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-Dios.- Gruñí contra la piel de su cuello mientras acaba en ella oyéndola jadear contra mi oído.

Deje mi escondite y busque sus labios en un beso necesitado cargado de los rastros del deseo y locura. Sus ojos se encontraron con los míos en cuanto nuestras bocas se separaron y vi un destello que me fue imposible interpretar en sus ojos. Me alejé de ella y tiré el condón usado en la papelera del cuarto de baño antes de subir mis bóxers y jeans a la vez. En cuanto me di la vuelta la morena estaba mirándose al espejo acomodando su ropa y cabello, la observé a través del reflejo intentando hacer algo de contacto visual pero ella me evadió.

Llevábamos semana haciendo lo mismo. Teníamos sexo desenfrenado por toda la casa y hasta en los asientos traseros de la camioneta, pero luego de eso actuábamos tan naturalmente como antes de que nos enrolláramos.

-Estabas aquí.- La escuche hablar y me gire para verla desde el sitial en el que me encontraba sentada bajo el porche.

-¿Cerveza?.- Pregunté tendiéndole mi botella y ella la aceptó de inmediato dándole un trago antes de sentarse junto a mí- Así que.......¿Estabas buscándome?

-Sí.- Dijo mirando al frente- Sé que no nos hablamos después de follar pero estaba aburrida.

-Con que aburrida. Eso es nuevo Lena Luthor.

-Kieran.- Murmuró antes de beber otro trago.

-¿Kieran?.- Pregunté sin entender.

-Mi nombre es Lena Kieran Luthor, pero no suelo usarlo. No es de mi agrado, así que seguiré siendo Lena Luthor.- Me advirtió.

-Como tú quieras kieran.- Comenté con una sonrisa cargada de burla en los labios recibiendo un golpe en el hombro poco después- ¿Quieres hacer algo adrenalínico?

-Mientras no sea matar o huir o algo relacionado.- Hizo una mueca y reí ante su expresión- Por mi está bien.

-Entonces andando.

La brisa me golpeaba el rostro mientras conducía la motocicleta por la carretera con Lena aferrada a mí cintura. Sonreí levemente cuando noté que sus puños se cerraban alrededor de mi chaqueta de cuero. Las luces de los autos se hicieron presentes al igual que un par de edificios, los gritos y la música en aquella calle desierta, todos bebiendo y apostando su dinero al mejor corredor.

-¿Carreras clandestinas?.- Escuché la voz de Lena cerca de mi oído erizando la piel de mi lóbulo.

-Así es.- Respondí aparcando la motocicleta y ayudándola a descender de esta- Voy a correr y te darás cuenta de que soy la mejor.

-Eso ya lo veremos.- Una sonrisa lasciva apareció en sus labios y yo la guié hasta Kyle.

-Otra vez por aquí Zor-El, y muy bien acompañada al parecer.- Su mirada recorrió la anatomía de Lena de pies a cabeza y me asegure de fulminarlo con la mirada- Doble o nada amiga.

-Esta bien sólo no fastidies a la chica y tampoco dejes que otro lo haga ¿Quedo claro?.- El chico asintió de inmediato y yo me gire para ver a la morena- No quiero que te muevas de aquí regresare antes de que te des cuenta de que me marchado.- Bromeé y ella asintió, así que dejando un rápido beso en sus labios por impulso me dispuse a ir hasta la línea de partida.

...

El pañuelo rojo de aquella chica onduló al viento en cuanto ella lo alzó para dar la partida a los corredores, mi vista se enfocó en Kara quien mantenía sus ojos clavados al frente con determinación. Los neumáticos de cada una de las motos derraparon sobre el asfalto mientras el motor chirriaba ante la fuerza que los pilotos ejercían sobre el acelerador. Observe a la ojiazul salir disparada y mi corazón se aceleró cuando los vi alejarse tomando una distancia considerada de todo los espectadores. Sólo unos segundos transcurrieron antes de que se oyese los rugidos de regreso y pude ver a Kara retornando junto a otro corredor que la seguía muy de cerca.

MafiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora