capitulo 5 : Deseo y rebeldía.

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Los tres días de separación habían sido insoportables para Illumi, pero su padre llegaba en 3 días más y se irían de aquel triste y olvidado pueblo para siempre.
Nunca más volvería a ver ni a saber de su enigmático amigo pelirrojo, quien le despertaba tanta curiosidad por sus misterios inaccesibles, ocultas risas con sus travesuras, y un deseo mártir de adolescente que jamás había hecho el amor, pero lo deseaba intensamente.
Creía que todos esos sentimientos eran correspondidos, sin embargo, ver a Hisoka con su pandilla de amigos, en su propio mundo oscuro, clandestino, y con tal descarada coquetería y desplante, supo que era pequeño e innecesario en su vida. Una compañía útil mientras más silenciosa, al igual que su hogar, cuando su madre le hablaba estrepitosamente sin esperar ni desear una respuesta suya, o sus hermanitos, al colgarse de él como se colgaban de los columpios del jardín, sin considerar si dolían los rasguños al subir o bajar, o su hermano Milluki, a quien todos creían cercano pero cuyo vínculo con Illumi lo mantenía el temor. Y finalmente, su padre, quien pocas veces había tenido más contacto físico con él más que el de entregarle algo en sus manos.
Para el muchacho vestido bufonescamente la noche que intentó besarlo, no era más que el chico que llamaba su atención, y pronto sería una historia más que contaría al siguiente, como le hablaba a él de sus aventuras sexuales con chicas y chicos al subir esas tan conocidas colinas en bicicleta, cada viernes, huyendo de clases.

Sin escribir una palabra en clases, es interrumpido de pronto por una voz, que en el fondo, esperaba con ansiedad.

-Hasta cuando me ignorarás? ♣️
-No te ignoro, simplemente no me interesa hablar contigo -Mintió.
-Lo que viste ayer fue demasiado para un niño rico? Demasiada decadencia para ti?♦️
-No realmente, he visto cosas más interesantes y sorprendentes.
-Claro, eres un niño rico al que papi lleva de viaje y compra linda ropa. Por eso le pagas con tu vida a papi y mami, no? ♣️

Illumi no pudo ignorar el malicioso comentario de Hisoka. Pero decidió que era mejor salir de ahí, pues su provocación estaba motivada sólo por el enorme aburrimiento de los 3 días anteriores, pensó. Se levantó de su lugar y se dispuso a cambiarse de banco, sin embargo, Hisoka movió su silla con tal fuerza que no pudo moverse. El salón quedó en silencio, la maestra intentó calmar la situación, pero Hisoka continuó:

-Dónde vas? Acaso ya comienza tu turno de niñera? O es hora de ir a fracasar en modelaje por esa extraña cara que tienes... ? ♣️

-Déjame en paz, raro de mierda.

-Sí, soy un raro de mierda, pero me siento bien conmigo mismo. Puedes decir eso de ti? No? Claro que no... Eres tan vulnerable... Que podrías gritarle tu vida a cualquiera que te invite una cerveza aunque tus propios padres, por los que vives, te lo prohíban ♦️...

El pelirrojo iba a continuar sus ofensas, pero lo calló el puñetazo más fuerte que había recibido hasta ese día.

Illumi tenía una fuerza devastadora por su rabia, e impredecible debido al delgado cuerpo que la portaba.

Un círculo de estudiantes los rodeó. Hisoka no había logrado más que su cometido: sentir la fuerza de Illumi sobre él. Una sonrisa curvó sus labios felinos, y contratacó tomando las greñas a medio crecer del moreno, y llevando su suave cara de porcelana con una fuerza impresionante a su rodilla. Las gafas de montura verde de Illumi quedaron destrozadas, y su nariz estalló en sangre.

Illumi se levantó, y tomó las greñas despeinadas del pelirrojo, lo botó al piso, y pisó fuertemente sus costillas, tanto, que crujieron como si alguna se hubiese fracturado. En seguida, una carcajada de Hisoka, que logró que Illumi llegara al piso con él y lo asotó contra el suelo, agarrado de la camisa, tantas veces que Illumi logró calmar sus gruñidos. Ambos se quedaron el el suelo, sangrantes, heridos. Sus miradas se cruzaron, y la respiración agitada de uno fue inhalada por el otro. Hisoka sonrió y alcanzó a decirle a Illumi: "Fue la mejor pelea de toda mi vida" antes de que fueran tomados por guardias escolares y separados.

Amantes (Una novelita Hisollumi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora