Lady Shadow II: El retorno del caido

Capitulo 15

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                               María

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Las llamaradas salieron de mi cuerpo sin yo hacer o decir nada. Nunca me había pasado esto y era muy raro.
Se habían llevado a Hebe, Maia estaba llorando como nena de tres años.

Deimos estaba golpeando la pared con rabia e Icar intentaba calmarlo. Andy paso la mano por la espada de Fhobos y le dijo algo que no logré entender.
Lo único que logré escuchar fue; "Daría"

"Daría, Daría y Daría. ¿Quien carajos es Daría?"

Maia agarró mi mano y me miró, parecía ¿Preocupada? Agarró mi cara y movió mi cabello.

—No te quemaste, ¿Como carajos hiciste eso Mari?— suspiré.
Mi relación con ella era un amor-odio tremendo. Negué y sonreí intentando calmarla.

Andy se acercó a mí con cautela y Maia se escondió detrás mío. La de ojos rojizos sonrió y negó.

—No te voy a hacer nada zanahoria— mi hermana salió de mi espalda y se quedó a mi mano.
— María tienes que estar confundida, y más cuando a cada cinco segundos te llaman reencarnación— asentí con obviedad.

—Va a ser mejor que te lo muestre a que te lo cuente. — Fhobos estaba mirándome desde lejos con la mirada perdida.

—Maia, vete con Deimos e Icar. Intenta curarle las heridas de las manos a Deimos. — la pelirroja asintio ante las palabras de la azabache, la cual le dio un coso que sacaba de su cinturón 

Andy me agarró de la mano y me llevo con Fhobos. Miró hacia atrás y sus ojos se conectaban con los de Deimos e Icar. Con este último la mirada era más tierna y dulce.

—Fhobos quiere enseñarte algo. Y yo os voy a ayudar, dadme las manos. —

Agarre la mano de la azabache, la cual me la extendía con confianza. Luego la de Fhobos, el cual me miraba con nostalgia.
—Como me rompes las pelotas cuando me miras así wacho— una filosa sonrisa apareció en sus labios.

Andy cerró los ojos y una bruma violácea empezó a aparecer alrededor de nosotros.
El entorno que teníamos desapareció y aparecimos en otro. Columnas de mármol, estatuas tayadas aparecieron por todas partes.

Lo que me reventó el cerebro fue verme a mí misma pero con el pelo corto sentada en el suelo de rodillas. Al lado de un anticuado Fhobos con la cabeza en el regazo de esta.

—Ella es Daría— le mire con el ceño fruncido.
—Era la esposa de Fhobos — mire Fhobos. El miraba la escena con los ojos tristes. La escena paso a otra. Ahora yo o la supuesta Daría estaba tirada en el suelo en las piernas de una bella mujer, Fhobos todo ensangrentado corrió a ella.

Un desgarrador grito me entró en el tímpano.
"—¡Daria!—"

Era el Fhobos de la imagen el que gritaba. Andy me miró y suspiro.
—Ese fue el día de su boda, Zeus la mato.— le mire despectiva.

—Si una pena, y lo lamento mucho, pero aparte de que se parezca a mi un quilombo. ¿Que me incumbe esto?—

—Luego de que ella muriese, Fhobos corrió al inframundo a verla, pero su alma ya no estaba, quiero decir, ella renació. Y su alma fue renaciendo una y otra vez. Generación en generación. —

Hay ya caí en cuenta lo que quería decir, mire a Fhobos esperando recordar algo de uno de mis supuestos pasados. El con seriedad me miró.

—Yo soy la reencarnación de Daría— Andy asintió. Solté sus manos y volvimos a aparecer en la puerta de la casa.

Mire a Fhobos el cual entro en la casa. Andy coloco su mano en mi hombro e intento sonreír con calma. Icar se acercó creo que huyendo de mi pelirroja hermana.

—Tenemos que hacer algo— dijo Deimos desde atrás. Andy asintió y entro para hablar con Fhobos.

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Fhobos
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Ver mi pasado me partió el alma. La escena donde Daría acariciaba mi pelo y hablábamos de cosas al azar me removió el cuerpo entero. El mirar a María un martirio para mi corazón. Dudaba si quiera que alguna vez pudiese estar con ella sin no poder pensar en Daría.

De tanto pensar mi cabeza aunque inmortal con sentimientos humanos, no pudo soportar tantos pensamientos, e hizo que mi cuerpo fallase
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Me encontraba caminando hacia una sala, abrí las puertas de la sala donde me encontré a mi bella Daría acariciaba su vientre.
Mi madre sonreía mostrando sus inmaculados dientes, confundido cuestione a ambas.

—¿Ocurre algo?— mi hermano entro y salto sobre mi espalda riéndose, paso sus manos por mis hombros y sonrió.

—Que estás echo todo un semental, hay que preparar muchas cosas y espero que sepas limpiar culos de bebé.— mire a Daría, ella sonrió y asintio.

Corrí a ella y la abrace con fuerza besando su cara repetidas veces.

—Te amo, te amo.— dije dando vueltas con ella en mis brazos.

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El cuerpo ardió en llamas, la noche caía con pena sobre el cielo. El manto estrellado era lo único que nos daba luz aparte del fuego.

Había luna nueva, mi padre coloco sus manos en mis hombros y suspiro.
—Fhobos, hijo mio— me di la vuelta, y le mire. Llevaba horas llorando, estaba molesto, roto y angustiado.

—Estaba esperando un hijo mío, ni siquiera pude salvar a mi hijo. — el asinto y me abrazo estrujandome.

—Lo se mi valiente hijo, lo se. También me apena que la hayan matado, era muy buena persona.—

—Nunca tuvo miedo de mi.—susurre agarrando contra mi pecho la cadena que solía colgar de su cuello.

—Tu belleza nunca le asustó hijo mío—

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Cuando volví en si vi a Andy apunto de darme un puñetazo y a María intentando pararla. Ellas dos sonrieron al verme reaccionar.
—Fhobos, deja los puchos te están haciendo mierda— dijo la ojiverde.

Andy se echó a reír a carcajadas limpias con su ocurrencia, su risa se le contagio a María. Y las dos acabaron en el suelo descojonadose de mi

Buenas tardes señores, hoy cumplo 16 tacos, si me estoy haciendo vieja.

EL CUMPLEAÑOS DE ANDY ES EL DIA 13!!!!!

Más os vale felicitarla o os doy con un palo. Y Fhobos no os comparte del regalo que me ha dado Hermes.