Speechless ~[By EstellarMi] -KookMin +18

Speechless 16

Aunque su semejante no lo hubiese notado; el pelinegro no podría pasar desapercibida la traslúcidad con que se marcan los pequeños y firmes pechos del rubio. Aún cuando en un principio todo se resolvía en una inocente conversación de simples amigos como han querido al menos tratarse.

Posterior a dejar la humedad de su saliva marcada en la tela de su camisa;
Jungkook esperaba un golpe, una bofetada o al menos una maldición.

Por el contrario a todo eso, sus brazos rodean la pequeña cintura del rubio estrechando sus cuerpos en un desesperado intento de besos sincronizados.

Aunque no es momento para reflexionar, Jungkook no sabe cómo pasaron de estar cada quien en su silla a encontrarse de pié
intentando caminar quien sabe a dónde.

Un quejido expulsa Jimin cuando su espalda frena contra la pared, las manos del alfa amortiguan el golpe sosteniendo su cabeza y espalda alta por debajo de su camisa.

No basta con sentir su lengua apoderarse de su boca, no basta sentir sus frías manos deslizarse por toda su espalda, delinear su cintura hasta colocarse como un sostén en sus pechos.

No basta haber perdido el aliento y tratar de recuperarlo mientras el alfa deja tirones en su cuello e intenta sacarle la camisa para besar con mayor facilidad sus pechos hinchados.

-De no ser por los chasquidos de su lengua, el silencio sería sepulcral-.

Jeon ayudó sacándo la camisa sobre la cabeza del rubio y después de lanzarle por algún lado retomar los besos que tan enviciado le tienen mientras palpa su piel y hace de su rodilla presionar entre las piernas.

Pero la sala no es el destino que ninguno tenga en mente, así que entre tambaleantes pasos como un par de idiotas caminan en dirección a la habitación del alfa, no sin antes hacer una nueva parada contra la puerta.

Soltar sus labios ha sido una tortura en el mínimo entretiempo de sacarse la camisa.

La sensación de encontrarse semidesnudos, pecho a pecho es algo que Jimin no podría describir en cuanto su cerebro abrumado no le permite pensar con claridad.

Siente como los dientes del pelinegro dejan mordiscos bajo su oreja haciendo de su columna un cosquilleo irremediable. Simples succiones que probablemente terminarían convertidas en marcas, cosa que de momento no importa mientras siga apretando sus pechos como lo está haciendo.

Abre sus labios al sentir la palma del pelinegro deslizarse con fuerza sobre sus pezones haciéndoles triturar entre sus dedos, un chasquido le saca de sus casillas cuando Jungkook tiró de su cuello entre sus labios para finalmente continuar el camino de su boca en la barbilla hasta por inercia comerse a besos una vez más.

Inconcientemente Jimin adora el sabor a tabaco en los labios contrarios.

Los brazos colgó en la nuca del tatuado mientras éste los guiaba al interior de la habitación metiendo sus manos bajo la pijama.

Si hay algo que Jimin está odiando, bien podría ser el hecho de que las paredes se burlen de él en silencio, tantas críticas de aquella habitación de la cual está siendo un participe más.

Mientras tanto atina disfrutar como el alfa desliza su pantalón pijama mientras toma sus glúteos con ambas manos.

—Mmm, ugh-

Odia esa cama, odia las sábanas, odia el hecho de estar deseoso de sentirse débil bajo el cuerpo del alfa sobre ella.

Detesta tener que presenciar como atrae la caja de condones de su maleta de viaje.

Por más estúpido que suene está cuestionando las razones que tiene el alfa para llevar consigo tal cosa.

Pero no hay nada que decir al respecto, ni mucho que reprochar cuando no hay motivos, tampoco podría acusarlo sobre ésto cuando el mismo no ha puesto un alto desde el principio.