XVI - final

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24 años


Taehyung cumplía veinticuatro años aquel día de final de año. Como cada año, su natividad era opacada de alguna forma con las festividades que se armaron y ese año no era la excepción. Su cumpleaños pasó inadvertido para la mayoría de las celebridades amigas de no ser por cierto mánager, grupo, fanáticas y amigos cercanos de la industria que lo recordaron, al igual que su familia quien envió un emotivo ramo con una carta que estuvo a primera hora en su departamento, junto a un bonito dibujo de Taemin con sus trazos bruscamente repartidos sobre el papel, que demarcaban una caligrafía tosca – señal de que copió como pudo lo que su madre escribió, añadiendo más a la ternura de Taehyung de imaginar a su hermanito esforzándose para hacerle llegar su cariño –. Yoongi lo despertó con un pequeño pastel y una cancioncita de cumpleaños entonada por él con timidez. Rieron y sopló las velas, abrazó a su novio por la cintura y lo lanzó a la cama junto a él dispuestos a ocupar la mañana con té y pastel.

El día siguiente, que era libre para Taehyung, fue ocupado por la organización de una reunión en casa de sus padres, esperando Taehyung que todos pasaran desapercibido su día especial, sobre todo por su hermanito menor que adoraba las celebraciones donde podía comer mas dulces de lo permitido. Contrario a su expectativa, su día se opacó por otro hecho.

- Hoseok no vendrá a cenar con nosotros – Dijo Seokjin en medio de la sala hacia su madre, con toda la familia alrededor incluyendo a Yoongi – Ayer se devolvió a Gwangju junto a su hijo. Dijo que cambió de opinión a último momento y decidió que le iba mejor allá, además que extrañaba mucho a BomSu y quería estar cerca de él.

- Que lastima, pensé que se volvería a la ciudad. Su madre debe estar triste por verlo irse de nuevo; esperemos que ella sí venga a cenar – Respondió la madre de los Kim, aunque al rato después vieron que la señora Jung nunca llegó a la cena.

La celebración pasó con normalidad; las doce sonaron con animo y la familia Kim celebraban con gran humor la llegada de un nuevo año junto a la champaña y los besos entre parejas rodeados de promesas y compromisos para el nuevo año, incluido Yoongi quien guardaba la nueva buena para él y Taehyung más adelante. Seokjin y Namjoon habían decidido que este año adoptarían un bebé – noticia feliz para los mayores Kim, que recibirían entonces a su primer nieto, recibiendo la noticia con lágrimas en sus ojos –. Kim Taemin, celoso por lo feliz que se veía su hyung por un nuevo bebé, repudió la noticia con una pataleta que fue calmada por la promesa de sus hermanos mayores de llevarle a Disneyland en Tokio el próximo año cuando llegara su sobrino. Al mencionarle que sería "tío", Taemin sintió sus ojos brillar. Finalmente podría obtener un titulo de hyung como sus mayores que tanto amaba.

A la una de la madrugada, Kim Taehyung recibió una carta de la mano de Kim Seokjin.

...

Yoongi, adormilado notó la ausencia de Taehyung en la cama a su lado; se levantó y puso sobre sus hombros un gran suéter acogedor para salir a la pequeña terraza de la habitación, donde encontró a un cabizbajo Taehyung recargado sobre la orilla con un enorme edredón sobre sus hombros, quemando algo en medio del frio.

- ¿Qué haces? – le abrazó por la fría espalda de sorpresa.

- ¿Puedes creer que llegó una carta de una fan loca a esta casa? Fue asqueroso de leer. Mejor no te menciono qué decía – Taehyung volteó y envolvió a Yoongi en el pesado edredón que llevaba encima. Yoongi aceptó y quedó envuelto junto al modelo apretándose sobre su pecho buscando mas calor, como un gatito, pensó Taehyung.

- ¿Quieres que busque quien fue para ponerle una orden de alejamiento? Sabes que para mi no seria nada complicado.

- Lo sé – besó su mejilla suavemente y envolvió más su cuerpo, acercando al mánager con el edredón y su abrazo – ¿Por qué sales descalzo? Te resfriarás.

- Mira quien lo dice, tú estabas aquí a esta hora – Taehyung repartió unos besos sobre su frente su frente y Yoongi escondió su cara en su cuello mientras el modelo sobaba suavemente su mejilla contra su cabello, para gracia de Yoongi quien rió ante su gesto tibio – Taehyung... he pensado en lo que hablamos en la playa – Taehyung acarició su cabello y soltó un ruido que indicaba que tenía toda su atención – Quiero dejar de ser tu mánager... quiero ir a la universidad.

- ¿De verdad, cariño? – Yoongi, no sorprendido de su reacción, sonrió y le miró a los ojos.

- No obtuve un mal puntaje en las pruebas, puedo postular, aunque dudo obtener una beca.

- No tienes que preocuparte de eso. Tengo todo el dinero que necesitas para hacerlo.

- No quiero usar tu dinero.

- Nuestro dinero.

- No es nuestro hasta que nos casemos. Puedo pagármelo por mi mismo.

- Lo sé – sonrió Taehyung – Y qué bueno que lo mencionas – Yoongi, entrecerró los ojos a su novio, no entendiendo la insinuación de su novio – En realidad quería hacerlo en la cena, pero el desgraciado de Seokjin y su noticia no me dejó. No quería opacar su momento ni dar un ataque a mis padres con tanta felicidad – Yoongi, con su corazón latiendo tan rápido como pocas veces en su vida, sintió alejarse la mano de Taehyung de su cintura y acercarse a su bolsillo del pijama, sacando frente a su rostro una cajita de terciopelo rojo; sintió que el frio de hace un momento incluso bajo el edredón eran cosa extinta, ni siquiera sus pies congelándose eran tan sensitivos como su emoción subiéndole a los ojos – Sé que no somos los más románticos del mundo y que no te van las declaraciones cursis. Te incomodan, pero... creo que proponértelo en el frio y bajo un cielo tan bonito ya es suficientemente cursi.

- Taehyung...

- Te amo – le interrumpió – Te amo desde hace mucho tiempo y ahora que dejarás de ser mi mánager tengo que buscar una forma de amarrarte a mi – Yoongi rió ante la broma mientras sentía las saladas lágrimas de sus mejillas escapar hacia el frio. Taehyung no dejaba de mirarle tan sonriente como siempre, tan atractivo, etéreo, tierno y maravilloso, con su cabello desordenado y sus anchos hombros bajo una pesada manta y ese aire juguetón y enamorado que le agita la mente. Yoongi no podía creer lo correcto de la ocasión, como si toda su vida reuniera la belleza del mundo solo para este momento. Para su momento – No pienso pasar la vida sin ti – Abrió la cajita mostrando un anillo dorado con una pequeña piedra sobresaliendo y brillando con la luna – Cásate conmigo.

- ¡Oh por Dios, Taehyung! ¡Claro que quiero! – Yoongi siendo adolescente era frio; Taehyung pensó que era la primera vez pese a conocerse tanto, que le veía llorando y saltando de felicidad, abrazando su cuello entre sus brazos y ya qué importaba que el edredón se hubiese caído y ambos fueran presa del frio invierno nocturno. Bailaron sobre el aire con Taehyung como conductor sobre su pequeña cintura, besándose tan infantilmente y riendo, como si volvieran a ser niños – ¡Te amo, te amo, te amo, te amo, Kim Taehyung!

Sobre un ventanal continuo, los señores Kim se abrazaban de los hombros viendo el momento tan feliz que tuvieron la fortuna de ver; Yoongi, tan sonriente como nunca lo habían visto desde que lo conocieron, saltando para llegar a los labios de su hijo y los besaba felizmente. Namjoon dormía abrazando a Seokjin que, aunque no miró, escuchó la feliz noticia y la recibió dando una bendición al cielo silenciosa. Taemin dormía. Hoseok aterrizaba en Gwangju y todo volvía a ser como siempre debió ser.

Todo estará bien, fue lo último que pensó Jung Hoseok cuando pisó Gwangju. 

Hyung [Taegi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora