› 18. 𝙀𝙮𝙚𝙨 𝙩𝙚𝙡𝙡.

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Despertar y verle completamente roto, con la mirada perdida en una pantalla que albergaba mensajes

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Despertar y verle completamente roto, con la mirada perdida en una pantalla que albergaba mensajes... esa era la peor sensación que Minah pudo sentir al abrir lentamente los ojos a su lado. Los párpados le pesaban, las sábanas estaban sobre sus cuerpos semidesnudos, cubiertos solamente por la ropa interior de ambos. El calor que Sunoo le transmitía era distinto a cualquier otro, aquella sensación de calidez sí era agradable, pero su rostro afligido no. El chico estaba recostado sobre una almohada, ella abrazaba su torso, y se aferró más a este, pegando su cuerpo completamente a de él, dándole al chico una ligera señal de que estaba despierta.

Sunoo era demasiado expresivo, y eso a Minah le encantaba, pero había veces en las que semejante virtud podía ser enfermedad. Sus ojos hablaban por sí solos como de costumbre, y odiaba que lo hicieran cuando era para expresar tristeza y algo más allá que ella no podía interpretar sin saber nada de la historia.

-Cariño... -sintió el cuerpo del chico temblar bajo su agarre, estremecerse por el apodo que ahora tenía una connotación muy diferente a la primera vez que lo llamó así y las mejillas de ambos ardieron. Sunoo la miró interrogante mientras hacía a un lado su móvil. Le sonrió, ella a él también, y acarició su abdomen mientras que él arregló un poco los cabellos azabache de esta, entrelazando sus dedos y masajeándola un poco a la par que los colocaba detrás de su oreja.

Minah soñaba despierta y, por un momento, su mente fantasiosa le jugó una mala pasada, haciéndole creer que todo estaba bien, que se encontraban en una casa de ambos, solos, sin nadie más alrededor y sin problemas en el exterior. Que los roles de profesora y alumno no existían... que todo era distinto, pero igual, porque con él en ese momento estaba de maravilla.

-¿Sucede algo? -interrogó, esperanzada por que Sunoo se lo contara.

Pero él negó, la situación comenzaba a irritarle.

-Puedes contarme de una vez qué pasa...
-Todo es perfecto tal y como están las cosas ahora -interrumpió él, dejándose caer de nuevo para terminar acostado junto a ella, sus cuerpos se rozaban y la conexión que sentían junto a la sensación de estar en casa era descomunal-, y no quiero que eso cambie.
-¿Por qué iba a cambiar?

Sunoo suspiró, desviando la mirada.
-Porque hablar de todo esto hace que el buen humor que siento cuando estoy a tu lado se derrumbe. Jamás me había sentido tan bien, no quiero que eso termine.
-Pero saldremos del campamento, tú volverás a adentrarte en tu vida y todo empeorará, tal vez no pueda hacer mucho, pero si lo sé podré al menos intentarlo, ¿no crees?

Sunoo tardó unos segundos en contestar, los cuales pasó inspeccionando los ojos de ella. No pudo evitar sonreír, aferrándose más a su cuerpo.

-Está bien... -resopló pesadamente-. Estoy cansado de mostrarme de esta forma? Yo...
-No tiene nada de malo, ya sabes que por mucho que te vea por los suelos, siempre te seguiré levantando.

Las palabras de Minah desataron los sollozos en Sunoo, que se ocultó en su cuello abrazándola de inmediato, bajo las sábanas. El corazón de ella se rompió, pudo jurarlo al sentir aquella sensación inexplicable de dolor al verlo romperse frente a ella, al notar cómo se agarraba a ella en busca de apoyo.

𝗖𝗢𝗟𝗗 | Kim Sunoo ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora