Aku no ōji 「BTS x HOSEOK」

5. Esas maravillosas criaturas llamadas humanos

Escena 1-

Este bosque es muy pacífico.
Este bosque es muy aburrido.
Pero el árbol milenario me dice que eso es algo maravilloso.
En un siglo aprendí muchas cosas
Sobre la flor, la semilla, la piedra, el manantial, el viento, la tierra, pero hay mucho que aún no sé.
No sé sobre nada más allá de este bosque.
No entiendo nada de los humanos que viven en el mundo exterior.
Así que no sé por qué ellos están llorando.
No lo entiendo.
Quiero aprender más
Acerca de estas maravillosas criaturas llamadas "humanos".

Forest ~ En el país de Elefhteria~

Normalmente, las almas no podemos saborear nada del mundo natural, pero cuando nos transformamos en animales... es otra cosa. Nunca tenemos hambre, pero hay momentos en los que disfrutamos del dulce sabor de la fruta.
Las uvas son de color azul púrpura. Aparentemente, los humanos han usado varios métodos para convertir la fruta en bebidas alcohólicas.
Muchas almas deciden nunca convertirse en animales, por lo que hay muchas almas que nunca lo han probado, y es extremadamente frustrante que, sin importar lo que les diga sobre ellas, no puede transmitir completamente su encanto.
Ver para creer, como dicen. Me había alejado un poco más del bosque con la esperanza de obtener algunas uvas de la cosecha.
El bosque es enorme, pero hasta las almas podemos aburrirnos después de vivir allí durante siglos.
Había un pequeño pueblo donde la gente se ganaba la vida haciendo vino (así se dice que es el nombre de la bebida alcohólica hecha de uvas).
Cuando aterricé en una rama cerca de un campo, mi objetivo estaba justo frente a mí. Sin pensarlo, tragué por mi garganta esta increíble fruta. Me resulta un poco incómodo robar frutas que los humanos han cultivado, pero muy pocas están maduras, por lo que probablemente no les importe si tomo alguna.
Probé el primero. Rica dulzura y leve acidez llenan la boca. ¡Si, es delicioso! Es incluso mejor que antes, ¿es porque no lo he disfrutado en mucho tiempo, o es porque el conocimiento agrícola humano lo ha mejorado?
En forma de pájaro pequeño, no puede tomar uvas grandes. Escogí un grupo de mejor aspecto, de color más oscuro y agarré tanto como pude con mis garras. Deberían ser suficientes para mis amigos prueben algo.
Si les gusta, podemos ir todos a buscarlo la próxima vez.
Bueno, pero si tomo demasiado, puede ser dañino para los humanos.
Más que eso, quizás el problema sea cómo alejarlo del árbol milenario.
Una vez más vuelo en el cielo. Estaba un poco indeciso, me tambaleé por el aire y me di cuenta de que algo venía detrás de mí. Cuando me di la vuelta, había una enorme sombra negra.
-¿Eh? -
Claramente me está apuntando, siguiéndome a una velocidad extremadamente alta.
Al darme cuenta de que estaba en peligro, me moví para ir más rápido, pero esa velocidad no pudo igualar las grandes alas de mi perseguidor. Ocho garras afiladas y gruesas se acercaban lentamente.
- ¡Por favor! Si te estás burlando de mí, ¡detente! ¡Soy yo, Forest! - Grité con miedo, pero mi perseguidor parecía no ser un espíritu, ni un amigo del bosque.
Inmediatamente después, todo mi cuerpo fue atacado con un repentino shock. Dolorido, dejé caer la uva. Cuando lo hago, él (¿o ella?) se aleja de mí, persiguiendo la fruta que cae.
Bueno, su objetivo es la uva. Gracias a Dios, estaba pensando... Y en ese momento lo sentí. El pájaro negro ha dejado una profunda herida en mi ala.
Mi ala derecha no se mueve. La sangre flota en el aire.
¡No, eso es malo, me caigo!
Perdiendo el control, mi cuerpo giró y cayó al suelo.

Escena 2 -

El bosque ~ En la tierra de Elefhteria, "Wine Town" ~
Incluso cuando abro los ojos, no puedo decir dónde estoy.
Está rodeado de rocas talladas por todos lados, por lo que no puede ver el cielo. No se parecía a nada que hubiera visto en el bosque.
* ... No, he visto tal cosa antes *.
¿Ah, dónde fue? ¡Ah!, ya sé que es.
*La casa del leñador*.
* Sé que estoy en la casa de un humano, pero ¿cómo terminé en un lugar como este? Si no recuerdo mal, fui atacado por un pájaro negro en el cielo... *
El pájaro negro no era de Elefhteria. Pero a veces la manada se pierde en el bosque. Los recuerdo siendo bruscos, entonces Dios me dijo que tomara precauciones si me los encontraba.
* Que mala suerte. Se me cayó la uva... *
De todos modos, ahora tengo que volver al bosque inmediatamente. Otros espíritus probablemente se preocuparán por mí.
Pero... ¿cómo salgo de aquí?
Si estuviera en forma de espíritu, podría atravesar la piedra, pero no podría hacerlo como un animal. Si no recuerdo mal, un día salí de la casa de un leñador moviendo este tablero llamado "puerta". Algo así... ¿verdad?
Traté de acercarme a esta "puerta", batí mis alas. Pero,
-¡OUCH! -
Un dolor agudo me atravesó el ala derecha. Ahora que lo pienso, las garras negras de ese pájaro habían agarrado esa ala con todas sus fuerzas.
También, cuando miro, veo que a partir de mi cuerpo, mis alas están envueltas en una especie de tela, lo que hace que sea demasiado difícil de mover. A pesar de que traté de quitármelo de alguna manera, la tela se aflojó a mitad de camino y todavía estaba enredada en mi cuerpo.
* ¡Ay, maldita sea! *
-Oh, Dios mío, pareces estar en problemas.-
La puerta se abrió y entró una mujer. Ella sostenía una pequeña caja en su mano derecha, ¿podría ser la dueña de la casa? Parecía mucho más delgada que cualquier otro ser humano que hubiera visto en su vida. Esta anciana de pelo blanco tiene una expresión divertida, como si estuviera sorprendida de verme.
-Creo que Jimin no pudo atar bien tus vendas... Lo siento, pajarito.-
Dejó la cajita a mi lado y suavemente me levantó. Después de quitarme la tela del cuerpo, comenzó a envolverme de nuevo. Tenía una lesión mucho más grande que antes, pero curiosamente, podía moverme con más facilidad.
-Debemos detener cuidadosamente el sangrado hasta que la herida cicatrice. -
Ah, mira, que esa venda cubra mi herida. Nunca me he lesionado antes, así que no lo sé. ... ¿Eh? ¿Una herida?
... Esto es malo. No debería haber estado en forma de pájaro en primer lugar. Una vez que deshaga mi transformación, todas las heridas sanarán instantáneamente, entonces volver al bosque debería ser algo sencillo, ¿verdad?
¿Por qué no pensé en eso antes? Una vez que tomé mi decisión, inmediatamente... ¿Eh?
Traté de salir de mi transformación, pero no puedo volver a mi forma original. Cuando pensé por qué, rápidamente recordé la respuesta. Solo puedo transformarme mientras estoy en el bosque.
Oí que la puerta se abría de nuevo.
-... he llegado.-
La persona que habló cuando entró era un chico de cabello turquesa, con una expresión oscura en su rostro.
Sostiene una cesta grande con ambas manos.
-Bienvenido, Jimin.-
Mirando a la mujer levemente sonriente, el chico llamado Jimin dejó la canasta que sostenía en la esquina de la habitación, su expresión no cambió.
-Mamá, necesitas descansar.-
-Puedes decir lo que quieras, pero siento que si no tomo el sol una vez
mi salud será aún peor..
-Oh, ya despertó?-
- Sí, Jimin, el pajarito se despertó.-
Dijo "mamá", ¿eso significa que ambos son madre e hijo? La madre puso la cajita a mi lado. ¿Qué hay dentro? Intenté echar un vistazo.
* ¡Ay! *
Hay lombrices retorciéndose dentro.
Sonriendo de oreja a oreja, la mujer dijo: "Es hora de cenar". Tal vez para un pájaro normal sería un verdadero placer, pero como soy un espíritu, los gusanos... Será mejor que me contenga.
-Oh, Dios mío, no quiere comer.-
-Entonces, ¿qué tal si le das esto? -
Sin cambiar su expresión, Jimin se acercó a la cesta que había dejado en el suelo antes y sacó algo.
* ¡¿Oye qué?! ¡Es... la uva! *
Lleno de alegría inesperada, no pude evitar morderlo. Justo en frente de mí, la madre hizo una expresión de sorpresa.
- Por lo general, se dice que un pájaro pequeño come insectos... Es muy extraño, ¿verdad? Nunca había visto un pájaro con un plumaje blanco tan hermoso, tal vez sea la encarnación de algún espíritu-
-Eso no existe-
-Pero existen ~ Hay uno que devora una uva con avidez justo en frente de ti ~ -
-No hay tal cosa. No hay espíritus ni Dios en este mundo... Si los hubiera, Kook y yo no tendríamos que vivir una vida tan dura mamá...-
-Jimin...-
- Esta uva... Era de tan mala calidad que nunca podré venderlo, a pesar de que estaba maduro
después de cuidarlo durante tanto tiempo...-
¿Mala calidad? ¿Es realmente así? Es cierto que su forma está un poco raro, pero el sabor no está nada mal.
Volviendo a fruncir el ceño que parecía contener las lágrimas, Jimin me miró de nuevo. Él dijo: "... el pájaro lo tiene fácil" y volvió a la puerta.
-¿A dónde vas, Jimin? -
-... Donde el jefe. Me volvieron a llamar hoy.-
Jimin frunció el ceño y se fue.
Su madre parecía muy molesta, pero cuando se dio cuenta de que había terminado mis uvas, volvió a la canasta para traerme más.
- Lo siento mucho, pajarito. De hecho, es un muy buen chico. Te trajo aquí cuando te vio herida, así que perdónalo. -
La madre volvió a sonreír.
Pero de alguna manera pensé que no era una sonrisa genuina.
¿Qué es esa sombra que cubre sus corazones?
Han pasado dos semanas.
Aunque todavía me duele un poco, mi ala está curada. En dos o tres días, puede volver a volar en el cielo.
Su madre no está bien, por lo que siempre está en cama. Debido a esto, mi atención normalmente está en manos de Jimin.
-Chim, es hora de cenar.-
Jimin era frío al principio, pero poco a poco comenzó a mostrarme su sonrisa. Chimmy es el nombre que me dio. Es un nombre bonito, así que me gusta también.
Las uvas que Jimin dijo que no podía vender el día anterior en realidad se usaron como alimento.
-¿Te gusta Chim? -
* ¡Oh, sí, delicioso! *
Traté de responderle, pero fue como si me hubiera chirriado al oído. Pero a pesar de que no podemos hablar, Jimin realmente parece estar disfrutando su tiempo conmigo.
Me contó lo que le pasó durante el día. "Me equivoqué hoy", "Hoy me reprendieron por hacerlo mal", cosas así. ... Son casi siempre historias de sus fracasos. Parecía que era terriblemente torpe y desesperanzado.
Tal vez no notaron su expresión porque siempre estaba muy serio y concentrado en la tarea que tenía entre manos. A diferencia de cuando estaba frente a mí, Jimin básicamente no tenía emociones.
Para mí, un humano llamado Jungkook hizo una jaula con chatarra que recogió. Está muy deformado y lleno de agujeros. Es algo de lo que puedo huir fácilmente cuando tenga ganas, pero aún así lo hizo por mí, cubriendo con rasguños sus manos.
En la casa había una pequeña ventana. Como Jungkook colocó la jaula junto a la ventana, los días en que el clima estaba despejado, podía ver el mundo exterior.
Un día vi a Jimin y Jungkook trabajando en el campo con otros aldeanos. Mientras los demás hacían cosas como tomar descansos moderados, ellos trabajaban duro, sin descansar ni hablar con nadie más. A pesar de eso, su trabajo siempre era peor que el de ellos. Estaba claro que ambos chicos diferentes no tenían la habilidad, pero también pude ver que una de las razones de eso era que, en comparación con las herramientas de todos los
demás, las suyas estaban en mal estado. Aún así, ninguno de los otros fué a ayudarlos o echarles una mano; más bien, incluso hubo algunos que a veces los obstaculizaron, haciendo cosas como "tropezar" con ellos o pisotear sus tierras de labranza.
A pesar de recibir tan mal trato, la expresión de ellos no cambió ni un poco. Ellos siempre estaban inexpresivos, Jungkook intentaba mostrar una sonrisa, pero era muy falsa a mi parecer. También era así con su madre y Jimin, pero ciertamente su relación no era mala. La única vez que ellos mostraban una sonrisa genuina era cuando estaban conmigo.
Había una diferencia obvia entre ellos y las otras personas. Todos sus cabellos eran blancos, pero el de ellos era turquesa. Pensé que era hermoso el ver la forma en que sus cabellos brillaban cuando estaban a la luz, pero tal vez la causa de que fueran molestados era la diferencia en la apariencia.
Jimin tenía constantemente heridas en su cuerpo. Pude adivinar por sus historias que fueron provocadas en gran parte por equivocarse en el trabajo o caerse. Pero había veces en las que tenía heridas y contusiones
graves. Rasguños tan severos que no podría haberlos recibido simplemente por caerse. Estaba preocupado por él, queriendo saber qué pasó, pero en momentos como esos Jimin se iba directamente a la cama sin decirme nada.
Esas dos semanas, sentí... que había llegado a comprender a estas cosas llamadas "humanos" un poco más.
Al día siguiente, ambos se dirigían nuevamente al trabajo, y su madre dormía como una muerta.
Hacía sol. Pero no importaba adónde mirara, no podía ver ni a Jimin ni a Kook. Tal vez ellos habían ido a recoger fruta en el bosque. O tal vez estaban trabajando en algún campo que no podía ver desde ahí.
Escuché algún tipo de ruido desde la ventana. Al principio pensé que era mi imaginación, pero luego lo escuché nuevamente. Justo cuando me preguntaba qué era, una ardilla apareció repentinamente desde el marco de la ventana. La ardilla arrojó hábilmente su cuerpo a través de un agujero en la ventana, entrando.
-Finalmente te encontré, Forest.-
-... ¡Leaf!-
La verdadera identidad de la ardilla era Leaf, otro espíritu. Seguramente habían ido a buscarme.
-Has sido capturado aquí, ¿eh? Ven, regresemos rápido a casa.-
Con sus pequeñas manos, Leaf desató el pestillo de la jaula y luego me hizo un gesto para que saliera.
Mi oportunidad de volver a casa había llegado mucho antes de lo que había pensado. Con esto podría volver al bosque. Pero dudé en salir.
-¿Te vas a casa?-
Al sonido de una voz, me di la vuelta. La madre, que pensé que estaba dormida, en algún momento se había despertado y miraba en nuestra dirección.
-Tu amigo espíritu ha venido a llevarte, ¿eh?-
-¿Huh? ¿Cómo sabes que soy...?- respondí sin pensar. No creía que mis palabras llegarían a ella.
-Bueno, lo supe desde el principio.-
-Estás bromeando. ¿Puedes oírme hablar?-
-Hace mucho tiempo solía ser algo así como un chamán. Jimin no cree en ese tipo de cosas, así que me quedé callada.-
Me sorprendió eso. Había pasado mucho tiempo desde que conocí a un humano que no fuera Emilia que pudiera escuchar mis palabras.
-... Me cuidaste bien. Muchas gracias por salvarme.-
-Yo soy quien debería de darte las gracias. Fué solo por poco tiempo, pero mis dos chicos parecían realmente divertirse contigo.-
-... Sí, yo también me divertí.-
Incluso si no podía hablar con ella, me había divertido, hice unos amigos humanos por primera vez. Aunque tal vez si hubiera sido humano habría podido salir a jugar con ellos y escuchar sus problemas.
-Han pasado años desde que los vi sonreír genuinamente. Eres lo más parecido a un amigo que tienen, supongo.-
-¿No tienen amigos?-
-Puedes verlos por la ventana, ¿no? Las personas como ellos son rechazados por los Elefhterianos.
-Entonces, ¿las personas con cabello blanco son Elefhterianos y las personas con cabello turquesa no son lo mismo? ¿Tú también eres una Elefhteriana?-
-Si lo soy, aunque parece que todavía me rechazan por haber adoptado a esos dos...-
Si ellos eran sus hijos adoptivos, entonces ellos dos no eran realmente madre e hijos. Podían ser familia a pesar de no tener una relación de sangre, y también ser discriminadas solo por diferencias raciales. Los humanos eran
criaturas muy extrañas.
-Qué extraño que los humanos se metan con otros humanos sin ninguna razón.-
-Jaja. Supongo que es algo que un espíritu no puede entender. Oh, cierto. Llévate este recuerdo contigo.-
La mujer tomó un racimo de uva de la canasta y lo puso a mi lado.
-Gracias. De verdad, muchas gracias.-
Expresé mi gratitud una vez más, y luego intenté agitar mis alas dos, tres veces. Me dolió un poco, pero parecía que podía volar de todos modos.
-¡Volveré aquí a jugar de nuevo, lo prometo!-
Salté por la ventana con Leaf, que parecía haberse cansado de esperar. La madre me despidió todo el tiempo, sonriendo.
Llevando las uvas conmigo, me dirigí al bosque. Estaba triste. Quería decirle adiós a mis amigos.

Escena 3- ~País de blanco~
Jimin

Estoy tan exhausto, estoy arto de trabajar y recibir menos paga que gente propia de Elefhteria, estoy arto de que siempre sea tratado como mierda, solo... quiero desaparecer...
Para intentar desestreasarme fuí a recoger moras al bosque, aunque parezca tonto es algo que realmente me ayuda a despejar la mente, sin embargo cuando vi a aquel pajarito herido no podía simplemente ignorarlo, así que decidí volver a casa temprano, con suerte nadie podrá interferir y molestarme.
-Estoy en casa-
-Oh, hola Jimin, fué un buen día? Has llegado relativamente temprano, dejame prepararte comida a ti también- Ella es Miriam, ella es la única Elefhteriana que nos ha aceptado a Jungkook y a mí en su casa, llegamos aquí cuando éramos pequeños, fuimos el trofeo de la victoria de Elefhteria contra nuestra tribu natal, éramos los más jóvenes, solo teníamos seis y medio, cuando era niño creí que cuando crezca las humillaciones se acabarían, pero ahora, a mis dieciséis me doy cuenta que cada ves es peor...
-J-Jimin, ¡¿qué traes en tu mano!?-
-Lo encontré en el bosque, está herido, he venido a curarlo-
-Cada día me convenzco de que tanto tú como Jungkook no son fenómenos, más bien son las personas con el alma más pura.-
Por alguna razón sentí una especie de calor en mi corazón, me sentía amado.
-El botiquín está en el primer cajón del armario, sé cuidadoso.-
-Se-señora Miriam, ¿va a dormir?-
-Sí, cada día mi enfermedad empeora más, me aumentaron la dosis.-
-Eso... es malo...-
Hace un año la señora Miriam fué detectada con una rara enfermedad, la Gula, los vecinos dijeron que era una maldición que yo traje, se fueron esa misma tarde, a pesar de que parecía estar mejorando ha vuelto a recaer, el médico me dijo que ya no le quedaba tanto tiempo, dijo que la mejor solución para alargar unos meses más su vida era por medio de pastillas para dormir muy específicas, las pastillas "gift", si le ingieren en exceso pueden provocar la muerte, el médico dijo que lo seguro era tomar menos de un cuarto.
Cuando finalmente encontre el botiquín con cuidado puse la venda en el ala de aquel pequeño pájaro, ahora que lo veo bien, tiene unas hermosas plumas blancas, hasta un pájaro cumple más estereotipos de belleza que yo...
-Listo, ya estas pequeño-
-¡¡JIMIIIIIN!! ¿dónde te metiste?- Al parecer Jungkook ha llegado
-¿Qué haces con esa ave?-
-Lo encontré en el bosque, estaba herido-
-¡Es taaan lindooo!-
Así era Jungkook, siempre tan radiante, tan...felíz, hay días en los que siento un poco de envidia, despues de todo él nació en cuna de oro, en nuestra tribu, él fué el único al que le enseñaron a leer y escribir, sus padres eran los líderes, por ese mismo motivo fué llevado junto conmigo de trofeo, en aquellos días viviamos en una jaula parecida a las de ave, la señora Miriam al vernos en esa situación hizo de todo para sacarnos de allí y llevarnos a su casa, ella es una mujer que había perdido a sus dos hijos mientras daba a luz, despues de eso su esposo decidió irse con otra mujer que "sirviera para dar hijos" ella vivió en soledad muchos años y cuando nos llevó a su casa pude sentir aquel cariño de madre, aquel cariño que extrañaba, lloré en sus brazos, ella me dijo que todo estaría bien, quería creerle, pero en el fondo de mi corazon sabía que no era más que una cruel mentira.

Escena 4~ País blanco~
Jungkook

Siempre intento ser felíz, no... mas bien siempre intento sonreir, por Jimin, yo le hago creer que aún tengo esperanzas, yo le hago creer que aún quiero vivir... creo que al final todas esas cosas de mal gusto que me dicen a diario me estan afectando después de todo, aquel niño valiente y audaz finalmente está muriendo...
Me gustaría ser un rey o un príncipe, para purgar a todos los que me han hecho daño, pero es un sueño muy tonto, para empezar aquí en Elefhteria no hay reyes ni reinas, aquí la máxima autoridad es el alcalde, y el castigo máximo son 30 años de cárcel, y el periodo de alcalde es simplemente 6 años, soy un chico muy soñador, eso es lo que me decía mamá, aunque ya no recuerdo como se veía, el único recuerdo que me ha quedado es esa frase, la decía antes de cantar su canción de cuna, es un recuerdo cálido.
Ahora la unica persona de mi tribu es Jimin, aquel amable chico, el era de una familia de clase media, es lo único que sé de su vida antes de la tragedia que nos llevó aquí, hay días en los que simplemente quisiera volver a sentir ese calor familiar.
Hoy vi que Jimin estaba curando a un pequeño pajaro que encontró en el bosque, me pidio que le ayude a construir una jaula para que el pajarito no escape hasta que esté mejor.