Inesperado 🥰

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Shinki no podía creerlo aún, miraba a Boruto asombradísimo en busca de alguna respuesta sin conseguirlo. Era identico a Naruto.

-¿Seguro que no eres su hijo?
- No tengo idea quién es mi padre, mi madre nunca dijo nada al respecto.

- ¿Quién es tu madre?
- Hinata Hyuuga, murió cuando nací.
-¿Eres pariente de Neji Hyuuga?
- Si, es mi tío. Él me crió. Es tu representante.

Shinki conversaba con su nuevo secretario sintiendose fascinado, pero su tristeza seguía arraigada en su alma. No quería seguir encerrado así.

Boruto tenía la increíble personalidad de Naruto, lograba hacerlo reír levantandole el ánimo en más de un sentido. Pero extrañaba a su amado Naruto.

Boruto empezaba a conocer al verdadero Shinki, aquel que lloraba todo el tiempo y era sometido por su padre Gaara.

Tenía una agenda ajustada Shinki, el rubio se ocupaba de recordarle todo. Habían llegado al estudio donde empezaría la sección de fotos.

Boruto admiraba cada vez más a Shinki, ya que podía ver su gran profesionalismo. No mostraba su intenso dolor en su trabajo y se ocupaba que todo esté bien.

Pero cada vez que quería usar su celular, Boruto se lo impedía ya que seguía las órdenes de Gaara. Sin embargo se las ingeniaba en hacerlo sentir bien.

Esa tarde acabada la sección de fotos, Boruto le llevó una botellita de agua. Le hablaba de todo un poco mientras se disponían a salir.

- Boruto, dejame ir a...
- No Shinki, olvidalo
- No puedo, no lo haré nunca.

- Regresemos a casa Shinki.
- Maldita sea, es mi vida.
- ¿Por qué insistes en verlo?
- Porque lo amo maldita sea.

Boruto empezaba a molestarse con Naruto, ya que lo culpaba por el intenso dolor que Shinki sentía. Llegaron a casa y Shinki sin mirar a nadie ni decir nada, se encerró en su habitación.

Boruto fue a ver a Gaara quien se encontraba en su oficina. El rubio entró sin llamar siquiera, sorprendiendo al pelirrojo quien lo miró entre fascinado y asombrado.

- Shinki está en su habitación tal como quieres Gaara
- Bien, ve a hacerle compañía....

Pero no pudo seguir debido a que el rubio lo besó repentinamente con intenso deseo. Gaara lo apartó.
-¿Qué haces Boruto?
- Besarte

Volvió a besarlo y en ésta ocasión Gaara lo abrazó presionandolo contra su cuerpo y su miembro que empezaba a endurecerse. Boruto se perdió en esos brazos protectores sintiendose enloquecer de pasión.

- Gaara te deseo - dijo el rubio al separarse para reapirar - Mirame a mí, solo....a mí....
- Muchacho ¿qué voy a hacer contigo?

- Amarme
- Pero podrías ser mi hijo.
- Para el amor no hay edad Gaara.
- Boruto....yo....

El rubio volvió a besarlo interrumpiéndolo otra vez. Boruto se había enamorado de Gaara desde que lo vio hacía un año atrás. Pero recién ahora tomó valor para besarlo.

Gaara acariciaba aquel sensual cuerpo con placer intenso, sin lograr dar crédito a su suerte. Quizás su futuro no sea tan incierto ahora que esa belleza rubia lo amaba.

- Te amo Gaara - Boruto se negaba a soltar a ese pelirrojo de sus sueños.
- Me alagas Boruto.
- Haré que me ames, ya lo verás.

Fuera estaba Shinki observandolos, su frustración iba en aumento.

Respiraba entrecortado ¿cómo su padre podía tener a quien lo amaba en sus brazos mientras que él tenía que permanecer encerrado, lejos de su amado?

Se alejó regresando a su habitación con gran frustración. Llevaba todo el tiempo el listón naranja en su muñeca derecha.

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