Los deseos de un Stark

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Jon levantó una de sus manos y la observo como si fuera la primera vez que la miraba. No había piel o carne, solo una forma de mano de color azul y rojo. Levantó la otra mano, notando que era lo mismo. Y luego, se dio cuenta que se parecía a un fantasma. Podía sentir su cabello cuando lo tocaba, pero era solo una forma transparente de algún tipo de energía.

Estaba parado en la nada misma, una extensión de suelo blanco brillante y el horizonte de color negro. Jon entrecerró los ojos cuando pensó haber visto una silueta a lo lejos. Intento avanzar, y lo hizo. Dio un paso adelante con poca confianza. No sabía que había pasado. No podía abrir el sistema, y tampoco entendía que era el lugar donde se encontraba actualmente.

Entonces, dio un segundo paso. Fue ahí, en ese instante, que los colores vinieron a él. Su visión se volvió borrosa con todo tipo de colores mientras sentía que era empujado a gran velocidad hacía delante. Los colores, se convirtieron en líneas a su alrededor. Cuando su cabeza se movió hacía un lado, vio algo: un hombre un poco gordo con orejas cortas, pero un poco puntiagudas al final. Llevaba una corona de flores y enredaderas. Vio a un hombre, matanto a gigantes y niños del bosque, dejando un lago de sangre detrás de él.

Jon sintió un dolor de cabeza y miro hacía otro lado, pero otra visión inundo su cabeza y su mente. Fue un hombre de apariencia Stark gritando ordenes mientras humanos y gigantes trabajaban alzando tierra, nieve y hielo.

Entonces, vio batallas de todo tipo. Caballería cabalgando con lanzas. Caballeros usando sus espadas para cortar al enemigo y reyes gritando con todas sus fuerzas mientras chocaban entre ellos. Sus ojos vieron dragones y sus jinetes. Sus ojos se llenaron de explosiones, fuego, humo, cenizas y lava, mientras los gritos de terror llenaban sus oídos. Intento cerrar los ojos mientras tapaba sus oídos, pero aún así, siguió viendo cosas.

Batallas... nacimientos y muertes... venganza y justicia....

Fuego y sangre... hielo y muerte.... invierno.... frío invierno...

Jon sintió tanto dolor en su cabeza, que comenzó a gritar con todas sus fuerzas. Su cabeza se levantó mientras sus ojos se abrían de par en par y su garganta se volvía ardiente por sus gritos roncos.

De la nada, todo se detuvo. Las líneas de colores que lo habían rodeado como arco iris, se convirtieron en una habitación hermosamente decorada.

"¿Estas bien?", Jon escucho una voz mientras se tambaleaba, intentando mantenerse de pie. Sus ojos vieron a un hombre, un anciano acostado en una cama, tapado con un suave y ligero edredón. A un lado, Caelyb estaba sentado con una expresión molesta, pero sobre todo, triste. El cabello de Caelyb era dorado, pero su rostro no había cambiado demasiado a lo largo de los años. Las únicas diferencias, podrían ser sus actuales arrugas.

"¿Te preocupas por mi? ¡Eres más viejo que yo!", el anciano dijo con fuerza, antes de comenzar a toser. "Maldición. Odio ser viejo".

"Morir de vejez se puede considerar buena suerte, Brandon".

"¿Para quien? Mi polla ni siquiera se puede levantar, estúpido anciano demasiado brillante"

Caelyb sonrió, haciendo un ruido por su nariz al intentar contener su risa.

"Por cierto, cuando muera, entiérrame en tu jardín. Justo debajo de ese árbol de flores azules. Me recuerdan a las rosas azules de mi tierra natal".

"¿Pensé que no habían flores en tu tierra?"

"¿Por qué no habrían? Tch. Simplemente no las tome en cuenta, no cuando tenía demasiado trabajo sobre mis poderosos hombros".

"Eres un mal mentiroso. Te gustan, ¿verdad? Esas rosas azules... ".

La gran aventura: Sothoryos [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora