Eva y sus 7 maridos (Completa [+18])

3.1 La Señorita Y El Futuro Alfa [+18]

Rosa Canela, era el nombre de una escultural mujer, esposa de uno de los más acaudalados terratenientes del pueblo "Santa María". Su cabello era rojo como la sangre y sus ojos celestes, como el ancho mar que robaban más de un suspiro. Aunque su elegancia y belleza desbordaba un gran esplendor, su corazón se encontraba sumido por una profunda pena, ya que por más de 4 años de matrimonio trató de quedar en cinta constantemente y nunca lo logró.

SOLEDAD

En la casa de mi familia, mis ojos inseparables de la ventana, perseguían al desconocido enmascarado que esperaba bajo la lluvia...Al reaccionar en aquel gélido hospital me aquejaba un fuerte dolor de cabeza en el lado en el que más resulté golpeada.

Nuestra ama de llaves y mi amiga más cercana, Danaia, estaba sentada a mi lado.

—¿Qué estamos haciendo aquí?

—El heredero de los Viloria le notificó a los patrones de su accidente.

—Déjalo pasar, por favor.

—Lo siento, señorita, pero Doña Rosa, lo expulsó del hospital.

Desde aquel momento, mi madre, sin explicación alguna, me había prohibido tratar con algún integrante de la familia Viloria.

—Lo único que me faltaba, Soledad. Maldita sea, ¿un Viloria?

—Madre, él me salvó.

—No te quiero ver cerca del Gustave ese. Yo soy tu madre, nunca te mentiría.

—¡Pero mama!

—No me interesa. . . Al contrario de los perros, los lobos no son fieles —fue lo único que dijo al finalizar. En ese momento no podía entender a lo que se refería.

ROSA

Aún recuerdo ese horrible día en el que le implore a mi esposo: Anhelo ser madre, por favor. Las demás mujeres se burlan de mí llamándome belleza inservible y sus maridos murmuran cosas de nuestra familia. Te pido por nuestra honra que te juntes con mi gemela "Esmeralda", quizás ella me dé la dicha antes de acabar de enloquecer, de darme la criatura que tanto anhelo. Esa noche mi esposo durmió en el lecho de mi hermana, desgarrándose mi corazón.

A los pocos meses cuando confirmamos su embarazo la confinamos mientras yo fingía mi supuesto embarazo, pero cuando le quedaban pocos meses para dar a luz, la misma desapareció.

ADAM

Flash back

—Padre, por favor acuerde por las buenas o por las malas con mis tíos —le pedí —no dude en nada antes de mi regreso por la mano de Soledad en matrimonio.

Fin del flash back

—Sobre nuestro pequeño convenio no puedo hacerlo Teresa —le dije indiferente a la morena.