Sixth

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era jueves, se suponía que a las seis de la tarde iban a juntarse en la biblioteca y mateo le había estado diciendo a iván toda la tarde que seguro iba a clavarse ahí al pedo porque el otro no iba a ir.

y por joderlo todo el día con eso, iván llegó a considerarlo y ahora, mateo estaba obligado a quedarse con él aunque sea hasta que rodrigo llegara.

—ya son seis y diez, ¿nos vamos? estuve todo el día acá, quiero ir a comer algo —se quejó mateo parado al lado suyo en la puerta de la biblioteca.

—yo también estuve todo el día acá y no estoy rompiendo las bolas —murmuró mirando al final del pasillo.— si para las seis y veinte no llega, nos vamos

—y cuarto

—y veinte, no rompás las bolas... ¿y si vas a comprar algo de comer al kiosco? todavía no cerró —dijo aprovechando que él también quería comer algo.— ¿me traes algo?

—ah qué vivo que sos —chasqueó la lengua.— encima de que me tenés acá esclavizado te tengo que ir a hacer la compra... ¿unas galletitas o qué te compro? —preguntó e iván levantó los hombros.— me fijo que hay entonces

—pero apurate, no me gusta esperar solo como un boludo al lado de la puerta —le dijo mientras lo veía irse.

iván se acordó que tenía el número de rodrigo anotado y aprovechó a mandarle mensaje.

rodrigo carrera

hola, soy iván.
estoy en la puerta de la biblioteca ya

. . . 

ni siquiera le llegaban los mensajes y ya eran seis y cuarto, se estaba empezando a sentir boludo parado junto a la puerta sin hacer nada más que usar el celular.

—buenass —escuchó la voz de una chica delante suyo. rodrigo venía al lado suyo y los dos parecían medios agitados.— listo, te acompañé, me voy carre... chau —dijo la castaña de ojos verdes, yéndose y despidiéndose con la mano. parecía media apurada.

—no te voy a mentir, me había re olvidado y vinimos corriendo —admitió el petiso.— ¿todo bien?

—¿y tus cosas? —preguntó iván con el ceño fruncido, viendo que no traía nada encima. 

—me olvidé la mochila 

mentira, eso era más fácil que tener que explicar que tomás le escondió la mochila en algún lugar de la escuela por haberle echado la culpa de copiarse del trabajo práctico que, claramente, rodrigo le había copiado a él. 

iván murmuró un par de cosas que rodrigo no llegó a escuchar, seguramente alguna puteada o queja.

—igual no tengo nada de biología, al pedo traer las cosas si no tengo esa materia desde tercero —intentó excusarse mientras seguía a iván adentro de la biblioteca. era un lugar re callado, re gris y aburrido.— ¿hay alguien acá? —preguntó alto.

—shhh —escuchó al costado, viendo al bibliotecario sentado en un escritorio con cara de orto. 

—bueno, perdón —susurró levantando la mano en su dirección, miró adelante y vio que iván se había re ido.— eu, esperame 

fueron a unas mesitas viejas, todas escritas con lapicera, medias hechas mierdas y con un par de pijas dibujadas y puteadas a algunos alumnos que, probablemente ya ni estén en esa escuela. 

iván sacó los papeles que la profesora le había dado y los dejó en la mesa, miró a rodrigo y éste miraba sentado todo lo que había alrededor.

"¿éste chabón alguna vez vino a la biblioteca?" se preguntó.