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Kian esta parado frente a mí, lleva puesto una camisa bordo y unos jean negros, junto con unas vans negras. Hace dos días que no hablamos, no desde la noche en que se apareció en mi edificio y yo estaba con Ryan

-¡Hey! No te había visto

-Acabo de entrar

Con razón...

-Estas muy guapo- Él sonríe ante mi cumplido

-¿Quieres ir afuera?- Asiento y juntos salimos al patio trasero, hay un gran silencio entre ambos

-¡Que cansada estoy!- Digo para romper el hielo

-Entonces- Comienza a decir-No he sabido nada de ti en dos días

-Sí, lo siento yo- Hago una pausa-Estuve ocupada

-¡Vamos Zoe! No tiene que mentirme, no a mí

-No lo hago- Nuevamente el silencio mientras caminamos-¿Cómo has estado?

-Algo estresado, estamos trabajando en un nuevo caso

-¡Genial! ¿Sobre qué?

-Bueno, no es tan genial, últimamente hay desapariciones y algunas muertes extrañas. Las víctimas son mordidas en el cuello por alguna especie de animal, tal vez un lobo

¿Qué?

-¡Eso es terrible!

-Lo es, pero...ya no hablemos de ello ¿Tú cómo estás?

-Pues bien, bastante ocupada con el trabajo

-¿Y tú relación?- Ya sé exactamente a dónde va esto

-Sólo di lo que tengas que decir y no andes con rodeos- Digo para frenar justo enfrente de la fuente de agua

-Nada, es sólo que...me parece ilógico que quieras regresar con él, eso es todo

-Pues...supongo que todos merecen una segunda oportunidad- Levanto los hombros

-¿Segunda oportunidad? ¿Siquiera escuchas lo que dices?- Frunzo el ceño- Tú no das segundas oportunidades

-Kian, las personas cambian y creo que él merece una segunda oportunidad- Ya perdí la cuenta de cuantas veces hay éste enorme silencio entre ambos-¿Qué?

-Nada ¿Te parece si dejamos esta conversación aquí?- Comienza a alejarse a paso rápido

-¡No es bueno guardarte tus sentimientos!- Se detiene en seco y se gira para mirarme

-¡Simplemente no me gusta que te hagan sufrir, odiaría verte pasar por lo mismo, él me genera mucha desconfianza, hay algo en el que no cuadra para nada y lo que quieres hacer me parece de alguien estúpido que sientas que se merece una segunda oportunidad cuando no debería haber hecho lo que hizo desde un principio!- Grita mientras se acerca a mí, me quedo en completo silencio intentando asimilar lo que acaba de decir

-¡Debes entender que no necesito que me cuides, puedo hacerlo yo misma y créeme que no volveré a pasar lo mismo dos veces!- Grito con lágrimas en los ojos

-Entonces espero que no vuelvas a mí llorando, esperando que te ayude- Dice ahora más calmado, nuevamente me quedo en silencio y él solo me observa

-¡Eres un completo imbécil!- Espeto molesta y me alejo de él, entro nuevamente a la casa y la música invade mis oídos pero algo llama mi atención, hay una pelea en el medio de la pista, algunos gritan que se separen y otros intentan detener a los que están dentro de ella. Me acerco lo más que puedo y abro mis ojos como platos al ver quienes son

Déjame entrar en tu vida Donde viven las historias. Descúbrelo ahora