Cuidando a Shijie

Resolución

Jin Zixuan no sabía qué mirada le intimidaba más, la mirada penetrante de Jiang Cheng, o la imponente mirada de Nie Mingjue, escudriñando desde lo alto de su impresionante altura, a pesar de estar de pie en la base de los escalones que elevaban el trono del líder. Dió un sonoro y tembloroso suspiro y se puso de pie.

— En vista de la situación, no queda más remedio que deponer a mi padre. Desde este momento, ya no es más el líder de la Secta Jin. Pasará sus días en reclusión y no se le permitirá salir sin una escolta.

— Hijo malagradecido, estuvimos a punto de gobernar el mundo de la cultivación.

— Guarda silencio si sabes lo que te conviene. -ordenó Madam Jin. — Tu hijo está tratando de arreglar un poco el desastre que tú y tu sobrino inútil causaron.

— ¡Tía! -intentó rezongar Zixun ante el insulto, recibiendo un manotazo en la cabeza de parte de la mujer.

Las miradas se dirigieron al líder Jiang y al líder Nie alternadamente, esperando sus reacciones. Nie Mingjue se cruzó de brazos, miró a Jin Zixuan con una sonrisa de satisfacción, y asintió en aprobación. No era un secreto que, después de Wen Ruohan, Jin Guangshan era la persona que Nie Mingjue menos soportaba. Jiang Cheng, por su parte, no parecía estar satisfecho.

— Líder Jiang, entiendo que tal vez la decisión no le parezca, pero por ahora es lo más que se puede hacer. -finalmente Jin Guangyao intervino.

Jiang Cheng dió otro sonoro suspiro, miró al niño en sus brazos, y su pequeña carita suavizó un poco el ardiente rencor del Líder. Respondió a la sonrisa que A-Yuan le dedicaba, y asintió hacia Jin Zixuan. — Solo tengo una petición más que hacer.

— ¡A-Yuan!

— ¡Baba!

Los presentes miraron contrariados como Wei Wuxian saltaba de la espada de Lan Wangji y corría hacia el pequeño que tenía una enorme sonrisa, atrapando al niño entre sus brazos y arrancándolo de los brazos de Jiang Cheng. Fue extraño ver por primera vez lágrimas correr por las mejillas del temido Patriarca de Yiling, pero aún más extraño era ver la ternura con la que Jiang Cheng observaba al par.

— ¿Cual era su petición, Lider Jiang? -llamó Guangyao regresando al líder a la realidad.

Luego de pensar unos segundos, Jiang Cheng se acercó a Wei Ying y rodeo el cuerpo de este con su brazo atrayéndolo a sí mismo. Mientras Wei Ying se sonrojaba hasta el límite, A-Yuan felizmente se acomodo en medio de ambos.

— En realidad no es una petición sino un anuncio, voy a tomar a Wei Wuxian como esposo, y desde ahora, tanto él como A-Yuan tendrán el apellido Jiang. Y él no será más el Patriarca de Yiling.

— Bien, -comenzó Jin Zixuan poniendo las manos en su espalda. — debido a que los testimonios contra Wei Wuxian fueron hechos por personas que trabajaban para mi padre, y estando claro cual ha sido la intención de todos esos ataques, todas las acusaciones en su contra serán desechadas. El asunto del paso Qiongqi será revisado por el clan Nie para que sea completamente imparcial. Guardias, lleven al antiguo líder Jin a sus nuevos aposentos, y asegúrense que esté bien vigilado, y mi primo también.

Wei Ying no entendía lo que estaba pasando, pero por lo que había dicho Jin Zixuan, ya no era un fugitivo y no tenía que seguir ocultándose ni mirando detrás de su espalda para evitar que fueran a atacarlo. Miro a Jiang Cheng entre emocionado, conmovido, y ligeramente confundido, y este depositó un largo beso en su frente antes de hacer lo mismo con A-Yuan.

— Lider Jiang, una pregunta, ¿cómo se encuentra A-Li?

Si Wei Ying tuvo alguna molestia al oír a Jin Zixuan preguntar por su hermana, simplemente no lo demostró. Tampoco es que tuviera mucho tiempo para hacerlo, Nie Huaisang lo tomó del brazo y jaló de él hasta que estuvieron un poco apartados de la gente.

— Wei-xiong, estoy muy ofendido contigo, sabes lo que me gustan los chismes y lo más importante no me lo contaste, ¿cuándo empezaron a salir tu y Jiang-Xiong? Dime, dame todos los detalles.

— Baba y die die duermen juntos todas las noches. -intervino A-Yuan con una enorme sonrisa haciendo que Wei Ying se sonrojara aún más.

Nie Huaisang reprimió un chillido agudo antes de comenzar a golpear el brazo de Wei Ying con su abanico suave pero repetidamente. — Iré a Yunmeng en un par de días, así que ten listo el té porque tenemos mucho que hablar. Y no olvides decirle a la señorita Jiang que prepare esos pasteles de osmanthus que le quedan deliciosos. -Ante la mención del nombre, Wei Ying inmediatamente recordó la razón por la que había venido en primer lugar. Le entregó a Nie Huaisang un confundido A-Yuan y se alejó.

Aprovechando que la conmoción ya había terminado, se acercó y apartó a Jiang Cheng a un lado; — Shijie volvió a la normalidad.

— ¿De verdad? Maravilloso. -Aunque el líder tenía una sonrisa en el rostro, esta no parecía llegar a sus ojos.

— ¿Pasa algo? No te ves muy emocionado.

— Es solo que... esperaba...

— ¿Cuidarla más tiempo? -preguntó comprensivamente Wei Ying con su mano en la mejilla de Jiang Cheng. El otro asintió tomando la mano ajena y sin ningún atisbo de vergüenza, depositó un suave beso en la palma. — Yo también disfruté este tiempo cuidando a Shijie, pero aún no termina nuestro trabajo, todavía hay un pavo real que quiere llevársela. Debemos protegerla.

— Cierto, respecto a eso.

Suavemente, Jiang Cheng se alejó de Wei Ying y se acercó a Madam Jin atrayendo su atención. — Madam Jin, disculpe mi actitud agresiva de hace rato, también quiero disculparme por la falta de respuesta de mi hermana, ha estado enferma, pero me acaban de notificar que su salud ha mejorado, pronto recibirá noticias de ella.

— No tiene que disculparse, Líder Jiang, al contrario, me apena que mi esposo le haya causado tantos problemas. Esperaré las noticias de A-Li con ansias.

Ambos hicieron una reverencia y se alejaron en direcciones opuestas. Cuando regresó, Huaisang se había acercado a Wei Ying para devolverle a un somnoliento A-Yuan que luchaba por mantenerse despierto en los brazos de su baba, la pareja se despidió y los tres montaron a Sandu de regreso a Muelle de Loto como la futura familia Jiang.

~º~º~º~º~º~º~º~º~º~

Finalmente pude actualizar este, por favor no saquen las antorchas, fue culpa de la vida adulta que no me suelta, aunque tristemente ya estamos en los capítulos finales.
Solo quedan uno o dos, más algún extra que ponga por ahí.
Quiero agradecer a todos los que se han dado el tiempo de leer este fanfic y le han dado una oportunidad.
Nos leemos en el siguiente capítulo, bye~