojaba sus labios con su lengua.

¡Mierda me va a matar!

-N-no me has dicho que pare*¿¡Porque dije eso!? *

*Glup..*

Una pequeña sonrisa lasiva se formaría en mi rostro. ¿La razón? Estoy viendo el desnudo cuerpo de esta waifu.. Aunque no era un issei. No podía perder esta oportunidad, simplemente apreciaria el momento.

-Ara~ara~ Eres un pervertido~

Akeno lamería la punta de sus dedos, mientras disfrutaba del caluroso momento.

Antes de que pueda realizar un movimiento aun mas placentero, seriamos interrumpidos.

-¿Estan despiertos...?

Rías observaría la posición en la que nos encontrábamos...

...

...

-¿¡QUE CREEN QUE ESTAN HACIENDO!?- La ruborizada rías, se daría media vuelta mientras analizaba lo que acababa de suceder.

- ¡Vistanse y salgan de inmediato!

Se iría cerrando la puerta con fuerza.. Aun que no tanta.. Estoy seguro de que contuvo su fuerza de demonio..

Tal vez no tiene tal fuerza...

*Suspiro*

¿Como puedo pensar eso en esta situación..?

-Maldición, justo en la mejor parte... Oye, himejima-sempai, ¿que te parece si lo continuamos en otra ocasión? - Me colocaría de pie y procedería a vestirme.

Saldría despues de akeno, observando como todos se encontraban en la sala. Excepto de issei, cual aun no sabia que era un demonio...

-¿Bien, que quieren? - Me sentaría en el sofá, para luego cambiar mi mirada a una de seriedad. Esperando cualquier movimiento de los presentes.

-¿Que eres? -Preguntaria rias, mientras dejaba su taza de te sobre la meza.

-Pensé que ya lo habías visto, soy un hombre - Diría mientras señalaba mi pecho y una pequeña sonrisa de orgullo se escapaba de mis labios.

-N-no me refiero a eso, tu cuerpo.. Sano de una forma anormalmente rápida -Rías me observaría con frustración, mientras intentaba adivinar que clase de ser era.

Al escuchar estas palabras quedaría sorprendido, era algo que no esperaba oír...

-¿he? Pues... Soy humano, creo...- Comenzaría a pensar si no era un humano y era alguna clase de ser sobrenatural, después de todo. Mis recuerdos de esta vida me mostraron que era un huérfano y luego de escuchar sobre esta anormal regeneracion. Aunque ya lo sabia. Esta regeneración la aprovechaba en mis entrenamientos. Se podría decir que estoy construyendo este cuerpo desde cero.