Capítulo 45.

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Antonio: 

Dos semanas después...

Estaba en mi oficina haciendo los últimos trabajos para ya mañana ir al evento junto con Anne y nuestra hija, estás dos semanas pasaron rápido, cada día que pasa vamos queriendo a esa pequeña, me sorprende lo inteligente que es y las ganas que tiene de aprender aún no comenzaba las clases, faltaba dos semanas más para que empezará su nueva vida junto a nosotros como la hija de los Moretti Morrison, Anne está orgullosa de la niña que tiene, le gusta leer y pintar al igual que ella, cómo ver a Anne en versión pequeña.

Esa pequeña niña se ha convertido en nuestra adoración junto con Anne, amamos mucho a ambas y ellas cada día nos muestra cuánto nos quieren, jamás pensé en verme como padre tan pronto, ya que con Luna solo actué cómo tío cuando Angelo la trajo hace años, pero con mi pequeña Lunita ahora puedo actuar como su padre y saber que le estoy dando ese amor que le habían negado.

Termine mi trabajo en la empresa, Angelo y yo fuimos directo a casa, al llegar escuchamos la risa de la pequeña Luna junto con la de Anne que venía de la cocina, encontramos a ambas ahí, Anne preparando la cena y Luna pintando en su block.

—Hola mis muñecas —dijo Angelo con una sonrisa.

—¡Papis! —Luna corrió hacia nosotros—llegaron, miren —nos enseño un dibujo— adivinen qué es

—Pero miren que hermoso ¿Gato? —pregunté viendo el garabato que hizo.

—No papi no es un gato —se cruzó de brazos, miró a Angelo—, papá dile tu que es.

Tomó el dibujo —Ahí se ve claro que es —frunció el ceño— ¿un elefante?

—Me rindo mamá —fue hasta donde Anne— no saben apreciar mi obra de arte, mami diles que es..

—Es un patito, es su animal favorito —siguió cocinando.

—Ya ven, no era tan difícil —se sentó en la isla de la cocina— ¿No van a saludar a mamá?

Reímos por las ocurrencias de nuestra niña, saludamos a Anne con un beso, me quite el saco y la ayude a terminar la cena, mientras que Angelo y Luna iban colocando la mesa, no perdemos la costumbre de comer en la mesa de la cocina, el comedor principal es demasiado grande para nosotros.

Después de una gran cena en familia, porque así me sentía y Angelo también, hace años no sonreía tan a gusto, nuestra mujer y nuestra niña nos están alegrando la vida, después de la cena Angelo ayudo a Anne a recoger la mesa y yo fui a cambiarme, después de hacerlo fui hasta la habitación de Luna, decidimos darle la habitación de invitados a ella, entre los tres la decoramos de patitos ya que ese es su animal favorito y algunas lunas en el techo, ella ama estar en su habitación, tiene lo que más le gusta, libros, colores, pinturas y algunos juguetes. Entre en la habitación y ahí estaba sentada en la cama esperando a alguno de los dos.

—Creí que no vendrías a darme las buenas noches papá —se acomodó en la cama.

—Sabes que si no vengo yo, lo hace papá Angelo —asintió—, a dormir patito que es tarde.

—Papá.. —jugaba con sus deditos— ¿Ustedes me van a querer siempre?

—Claro que si patito, siempre voy a quererte, eres una gran niña ¿Por qué lo preguntas? —acaricie su cabello rojizo.

—Porque el anterior no me quería —bajo la cabeza— y me asusta que ustedes se vayan.

—No temas por eso patito —bese su frente—, siempre vamos a cuidarte tanto mamá como papá Angelo, siempre vamos a querer lo mejor para ti, vamos a cuidarte de todo el mundo que quiera hacerte daño. Así que no pienses eso pequeña —ella sonrió y me abrazó— ve a dormir ¿Si? Mañana iremos a visitar a los tíos Lucy y Aaron y te quedarás con ellos.

Anne y el Amor. |+18| #1 de Trilogía Moretti. -Finalizada- ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora