Somebody Else | Justin Bieber y Tú

Capítulo 16

°| _____'s Point Of View |°

—¿De qué hablas? — Contesta Justin. Acabo de confesarle lo que tanto juré que no haría.

Hace cinco meses, luego de que tuviéramos ese último encuentro en el Jet y él me dejara en __[tu país]__, lo primero que hice fue ir a una farmacia para comprar un píldora de emergencia. Al parecer no siempre son efectivas.

Cualquier cosa que hiciera era demasiado egoísta, y todo iba a terminar por lastimar a Justin o a Hailey.

Ya me había equivocado mucho con respecto a ellos dos, así que decidí afrontarlo yo sola.

Cuando el resultado de la prueba de embarazo dio positivo, lo primero que supe es que si de verdad quería hacerlo sola, tenía que irme lejos. Era lo mejor para todos; si Justin no se enteraba, no iba a hacerle daño.

Compré un departamento usando el nombre de mi hermano en Suiza y he tratado de pasar desapercibida en este nuevo país. Al parecer lo he logrado, porque nadie se ha percatado de mi presencia por acá.

Tenía un buen plan, una vez más: Trataría de pasar mi vida sintiéndome tranquila porque hice lo correcto; Justin estaba casado con Hailey y eso eventualmente comenzaría a hacerlo feliz. Nunca creí convertirme en madre soltera pero sonaba como el mejor plan de retiro, gracias a Dios podía permitirme vivir varios años en el anonimato y dedicárselos por completo a mi bebé, sin preocuparme por carencia alguna, lo demás lo resolvería sobre la marcha.

Pero al parecer ya es momento de aprender que la vida jamás va a dejar que mis planes funcionen.

Esta mañana desperté sintiéndome extraña... incompleta de alguna forma.

Hace unas horas, estaba horneando unas galletas de canela cuando comencé a sentir fuertes dolores en la parte baja de mi vientre. Sabía que algo andaba mal.

He rezado más en las últimas horas, de lo que he rezado en toda mi vida.

Mike me trajo al hospital a penas lo llamé para contarle lo que pasaba.

Llevo más de dos horas recostada en una camilla sin que nadie me diga nada. Los doctores sólo entran y salen de aquí.

Me han medicado para que no sienta dolor, pero yo sé que todo está yendo mal, otra vez...

—E-estaba embarazada —trato de calmar las inmensas ganas que tengo de echarme a llorar-, sé que vas a odiarme... sé que lo merezco por no decirte nada —sollozo y Mike aprieta mi mano tratando de reconfortarme—, pero necesitaba que lo supieras —sorbo mi nariz—. Estoy en un maldito hospital pero nadie me dice nada, Justin, yo sé que nada va bien...

—¿Entonces hay alguna posibilidad de que el bebé esté bien?  Es lo único que pregunta. Yo esperaba que me gritara o dijera algo feo por ocultarle esto—, ¿tú estás bien?

—Ya no sé si hay bebé —mascullo.

—Voy para allá —la decisión en su voz está clara.

—No estoy en Los Ángeles, yo...

—Huiste a Suiza, lo sé —escucho como si ahora fuera corriendo—. Voy a pedir el Jet, puede que los permisos tarden un rato y el vuelo un par de horas, pero te prometo que voy a estar contigo lo más pronto que me sea posible. ¿Hay alguien contigo?

—Mike está aquí.

—¿Puedes ponerlo al teléfono?

—Sí... —susurro un poco confundida y le paso el celular a Mike, haciéndole una seña con la cabeza para que tome la llamada.

No sé qué le dice, porque en ese momento la puerta se abre cuando veo entrar mi obstetra y dos enfermeras con otra camilla.

—Lo he perdido, ¿verdad? — Vuelvo a preguntar, con miedo de escuchar la respuesta.

—Vamos a prepararte para un cerclaje cervical de emergencia —el doctor se acerca a mí, tratando de explicarme—. Los estudios nos arrojaron que tienes incompetencia ístmico cervical, sé que suena como algo aterrador, pero creo que aún estamos a tiempo, _____ —me regala una pequeña sonrisa—. Te prometo que haré lo que esté en mis manos para mantener con vida a tu bebé junto a ti.

Una oleada de alivio cae sobre mí y por algunos segundos me permito sonreír con pesadez.

—Las enfermeras van a prepararte para el procedimiento, mientras tanto me quedaré con tu hermano para explicarle y que firme la autorización, ¿vale?

Yo asiento, algo anonadada.

Luego todo pasa demasiado rápido: olor a hospital, mascarillas, intravenosa, anestesia, el techo luminoso de un quirófano, oscuridad.