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Al día siguiente Jimin despertó por una suave sacudida y una voz algo ronca y muy masculina, que le hablaba a pesar de estar en el mundo de los sueños.

– Buenos días, hyung – saludo el omega con estirándose un poco en la cama.

– Buenos días, cachorro – saludo el mayor con una sonrisa.

– ¿P-por qué me despierta tan temprano, a-alfa? – pregunto el omega en una suave vocecita soñolienta.

– Cachorro, son las nueve y media – dijo el alfa con una risita.

– Oh – dijo por lo bajo el omega.

– Si no, nos apuramos llegaremos muy tarde a la cita del bebé – dijo Yoongi acercándose a él con una bandeja con el desayuno.

– No se hubiera molestado hyung, solo con un vaso de leche y un pan tostado bastaba – dijo enternecido el omega.

En la bandeja había un tazón de fruta picada con yogurt, una rebanada de pan tostado y un vaso de leche.

– No puedo dejar que no desayunes bien, cachorro. Que por cierto yo ya desayuné. Mira mejor lo que te traje – dijo el alfa parado a un lado de él, dejando en sus piernas la bandeja con su desayuno.

– No te hubieras molestado, hyung.

– No es molestia, cachorro. Con esto damos por inicio con el cortejo.

El alfa le entrego en un plato pequeño una fresa bañada en chocolate blanco y líneas delgadas de chocolate negro.

– Hyung, ¿No se supone que el cortejo es con flores? – pregunto intrigado Jimin, sosteniendo sus cubierto para iniciar a desayunar.

– Lo sé, pero yo no soy el típico alfa, así que, que mejor que con comida rica y saludable. Además, esto lo puedes comer y las flores se marchitarán – dijo obvio, – Vamos tómalo y come, está muy rico.

Algo divertido por la explicación de Yoongi, le dio una mordida a la fresa, sintiendo el rico dulzón del chocolate.

– Es verdad, alfa. ¡Está delicioso! – chillo.

Bueno, luego la comes, primero desayuna. Se nos hace tarde para la cita en el hospital.

Asintiendo, termino rápido su desayuno y apurado se metió al baño para cambiarse de ropa. Yoongi haciendo lo mismo. Cuando ambos ya estaban listos se dirigieron al auto del alfa para marcharse. Jimin terminando de comer su fresa con chocolate en el asiento del copiloto.

Cuando llegaron al hospital, ya el reloj marcaba las diez con quince minutos. Algo tarde si su cita era a las nueve con veinte.

– Buenos días, soy Min yoongi. Mi omega y yo venimos a una cita en obstetricia, como vera se nos hizo muy tarde – le comento Yoongi a la recepcionista.

– Buenos días, señor Min... Sí, eso veo, el doctor Choi me dijo que le comentáramos que lo han cambiado de Hospital, pero que los deja con su mejor colega en esa rama – les dijo y ambos asintieron, – Pueden pasar, es en el consultorio número cuatro.

Ambos se despidieron con una venia que fue imitada por la recepcionista. Iban nervioso, no los podían culpar esta sería la primera vez que verían a su pequeño cachorro.

Hace un mes ya que se habían enterado de la existencia del bebé. Y de cierto modo les alegraba su existencia.

Dos toques a la puerta y el alfa recibió un fuerte "Adelante". Yoongi dejo que Jimin entrará primero y él le siguió, cerrando la puerta de tras de sí.

El aroma de roble y lluvia envolviéndolos de inmediato, Yoongi dándose cuenta que era una alfa. Soltó un gruñido inconsciente y enseño sus colmillos, llevando al omega detrás de él.

– Tranquilo, alfa – Jimin se posicionó a delante de Yoongi y dejo suaves palmadas en su pecho, siguiendo a su instinto de omega que lo mandaba a hacerlo.

– Buenos días, soy la doctora Hyejin, pero pueden decirme Hye – con su semblante relajado, ya acostumbrada a este tipo de situaciones.

– B-buenos días, soy Park Jimin y él es mi alfa, Min Yoongi – presento, sonrojándose por sus palabras.

– Oh, les daré unos minutos para que pueda tranquilizar a su alfa – dijo, para irse por otra puerta a la que entraron.

Jimin seguía dejando suaves palmadas en el pecho de Yoongi, sintiendo su cuerpo muy tenso. Dejando salir un poco de su aroma lo envolvió. Viendo como el rostro del alfa se relajaba, nunca dejo de sobar su pecho.

–¿Ya estas bien, alfa? – su voz volviéndose aterciopelada, – Tienes que dejar que me revise. Tenemos que saber cómo está nuestro cachorro, ¿Estás de acuerdo, alfa?

– Si, estoy bien – hablo Yoongi, su rostro todavía serio.

Jimin asintió y fue hablar a la doctora de nuevo, esta vez el alfa ya no le enseño sus colmillos, pero si le gruño.

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7/7

MINSAHORI☆

He aquí el último capítulo del maratón, tal vez mañana empiece con otro.

Nos leemos luego.

No te olvides de dejar tu voto, que no te cuesta nada. ^-^







¡¿EMBARAZADO?! ||YOONMIN||①Donde viven las historias. Descúbrelo ahora