Steve Harrington x male oc!
Billy Hargrove x male oc!
Steve está confundido respecto a los sentimientos que está teniendo hacia su compañero de clase, Matthew Anderson.
Lleva demasiado tiempo intentando salir con chicas y ninguna de estas le convenc...
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Un día más en la tan odiada escuela de Matt. Las ganas de ir al instituto se habían ido por completo desde el momento en que él y Steve dejaron de ser amigos.
Con Billy no se juntaba mucho en la escuela desde que ellos empezaron a salir. Según este era porque quería guardar las apariencias y que no creciera ningún rumor raro respecto a su relación.
A Matt solo le quedó aceptar y quedarse solo, a regañadientes, en el instituto.
Ya era el mes de marzo y la temporada de exámenes se acercaba lentamente, tanto que solo quería darlos e irse a dormir.
Se bajó del autobús, sosteniendo su mochila con un solo hombro, y se dirigió a la entrada con una cara de seriedad y de no acercarte a él porque te golpeará, aunque eso le gustaría creer a él, solo tiene una cara de culo como siempre.
Siguió caminando a pesar de que alguien paso corriendo a su lado en dirección contraria, empujándolo y casi haciendo que los dos se cayeran.
––D-disculpa —exclamo la persona a su lado con nerviosismo.
—No te preocupes —dijo él ignorando totalmente a la persona e ingresando al establecimiento.
—O-oye, en-en serio lo digo —el chico le siguió a un lado mordiendo sus uñas y mirando con terror a Matt —. Si quieres t-te doy mi d-dinero~
—¿Qué? —Matt con el ceño fruncido se giro a mirar al pequeño chico a su lado, agravando su expresión de culo.
—¡P-por favor no me golpees! ¡No fue mi intención chocar contigo! —el chico tapo su rostro con ambas manos y espero a que el rubio le golpeara.
—¿De qué hablas, tarado? —Matt le siguió mirando con interrogación y el chico destapó sus ojos y miro al rubio observarlo con mala cara —. No te quitaré nada ni te golpearé.
Matt se alejo del chico sin prestar más atención, sin embargo el más bajo le siguió hasta el final del pasillo.
—¿Que quieres?
—b-bueno, soy nuevo —matt sintió un pequeño deja vú en cuanto le comento aquello el muchacho —. Fue por temas del trabajo de mis padres.
—No le interesan tus padres y tu vida —Matt saco de un bolsillo trasero un paquete de chicles de menta. Saco uno para el y le dió uno al otro.
—Gracias —dijo el menor observando con ilusión aquel pedazo de goma de mascar.
Matt se fue de allí, yendo a su primera clase en la mañana de aquel tedioso día lunes. Se sentó en su usual asiento al fondo y lado de la ventana, observando el paisaje en el exterior que se resumía en el estacionamiento lleno de autos.
Su tranquilidad no duraría mucho hasta que sintió movimiento a su lado, mirando para ver al muchacho de antes sentándose a su lado sin dudarlo.
